Unos regalos navideños diferentes
En Navidad, los mensajes publicitarios van empapados se sentimientos entrañables en defensa de valores familiares y de elogio de la solidaridad. Sin embargo, la canalización de todos estos sentimientos va siempre encaminada a la consecución de un claro objetivo: incrementar las ventas bajo un asumido despilfarro navideño, sin tener en cuenta sus repercusiones sociales y ambientales.
Por ello proponemos que en vez de dedicar tiempo a estar en interminables colas en centros comerciales, se dedique ese tiempo a pensar en unos regalos diferentes. Y que se sea crítico con la publicidad y no creamos ciegamente los sueños que nos vende.
Echar la vista atrás para ver que, no hace tanto tiempo, éramos felices celebrando la navidad de otro modo, puede ayudar a ver que hay otros modelos diferentes al consumo desenfrenado.
En los juguetes
El bombardeo publicitario que empieza más de un mes antes de que llegue la navidad no olvida a los más pequeños de la casa, y crea para ellos un montón de anuncios de juguetes. Según la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ) en estas fechas se compran el 75% de los juguetes que se venden cada año.
Muchos padres y madres, sometidos a la presión de sus hijos e hijas, acaban por convencerse de que para demostrar lo mucho que les quieren les tienen que comprar más regalos, y terminan sometiéndose a la dictadura de la publicidad olvidando alternativas de consumo más justas social y ambientalmente. Aquí mostramos algunas de ellas:
• Buscar juguetes de artesanía local.
• No comprar juguetes sobre embalados.
• Asegurar que son juguetes no sexistas ni bélicos.
• Buscar aquellos que estimulen la creatividad.
• No comprar juguetes que usen pilas.
• Asegurar que son adecuados a cada tipo de edad.
• Mirar que sean de materiales naturales y biodegradables.
• Asegurar que se esté pagando el producto, y no su publicidad.
• Además, lo más importante es que es posible jugar sin juguetes.
Árboles de navidad y otros adornos
Los abetos y otras pináceas se han convertido en un objeto de consumo de usar y tirar, que va del monte o el vivero al vertedero después de pasar la navidad en una casa. Llama la atención que haya viveros dedicados exclusivamente a la producción de árboles que van a la basura (alrededor de 2.000.000 al año), en un país erosionado y con graves riesgos de desertificación.
Otros adornos navideños suponen también enormes impactos. La utilización ornamental de los acebos en Navidad ha conducido a que se encuentren en grave peligro de desaparición, con los graves daños que esto supone para el ecosistema en el que se desarrollan. Esto mismo ocurre con los musgos, que se utilizan como adorno en belenes.
Por último, la fiebre consumista ha llegado a otras especies vegetales, como los ruscos o el muérdago, que están siendo recolectadas de forma insostenible.
Antes de comprar un regalo, reflexiona...
• Lo primero que hay que hacer antes de comprar algo es reflexionar sobre si realmente se necesita.
• Una vez que se ha decidido adquirir el producto, es muy importante intentar averiguar cómo ha sido fabricado, si en su proceso de producción se ha perjudicado al medio ambiente o a algún ser humano.
• También hay que pensar cómo repercute su utilización en el medio ambiente.
• Es importante tener en cuenta que siempre va a ser más sostenible comprar aquello que hayan sido producido lo más localmente posible.
2007-12-21
04:55:29
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13 respuestas
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pregunta de
Anti Todo
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