Va artículo que te explicará tu pregunta.
Suerte.
EL CLÍTORIS DURANTE LA RELACIÓN
por Catherine Yronwode
[translated by Jaime Segura]
A mediados de los 90, cuando la red era menor, había un simpático pequeño grupo de news
llamado alt.sex.wizards. Era un lugar amigable, una comunidad virtual en la que cualquiera
podía preguntar sobre sexo, y alguien -o varios- le responderían sinceramente y sin
enjuiciarle. La mayoría, no todos, de los que planteaban preguntas eran adolescentes, pero
como todo esto sucedía antes del clamor desorbitado para censurar materiales sexuales
explícitos, no teníamos problemas con ello. La mayoría, no todos, de los que contestábamos
las preguntas (los magos-wizards), teníamos 40 años o más, la mayoría con hijos. Disfrutábamos
respondiendo las preguntas, incluso cuando eran las mismas una y otra vez. Yo era una entre
cinco mujeres maduras que respondía preguntas todos los días acerca de orgasmos femeninos,
sobre dar de pecho o si a las mujeres realmente les gustaba el sexo oral. Había casi el mismo
número de hombres maduros que respondían día tras día a preguntas sobre orgasmos masculinos,
sexo homosexual, y técnicas de masturbación.
Entonces se inventó el spam. Pronto el grupo de news fue invadido de anuncios tipo 900 (sexo
telefónico), o *** Caliente y Sucia (páginas porno en la red), sobrepasaron a las preguntas
acerca de sexo. En unos pocos meses, la comunidad de magos se fue cada uno por su camino,
Bonnie, Elf, Rob... docenas de colegas que conocí brevemente y nunca he vuelto a encontrar.
Echo de menos alt.sex.wizards. En su memoria, he resucitado algún material que escribí y que
apareció allí. No es de sexo sagrado per se, pero al igual que el artículo sobre el control
masculino del orgasmo, se refiere a técnicas que cualquiera entrenando para mago querría
conocer.
Jazzmine escribió:
> Nunca he tenido un orgasmo durante la relación. La relación
> es todavía placentera, pero nunca alcanzo ese punto.
> ha hecho alguien al respecto para alcanzar el orgasmo?
> si lo has hecho y funciona, por favor, dímelo para
> poder probarlo.
Y katgrrl escribió:
> Me gustaría saber -especialmente por mujeres ahí fuera- la forma más fácil
> para las parejas para conseguir el orgasmo vaginal. He oído que la mayoría de las
> mujeres sólo los tienen después de haber estado con su pareja mucho tiempo...
> También he oído que ciertas posturas parecen conseguirlo más fácilmente.
> Qué piensas de ello?
y Stacey escribió:
> Asumiendo la verdad, que las mujeres se sacian a través de la estimulación de su
> clítoris (no usualmente logrado durante la relación), un pene entrando y saliendo,
> tenga prepucio o no, no lo conseguirá. Punto. No importa el macho esté tres horas
> o tres minutos antes de correrse. Simplemente no lo hará.
Primero, todos sabemos, bueno, la mayoría, que el clítoris es el órgano análogo al pene en
el hombre. Es el asiento para las sensaciones nerviosas conocidas como orgasmo.. Pedirle a
una mujer que tenga un orgasmo sin estimulación directa o contacto sobre su clítoris es
exactamente, precisamente, lo mismo que pedirle a un hombre que tenga un orgasmo sin
estimulación o contacto con el pene. PUEDE hacerse, pero ten presente que no es corriente
y puede no ser particularmente recompensante.
El tubo de la vagina mismo tiene muy pocas terminaciones nerviosas estimulables sexualmente
(aunque sí tiene terminaciones nerviosas que sienten la presión). Las terminaciones nerviosas
de la vagina aumentan hacia la parte exterior de ella, y están más concentradas donde se curva
hacia la apertura de la vulva y arriba hacia el clítoris.
