Tal vez muchas mujeres temen hablar de esto por no ser catalogadas como malas madres... la verdad es que amo a mi hijo y ahora no podría vivir sin él. En un inicio, los primeros dos meses, estuve muy bien... en realidad no tuve mucho tiempo para preguntarme si estaba cómoda o no, pues tengo trabajo propio y empecé a trabajar cuando el tenía quince días de nacido. Cuando los días empezaron a correr, y entendí que mi rol era impostergable, y que efectivamente tenía que trabajar duro para la manutención de mi bebé y que todo lo que yo hacía iba dirigido a él y que estuviera donde estuviera estaba preocupada por él, entonces empecé a caer en depresión. Me ofusca tener tanto trabajo y tanta responsabilidad simultáneamente; debo admitir que antes de mi hijo, mi libertad era absoluta. Ahora la responsabilidad es absoluta y aunque no podría cambiarlo por nada, mi cuerpo ha empezado a reaccionar con ataques de pánico, transtorno de ansiedad, un continuo pensamiento de la muerte y esto me asusta
2006-12-13
07:02:48
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9 respuestas
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pregunta de
Martza C
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