Fernando Silva dirige el hospital de niños en Managua, en vísperas de Navidad, se quedó trabajando hasta muy tarde. Ya estaban sonando los cohetes, y empezaban los fuegos artificiales a iluminar el cielo, cuando Fernando decidió marcharse. En su casa lo esperaban para festejar. Hizo una última recorrida por las salas, viendo si todo quedaba en orden, y en eso estaba cuando sintió que unos pasos lo seguían. Unos pasos de algodón, se volvió y descubrió que uno de los enfermitos le andaba atrás . Era un niño que estaba solo. Fernando reconoció su cara ya marcada por la muerte y esos ojos que pedían disculpas o quizás pedían permiso.
Fernando se acercó y el niño lo rozó con la mano....decidle a......(susurro el niño)....”decidle a alguien que estoy aquí”
Del libro de Eduardo Galeano
Esta historia me lleno de sensaciones y mientras trabajaba mi empatía, descubrí que mi tristeza también se debía a que muchas veces (ya en mi edad adulta ) me había sentido como este niño. Pensé en mi niño interior que solo estaba.... tan lleno de miedos.
Lo tape poniendo únicamente los recuerdos bonitos y luego me olvide de el.
Luego de este acontecimiento dialogue mucho con el y le prometí que nunca más lo dejaría solo. Había descubierto su existencia y
Me comprometía a ser un padre cariñoso con el.
En esta Navidad les deseo que junto a la conmemoración del nacimiento del niño Jesús....este niño interior que poseemos este acompañado con Jesús niño y crezca junto a El en un año de gran crecimiento sobre todo espiritual.
Un abrazo....Miguel.
2006-12-19
15:38:35
·
3 respuestas
·
pregunta de
miguel2ribo
3