El tejido del escroto (no de los testículos) de un hombre está formado por tejido fetal
análogo al de los labios vaginales menores en la mujer. La costura inferior en el medio
del escroto es donde los labios se dividirían en una mujer. Las dos áreas tienen la misma
presencia de terminaciones nerviosas, así que pedirle a una mujer que tenga un orgasmo por
la sóla estimulación de los labios de su vulva sería lo mismo que pedirle a un hombre que lo
tenga estimulándose sólo su escroto. PUEDE hacerse, pero como dije, no es usual.
La mayor parte de las mujeres alcanzan orgasmo mediante la fricción del clítoris contra el
hueso púbico del hombre mientras están enlazados en la relación, o a través de la estimulación
del clítoris, mediante contacto manual u oral.
Pero Sigmund Freud, el descubridor del psicoanálisis, afirmaba que las mujeres que tuvieran
orgasmos de clítoris eran infantiles. Opinaba que para ser verdaderamente madura, una mujer
debe tener solamente orgasmos vaginales. Su teoría ha sido largamente desacreditada,
psicológica y anatómicamente, pero aún algunas mujeres reportan orgasmos vaginales sin
fricción del clítoris.
Para comprenderlo, debes comprender la forma en la que el clítoris está formado y como se
lleva en el cuerpo.
La mayoría de los hombres -y también demasiadas mujeres- piensan que el clítoris es un botón
diminuto de carne sensitiva ubicado por encima de la vagina, al nivel de la base del hueso
púbico en la mujer. Esto NO ES VERDAD.
El clítoris es un tallo de tejido eréctil, construido igual que un pequeño pene, con una
cabeza sexualmente sensitiva en su punta (el glande), justo igual que la cabeza de un pene
pequeño. Viene equipada con un prepucio, al igual que un pene sin circuncidar, y durante la
excitación sexual, el prepucio se retrae, exponiendo el glande del clítoris, el pequeño botón
que la mayoría de la gente piensa que es el órgano completo.
A diferencia del tallo del pene, que cuelga libremente, el tallo del clítoris reposa
verticalmente a lo largo de la línea divisoria del cuerpo, cubierto y nunca visible, justo
debajo de una capa de grasa y piel. La raíz del tallo del clítoris alcanza la vagina hacia
abajo. Para imaginarlo mejor, recuerda que los labios vaginales son análogos al escroto y
ahora piensa en la manera que la raíz y el tallo del pene emergen del área del escroto y
visualiza la raíz y el tallo del clítoris (cubierto debajo de una capa de grasa y piel)
emergiendo de la parte superior de los labios vaginales y terminando en el pequeño glande,
que asoma por fuera de la piel. ¿Lo cogiste?.
Pero la gran desventaja de tener el clítoris sujeto en un lugar bajo la piel es que la mujer
tiene poca libertad de movimento para la estimulación. Imagina si el pene estuviera
quirúrgicamente unido a la carne del abdomen, con solamente el glande libre en su punta y no
hubiera forma de empujar adentro y afuera. Un hombre estaría a merced de la habilidad de su
pareja o de su aceptación de su limitado margen de movimiento tendría que restregar su cuerpo
arriba y abajo a lo largo del cuerpo de su pareja para estimular el pene en la misma forma
que ella lo hace con su hueso púbico (algunos hombres hacen esto cuando se masturban frotándose
contra su colchón) o el habría de pedirle a ella que acariciara el glande de su pene de la
forma que ella le pide a él que acaricie el glande de su clítoris.
Parece como si las mujeres lo tuvieran duro, no? ¿Como que lo tienen difícil para saciarse por
causa de la posición fija del clítoris? ¡No es así!
Hay una ventaja distinta en tener el clítoris fijo en un lugar: cualquier tirón hacia debajo
de la piel que cubre la raíz y el tallo del clítoris es sentido directamente en el glande, y
es tirado hacia abajo a través del prepucio. Así, la fricción del pene del hombre entrando y
saliendo de la vagina puede, tirando y soltando la raíz y el tallo del clítoris, producir una
estimulación indirecta en el glande del clítoris. Muchas mujeres son capaces de tener orgasmos
como este, aunque el proceso, siendo indirecto, puede tomar más tiempo que llegando al orgasmo
mediante la fricción/estimulación directa del glande del clítoris. Al no ver el clítoris
completo bajo su cubierta de piel y grasa, muchas mujeres (y sus parejas masculinas) piensan
que no han estimulado el clítoris (con lo que quieren decir el glande del clítoris) -cuando en
realidad lo han hecho- y así llegan a la idea de que han alcanzado un orgasmo estrictamente
vaginal.
