La Celestina es una de las obras cumbres de la literatura española, escrita por Fernando de Rojas. La Celestina es una obra de transición entre la Edad Media y el Renacimiento, considerada una de las bases sobre las que se cimentó el nacimiento de la novela y el teatro modernos.
El género de La Celestina es una cuestión polémica. Es en el siglo XVIII cuando el problema del género se plantea. La inflexible preceptiva neoclásica siente la necesidad de encajarla en un modelo preexistente. Pero los férreos moldes de los géneros dieciochescos imposibilitan ese propósito, lo que deterioró su consideración entre los idealizantes escritores del Neoclasicismo, como Moratín, que la llamó novela dramática para denotar la mezcla de géneros y la originalidad de la obra. Otro crítico y escritor, este de la Renaixença catalana, Buenaventura Carlos Aribau, la llamó novela dialogada. Se resistían a encajarla en el drama.
La CelestinaEl hecho es que se trata de un texto totalmente dialogado y cuya extensión y saltos temporales y sobre todo espaciales, la hacían irrepresentable en su momento y destinada a la lectura en voz alta, como era la costumbre en la época. Ya entrado el siglo ** y con extensos medios escenográficos, la obra pudo representarse íntegra o resumida
Prólogo: encuentro de Calisto y Melibea en la escena I.
Primera parte: intervención de Celestina y los criados y muerte de éstos. Primera noche de amor.
Segunda noche de amor: tema de la venganza. Muerte de Calisto, suicidio de Melibea. Llanto de Pleberio.
Los temas de la obra (que señalan y marcan los prólogos, en vistas a orientar la interpretación de la obra en su tiempo) los declara el mismo titulillo introductorio:
Compuesta en reprensión de los locos enamorados que, vencidos de su desordenado apetito, a sus amigas llaman y dicen ser su Dios, asimismo hecha en aviso de los engaños de las alcahuetas e malos e lisonjeros sirvientes
La obra comienza cuando Calisto ve casualmente a Melibea en el huerto de su casa, adonde ha entrado a buscar un halcón suyo, y la requiebra. Esta lo rechaza, pero ya es tarde, ha caído violentamente enamorado de Melibea.
Por consejo de su criado Sempronio, Calisto recurre a una vieja prostituta y ahora alcahueta profesional llamada Celestina quien, haciéndose pasar por vendedora de géneros diversos (peines, alfileres, ovillos, afeites, hierbas e incluso oraciones, género este que es el que compra Melibea: una oración contra el dolor de muelas), puede entrar en las casas y de esa manera puede actuar de casamentera o concertar citas de amantes; Celestina también regenta un prostíbulo con dos pupilas, Areusa y Elicia.
El otro criado de Calisto, Pármeno, cuya madre fue maestra de Celestina, intenta disuadirlo, pero termina despreciado por su señor, al que sólo le importa satisfacer sus deseos, y se une a Sempronio y Celestina para explotar la pasión de Calisto y repartirse los regalos y recompensas que produzca.
Mediante un pacto con el diablo, Celestina, consigue que Pármeno se ponga de su parte ya que hace que una de sus pupilas lo enamore y que Melibea se enamore de Calisto por la misma magia y como premio recibe una cadena de oro, que será objeto de discordia, pues la codicia la lleva a negarse a compartirla con los criados de Calisto; éstos terminan asesinándola, por lo cual se van presos y son ajusticiados.
Las prostitutas Elicia y Areusa que han perdido a Celestina y a sus amantes, traman que el fanfarrón Centurio asesine a Calisto, pero éste en realidad sólo armará un alboroto. Mientras, Calisto y Melibea gozan de su amor, pero al oír la agitación en la calle y creyendo que sus criados están en peligro, Calisto salta el muro de la casa de su amada, cae y se mata. Desesperada Melibea se suicida y la obra termina con el llanto de Pleberio, padre de Melibea, quien perdona a los amantes.
Personajes
Celestina es hedonista, avara y vital. Conoce a fondo la psicología del resto de los personajes, haciendo que incluso los reticentes con sus planes cedan a ellos. Sus móviles son la codicia, el apetito sexual
Calisto es un joven a quien solamente le preocupa satisfacer sus deseos, atropellando a quien sea para conseguirlo
Melibea es una mujer vehemente, que pasa de la resistencia a la absoluta entrega a Calisto sin apenas tránsito de duda
Pármeno es quizá el personaje más trágico de la obra, porque es corrompido por todos los demás personajes.
Sempronio hace tiempo ya que ha perdido cualquier ideal sobre los amos a los que sirve y solamente pretende aprovecharse de ellos con egoísmo y codicia.
Las prostitutas Elicia y Areusa odian en el fondo a los hombres y a las aficionadas como Melibea
Alisa es la madre de Melibea
Pleberio es el padre demasiado ocupado que ama a su única hija y ve cómo su vida pierde todo sentido al suicidarse esta
Hay tres temas principales en la obra, ambos señalados por el propio autor: la corrupción, a fin de prevenir "contra los malos y lisonjeros sirvientes" que degradan a sus amos; la prevención contra el loco amor o el blasfemo amor cortés, que hace que los amantes crean "que sus amadas son su dios" y un tema más profundo, dramático y filosófico, según el cual la vida humana es una constante y feroz lucha entre opuestos: jóvenes contra viejos, inocencia contra corrupción, ignorantes contra sabios, pobres contra ricos, siervos contra señores, mujeres contra hombres, el bien contra el mal... y viceversa. Cada valor engendra dentro de sí su vicio... y viceversa
2007-03-28 01:44:01
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answer #2
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answered by Tere B 7
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