Un amigo que padece el VIH me dijo que nunca sintió todo el cuadro florido (fiebre, fatiga, pérdida de peso, diarrea, rash cutáneo), y que en su caso la manifestación más elocuente de que se presentó fue una gripe o resfriado recurrente que no remitía con nada. Dice que eso lo alertó de que sus defensas tenían problemas y por ello se practicó la prueba del VIH que terminó siendo positiva. En mi caso, ocurre lo propio, tengo un mes con una extraña gripe (hace cerca de 3 años que no sufría de gripe) y lo peor es que no se me quiere ir con medicamento alguno. Tengo gran congestión nasal, puntadas en ciertas zonas ganglionares (axilas, cuello, ingle), aunque bien puede ser sugestión por todo lo que he leído. Tengo el pecho cargado de mocos y totalmente congestionado y la respiración se me torna defectuosa, lo cual me induce a respirar por la boca. La lengua, entonces, me amanece blanca y con una capa blanca, algo vellosa, y la boca totalmente amarga como si fuera una resaca. Qué me dicen?
2007-01-07
17:00:27
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pregunta de
El Men
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en
Enfermedades de transmisión sexual