Hombres, imaginar ser masturbados por una mujer que sólo juegue con la raíz y el tallo de
vuestro pene y con la piel del escroto, pero nunca toque la punta del mismo. ¿Os correríais?
¿Os correríais quizás, después de un buen rato? ¿Sería posible, no?
Lo que hubierais experimentado (lo llamaremos un orgasmo de tallo de pene), sería lo
equivalente al orgasmo vaginal de Freud.
¿Piensas que esta forma de juego sexual sería tan placentero como el tener a tu pareja tocando
o lamiendo la cabeza sensitiva de tu pene? ¿Sería tan placentero como deslizar el glande de tu
pene dentro y fuera de su vagina caliente, blando y húmedo? ¿Es la estimulación del tallo todo
lo que desearías tener cada vez que haces el amor? ¿Es la estimulación del tallo del clítoris
todo lo que querrías que experimentara tu compañera cada vez que hace el amor contigo?
El orgasmo vaginal existe, como también el orgasmo del tallo del pene. Pero ninguno es buscado
mucho por la mayoría de los hombres y mujeres. La mayoría busca la estimulación de los glandes
del pene y del clítoris. Y eso es por lo que recomiendo que en el interés de la gloria conyugal,
hombres y mujeres ignoren las admoniciones e instrucciones de expertos como Freud y sus
seguidores, y hagan lo que a cada uno le guste más.
Según reza un viejo refrán «Lo que es salsa para el ganso es salsa para la oca». Es decir, los
hombres y las mujeres se parecen más de lo que se diferencian. O como dice la Biblia «Haz a los
demás lo que quisieras que te hicieran». Esto es, deja que el placer mutuo sea tu mejor y más
sincero guía.
Desafortunadamente, o es lo que me parece, cuando el ridículo concepto de Freud del orgasmo
puramente vaginal fue tirado a la papelera de la historia (¡Hay que le vaya bien!), lo
sexólogos centraron su atención solamente en el clítoris. O para ser más exactos, en el
GLANDE del clítoris. A los hombres se les enseña frotar y lamer el pequeño botón y asegurado
esto, y sólo esto, satisfarían a sus parejas. A las mujeres se les enseñó -especialmente por
unos pocos autores feministas rabiosos- que como era casi imposible para una mujer tener un
orgasmo vaginal, el sexo de pareja ideal para una mujer sería el de ser masturbada o lamida.
La fricción del pene dentro y fuera de la vagina, clamaban estos autores, era inútil cuando se
trataba de estimular a una mujer hasta el clímax.
Aunque esta noción -de que el sexo del pene-en-la-vagina rara vez lleva a la mujer al orgasmo-
pueda ser verdad para algunas mujeres, NO lo es definitivamente para todas, o incluso la mayoría.
Y para un determinado número de mujeres, incluida yo, los orgasmos más satisfactorios (a los que
llamo los orgasmos de papas empanadas), los que son ENORMES y siguen y siguen, SÓLO ocurren
durante el sexo del pene-en-la-vagina.
¿Qué hago para que el orgasmo del pene-en-vagina sea tan alcanzable -y adorable- para mí? ¡Pues
llevar a mi clítoris a una excursión!
Desearía poderles dibujar una ilustración aquí. Lo intentaré con palabras. El clítoris es un
órgano análogo al pene situado por encima de la abertura de la vagina. En la mayoría de las
mujeres sólo su punta (el glande) está a la vista, y entonces sólo cuando uno retrae el prepucio
clitorial o cuando el clítoris se erecciona y emerge del prepucio.
Internamente, el tallo clitorial tiene una pequeña inclinación. Si cortaras el cuerpo de una
mujer de arriba a abajo en dos mitades iguales, el clítoris parecería como un pequeño dedo
encorvado, del cual sólo la parte superior emerge del prepucio, o como un pequeño narciso que
aún no se ha abierto y está inclinando su ******* hacia abajo y hacia fuera.
