Clases de Quesos
Los distintos tipos de quesos vendrán determinados precisamente por las variantes introducidas en las sucesivas fases de su proceso elaborador.
Los quesos pueden responder a distintas categorías. Así, según la procedencia animal de la leche, tendremos los de vaca, oveja o cabra, que son los más normales en el ámbito de Occidente, aunque en otras latitudes puedan encontrarse quesos de camella, de búfala o de hembras de yacks tibetanos, de reno, de llama y de cebúes, entre otras especies.
Con todo, la mayor parte del queso que se fabrica en el mundo está hecho con leche de vaca. Y tampoco resulta rara la mezcla de las tres primeras o al menos dos de ellas.
Pueden clasificarse asimismo por el contenido de materias grasas, en porcentaje dentro del extracto seco.
Desnatados: aquellos a los que se ha extraído por completo, o casi, la materia grasa, que en todo caso estará por debajo del 10%.
Magros o semidesnatados: son quesos con menos de un 25% de materia grasa y más de un 10%.
Semi-grasos: los que tienen como mínimo un 25% de la misma, sin llegar a un 45%.
Grasos: los que ofrecen no menos de un 45%, sin alcanzar el 60%.
Extra-grasos: cuando el contenido de materias grasas no baja del 60% del extracto seco.
De acuerdo al proceso de elaboración tendríamos por otro lado que los quesos pueden venderse como:
Frescos: aquellos que llegan al consumidor al poco de fabricados, sin pasar por mayor transformación ni otra fermentación que la láctica.
Madurados: son los que además de dicha fermentación conocen otras nuevas en su masa, pasando por más transformaciones en orden a un mayor afinado. Dentro de esta clasificación deberíamos dividir de nuevo entre los de pasta blanda y los de pasta prensada.
Estos quesos serían el Roquefort, los Cabrales, Bleu d'Auvergne, el Gorgonzola italiano, el Stilton Inglés, el Camembert, el de los Bellos Austriano, el manchego, el Idiazábal, los de bola holandeses.
Fundidos: Son aquellos que se obtienen mediante la mezcla de una o más variedades de quesos, mediante tratamientos térmicos. Estos serían los quesos que se presentan en porciones, lonchas y bloques.
Conforme a la textura de la pasta otra clasificación vendría dado por el porcentaje de agua que contenga. Estos serían:
Pasta muy blanda: son aquellos que se pueden cortar con gran facilidad, incluso con una cuchara. Nos encontramos con afueg'l pitu de Austrias, el mató de Cataluñas y Mozzarella italiano.
Pasta blanda: son los tipo cremoso. Aquí encontramos el Brie, el Requeblochon o el Camembert franceses.
Pasta semiblanda: son más consistentes que los de pasta blanda. Estos quesos son fácilmente untables, aunque también pueden mostrarse a veces quebradizos. Los mejores ejemplos son los Quesos Azules o veteados, es decir el de Bavaria, el Danablu, el Roquefort o el de Cabrales.
Pasta semidura: a este grupo pertenece la mayoría de los quesos. Su consistencia permite ya el corte fácil en lonchas, que salen intactas. Ejemplo típico con los quesos llamados de nata, como los holandeses Edam y Gouda, los españoles de Ansó y Hecho.
Pasta dura: Estos quesos son de una consistencia muy dura, llegan a resistirse casi al corte, hasta el punto de tener que llegar a rayarlos. Por ejemplo el Parmesano, el Fiore, el Regusano o el Pecorino, todos ellos de Italia.
También podríamos hacer otra nueva división, clasificándolos por su corteza:
Ausencia de corteza: es el caso de la mayor parte de los quesos frescos, que bien carecen de forma o bien ofrecen la del molde, pero sin que su parte exterior difiera de su parte interior. Tales como gaztazarra del País Vasco o los debota, de fuente o de vixiga del Principado de Austrias.
Corteza natural y seca: Esta es la que forman la mayoría de los quesos al secar normalmente. Son susceptibles de cepillados, lavados y aceitados, entre otras cosas.
Corteza enmohecida: Esta corteza aparece cuando determinados microorganismos se desarrollan en la zona más externa. Con un tono rojizo solía ofrecerla el Cabrales, el Briey el Camembert.
Corteza artificial: Se trata de aquellos casos en que se presenta como un elemento incorporado externamente al queso y separable con facilidad del mismo, al no estar integrado con él. Acá entrarían el Cabrales, las de Castaño del Feuille de Dreux, el cebollino que recubre el Cabri doux.
2007-03-15 05:29:24
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answer #1
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answered by αи∂яєιтα εїз 6
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Ahi te van los de México:
queso chihuahua y queso Oaxaca (ambos chiclosos para fundir),
queso Chiapas y queso Cotija.- ambos secos y desmoronables. El de Cotija está solicitando la denominación de origen, exquisito por cierto.
Queso panela.- suave para botana en trozos
Queso ahumado .- parecido al provolone con un toque de humo, para degustar con vino.
Queso "fresco de Veracruz".- botanero.
Queso adobera de mesa y adobera para fundir.- Para quesadillas.
2007-03-17 20:25:49
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answer #2
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answered by vgomez_h 4
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