"y traigo mil canciones
como leñitas secas
rescoldo de fogones
que invitan a matear"
¡¡¡ARRIBA EL CHANGO RODRÍGUEZ!!!
(Al ver tu perfil, Ángela, leí la primera parte y no me aguanté.)
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.El jueves, después que los González se fueron, me rendí. Esa vez no prepararía el trabajo que tenía para el día siguiente. No es que el juego de cartas haya estado aburrido y fuera el origen del cansancio demoledor que sobrevino; más bien parecía que la comida tan abundante y pesada hizo lo suyo. "No hay que comer comida comprada en cualquier lugar, y menos si es muy barata" me advierte siempre con su especial sabiduría, Mariela. Confío absolutamente en su fina intuición, en sus consejos siempre oportunos, en su capacidad de ver más allá y de detenerme a tiempo cada vez que estoy por "meter la pata". Pero esa vez no me pareció de buenos amigos decirles a los González que no trajeran nada: estaban felices de venir esta vez con las manos llenas. Ellos, que siempre caen con las manos vacías a cuanta reunión van... ¿cómo iba yo a negarles el placer de la generosidad diciéndoles "dejen, no traigan nada, que Mariela cocina". No, no quedaba bien. Aunque, creo que es la última vez que les permito traer algo tan grasoso, barato, de tan mal aspecto.
Cerré todo, apagué las luces y me dispuse a dormir como un tronco.
Ni los truenos ni la inquietante silueta de la casona vecina lograrían despertarme. Eso creí.
Me pegué al cuerpo de Mariela; siempre adoré dormir abrazado a sus voluptuosas formas,su espalda en mi pecho, sus increíbles nalgas contra mi pubis, sus delicadas piernas contra mis piernas. Carne con carne, una sola carne. Un solo aliento. No sé cuánto estuvimos así, lo cierto es que el relámpago dejó como de día la habitación, el sonido infernal nos levantó de la cama.
Al instante oímos el alarido desgarrador. Me asomé por la ventana. La fantasmagórica imagen de la casa abandonada se había vuelto más siniestra recortándose contra las nubes encendidas por mil relámpagos. Cada fogonazo celestial hacía ver a la maldita construcción más y más extraña. Sus dos ventanas superiores parecían ojos vivos que nos obsevaban, los dos árboles sin hojas que la rodeaban parecían brazos levantados con sus dedos que se crispaban al ritmo de los destellos...
Y de pronto, una idea loca: ¡se estaba acercando hacia nosotros! ¿Era así o me parecía? ¿Nos devoraría si se nos acercaba lo suficiente? Cada relámpago la hacía ver más cerca... más amenazante... maligna... De repente, una luz se enciende iluminando una de las ventanas... pero ¡no puede ser, si está deshabitada desde hace años! ¡Ahora se enciende el otro ojo! Sus dos árboles pelados están a punto de tocar nuestra ventana...parecen dedos retorcidos sus ramas...
¡Y ahora que está tan cerca abre su boca y está dispuesta a engullirnos! ¡Nos comeee...!
No aguanté más esa visión escalofriante y me metí en la cama temblando, mudo de espanto.
La luz del día me despertó.
---¿Estás mejor?--- me dice Mariela.
---Sí, ¿porqué me preguntás?
---Toda la noche...
No la dejé terminar la frase. De un salto me levanté y miré por la ventana. El día era espléndido, todo estaba en su lugar. La vieja casona vecina, como siempre... o algo más desvencijada por el temporal de la noche anterior, pero nada más.
Siempre sospeché que las mujeres eran muy fiables a la hora de formular advertencias, de dar el consejo justo. No hay otra como Mariela. Y les diré que tiene, como siempre, toda la razón: las comidas copiosas provocan pesadillas demasiado... reales...
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2007-03-25 08:59:33
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answer #1
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answered by ¿te gusta el Choripán? 5
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Hola! Estamos a full con las historias. jaja. Esto me gusta, así que acá va. Que tengas un lindo fin de semana. Saludos.
Tarde tormentosa, oscura y tenebrosa en las afueras de la ciudad. Estaba perdida, viajando sola en mi auto, pretendiendo encontrar algún lugar donde refugiarme. Llevaba unos 200 km, no se divisaba ningún pueblo cerca, sólo campo y más campo. La noche empezaba, la lluvia comenzaba a caer. Los truenos cada vez más fuertes, los rayos caían más y más cerca.
Sólo quería encontrar algo donde protegerme, seguía andando hasta que, de repente, mis oídos escucharon un alarido, me preguntaba de dónde vendría. Los alaridos empezaban a sentirse cada vez más cerca hasta que vi al can que los emitía. Era un perro negro, bastante grande, parecía perdido y asustado, pero a la vez cariñoso y amigable. Sospeché que debía ser de alguna casa, decidí seguirlo con el auto hasta que me llevó hasta un lugar en que se detuvo. Frené mi auto, descendí y continué caminando detrás del perro hasta que me llevó hasta una casona, era grande y parecía abandonada. Ahí me refugié de la lluvia, descansé y me quedé hasta que amaneciera para continuar con mi viaje.