El clítoris es flexible y eréctil. Durante la erección se alarga y su curvatura se endereza
a una mayor o menor magnitud, dependiendo de la anatomía personal, hasta que alcanza el ángulo
de un narciso abierto, aún apuntando hacia fuera, pero un poco menos hacia abajo. No sólo el
clítoris es flexible, sino que su tallo está sujeto por unos pequeños ligamentos internos que
le permiten moverse arriba y abajo en la línea media del cuerpo, raíz y todo.
La raíz del tallo de este pequeño órgano se asienta, en la mayor parte de las mujeres, justo
en la porción baja del hueso púbico, llamado el sínfisis en terminología médica.
Volviendo a mirar el cuerpo desde el corte anterior, el sínfisis es un hueso oval. Su perfil
está configurado como el de un balón de rugby puntiagudo, teniendo el eje largo más o menos de
arriba a abajo, el tallo del clítoris situado en el ángulo recto respecto al eje del oval, y
la curva clitorial partiendo de la punta del clítoris apuntando hacia fuera o abajo, dependiendo
de la variación individual. Entre el hueso púbico y el clítoris hay una capa de grasa y músculo,
una pequeña almohadilla para él.
Los hombres también tienen un sínfisis o hueso púbico. El suyo está ubicado encima de la raíz
de su pene, y también lo cubre una capa de músculo y grasa, acolchándolo.
En la relación, si la pareja se ajustan bien en términos de tamaño y postura, la mujer se
posicionará de manera que su clítoris se ubique entre su sínfisis y la de su compañero. Esto
se llama cogida del clítoris. Entonces, al final de cada empuje del hombre hacia adentro, ella
hará un giro de su pelvis hacia abajo y hacia fuera que presionará su clítoris firmemente entre
los dos huesos y lo frotará hacia arriba. Eso se llama excursión clitorial.
El efecto de la cogida clitorial y la excursión es mover el clítoris hacia abajo mientras entra
el pene, y hacia arriba (bajo presión y fricción) al final del empuje del pene. Así, con cada
empuje del pene, el glande del clítoris es frotado a lo largo del hueso púbico acolchado de su
pareja. El empuje-fricción hacia arriba del clítoris -causado por el giro pélvico hacia abajo
que ella hace al final del empuje hacia dentro del pene- es la más placentera de las dos
direcciones.
El alcance del empuje clitorial puede variar desde media pulgada a una pulgada y media,
dependiendo del tamaño del clítoris, de cuánto se proyecta, cuán curvo es, y cuán ágil es la
mujer moviendo su pelvis.
Cualquier mujer que haga esto experimentará definitivamente la estimulación clitorial durante
la relación. Una mujer en un estado normal de excitación bien entrenada en la cogida del
clítoris y en la excursión puede alcanzar el orgasmo durante la relación con la misma vivacidad
que con la masturbación, si quisiera. También puede aprender a controlar sus movimientos para
prolongar la relación durante un largo tiempo, especialmente si su pareja está por cooperar.
Moviendo sus nalgas hacia fuera y reduciendo la cogida clitorial, ella puede evitar correrse
demasiado pronto mientras su pareja continua el empuje adentro y afuera.
Si ella deseara que él se ralentizara mientras ella se acelera, puede indicar (mediante
cualquiera de las formas de comunicación que la pareja use), que él debería acortar sus
empujes durante unos momentos. La fricción reducida del pene a un empuje de unas dos pulgadas
le evitará la eyaculación precoz, mientras le permitirá a ella experimentar un completo empuje
de excursión clitorial de pulgada y media, llevándola cerca al orgasmo.
Si desea verdadero control, debe ponerse sobre el hombre o tumbarse ambos de lado con las
piernas de ella alrededor de él. Estas posiciones le permitirán el más completo margen de
movimientos y compensarán ampliamente la menor longitud de su herramienta.
Con la práctica, la estimulación clitorial completa durante la relación vaginal y el pausado
orgasmo mutuo llegarán. Hablo como alguien que lo sabe.
2007-09-06 14:12:28
·
answer #2
·
answered by galileo1953 7
·
1⤊
0⤋