TU DIA MAMÁ, TODOS LOS DÍAS DE MI VIDA
Recibí de tus entrañas la vida, supe caminar de tu mano por senderos inciertos.
Fuiste vigía de mis noches de desvelo.
Hoy tu frente marmórea es un recuerdo que papá quiso eternamente.
Me diste todo, abrigo cuando tenía frío, fortaleza cuando me caía, tus ojos verdes como la quietud de un lago alumbraron mi camino.
Juntas elegíamos las cosas más sencillas de la vida, la diminutas perlas que adornaban mi vestido cuando dejaba la adolescencia, la corona de flores silvestres que adornaría mi cabellera para la fiesta, vos sabías que no quería parecerme a una princesa.
Sin embargo cedí a tus ilusiones, de niña todo te costó demasiado trabajo, tejías tus sueños iluminada por las estrellas.
La luna se reflejaba en tus ojos grises, jamás volví a ver unos como los tuyos, la mujer que tenía los ojos color del tiempo.
Mamá cumplí tu mandato, me casé con el hombre de mi vida, pronto llegaron los nietos que tanto anhelabas y el destino impidió que los vieras crecer fuertes, sanitos, como a vos te gustaban los niños.
Aprendí todo de vos, mis hermanas dicen que soy un calco tuyo, no lo creo, vos tenías belleza externa e interna.
Con una palabra calmabas nuestros ímpetus juveniles, nos señalabas el camino que no tuviera piedras.
Recuerdo tus manos de nácar acariciando nuestros cabellos para calmar nuestras angustias.
Nos enseñaste el camino de la libertad, marcando diferencias con el libertinaje.
Mis hijos tienen todas tus referencias para caminar y comerse la vida de frente, con honestidad y ternura, ésa que siempre acompañó cada uno de tus actos.
Miro tus fotos, el papel está un poco amarillo por el paso del tiempo, tu sonrisa marca el camino correcto.
Mami me gustaría tenerte a mi lado, fundirnos en un abrazo sincero, pero el destino eligió para nosotras otros senderos.
Las azucenas florecen en mi jardín, guardé las semillas para que así fuera siempre, siento el perfume y tu presencia eterna.
Mamá tu nieto más pequeñito comenzó a dar sus primeros pasos, te hubiera gustado verlo tambaleando sobre sus piernitas, haciendo pucheros ante lo desconocido.
Hoy no estás físicamente, pero guardé tu recuerdo en un espacio de mi corazón, intenté enrejarlo, no pude, amabas la libertad.
Mami estás aquí para compartir cada momento, evoco a los ángeles para que esos seres alados te lleven todo mi cariño.
El almanaque dice que hoy es tu día, me revelo, tus días fueron todos los que acompañaron mi vida.
Te amo mamá, solo vos podés entenderlo.
Hoy quise escribir una carta para contarle a todos como eras, allí me di cuenta que la perfección no puede expresarse en palabras.
Se que estás en algún lugar, no adivino dónde, pero presiento tu ternura como antes, como siempre.
2007-10-17
04:18:27
·
5 respuestas
·
pregunta de
Sonia
7
en
Poesía