2007-03-24 14:49:26
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answer #2
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answered by valescorp77 5
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Llegó la noche y luego de un día triste y muy complicado intenté relajarme, el frío de la noche me envolvió, prendí el hogar y me senté en uno de los sillones que me había regalado mi abuela cuando era niña, ella solía usarlo para leer y tejer en su última etapa de vida.
Estaba en el living de aquella casona donde en tiempos pasados fuimos tan felices, fue inevitable que los recuerdos no perturbaran mi mente; de repente un trueno me descolocó e iluminó mi rostro. Comenzó a llover, las gotas golpeaban la ventana, el jardín había quedado cubierto por la lluvia, el sonido constante me envolvió y nuevamente el ruido de los relámpagos y se escuchó el alarido inquietante de mis hijos, ellos estaban en su cuarto pero se tranquilizaron cuando acudí enseguida a ellos, el más pequeño me dijo: mami por favor contanos un cuento ......seguía lloviendo sin cesar y yo junto a ellos tratando que el miedo no los volviera a invadir, se durmieron entre abrazos, cuentos, canciones y risas.
Sospeche que esa noche tampoco vendrías y me volví a quedar sola con mis pensamientos, el olor a la lluvia y recuerdos en mi memoria.....
Quizá algún día pueda mirarte a los ojos y decirte: Dame el gusto de volver a sentir tu presencia, tu respiración, tu perfume en la piel, poder compartir aquellos momentos mágicos de tanta felicidad, los que alguna vez fueron nuestros y que hoy están perdidos.
Hoy solo miro a la distancia. .........
Saludos!
2007-03-24 14:21:02
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answer #3
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answered by Only a Woman 4
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La noche cerrada... Truenos y relámpagos iluminaban el cielo sobre la vieja casona, único testigo y cómplice de este amor robado.... pero puro, cual agua de manantial. Sospeché por tu mirada, que la dicha se esfumaba junto con lo prohibido....entonces comprendí que nada podría alejarme de tí.... y en el silencio, con desgarrador alarido, mi corazón clamó que te quedes.....una lágrima como rocío en una rosa,
fue la única respuesta.
2007-03-23 09:40:48
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answer #4
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answered by Miguel Angel 6
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Era un noche tormentosa y yo estaba sola cuando se oyeron unos TRUENOS fuertisimos que me hicieron lanzar un ALARIDO de terror, y todo eso porque SOSPECHE que habia alguien rondando la CASONA y no era mas que un gato.
Espero te guste mi historia aunque sea chiquita♣
2007-03-23 09:35:36
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answer #5
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answered by Anonymous
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Era a mediados de enero una noche lluviosa con truenos muy fuertes que hacian retumbar hasta el mas minimo objeto en la casona vieja de mis abuelos, era de esas noches eternas que se te hacen por no dormir en tu casa y hasta el alarido del perro te da miedo por los truenos y relampagos que hace que sea diferente y prolongado el alararido y aun lado del cuarto se quedaban mis padres y nosotros todas juntas pero por el miedo hizo que quisiera irme al cuarto de mis padres y al pararme en la puerta escuche ruidos raros y sospeche que nada bueno pasaba ahi asi que decidi alejarme y acurrucarme a un lado de mi hermana que dormia como sin nada pasara afuera.
2007-03-23 09:26:53
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answer #6
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answered by amigadeunoydeotro 6
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Eran las tres de la mañana y aquella CASONA se encontraba mas obscura que nunca, mientras que los TRUENOS hacian de las suyas en el firmamento, alborotando todo a su paso, fue en ese momento cuando me encontraba asustada que SOSPECHÉ que esta noche no iba a tratarse de una noche normal como tantas.
Me dirigi rapidamente a la habitación de Adolfo, el se encontraba profundamente dormido, me introduje en su cama y le dije: Adolfo dejame descansar a tu lado DAME EL GUSTO de estrenar el alba junto a ti, Adolfo desperto giro su rostro y me dijo dame ese gusto a mi POR FI...
Ahi tienes mi niña, jajaja lo que es no tener nada que hacer verdad? jajaja
Besitos!
2007-03-23 09:19:27
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answer #7
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answered by Anonymous
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Maldita la mañana en que abajo de mi almohada se erizaron los truenos. Las gladiolas que había en el jardín mejor huyeron, su color revuelto e intoxicado chirriando como un hueso de dolor. No hubo alaridos míos ni golpes enceguecidos que se escucharan en esta casona. Desperté y no pude nunca más dormir. Las noches tibias fueron llevándose eventualmente todo aquello que temí, que sospeché, que no me habían robado hasta ahora.
2007-03-23 09:18:00
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answer #8
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answered by Anonymous
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habia un niño que se aferro a la vida, siendo que cuend nacio subrio mucho y como consecencie del parto tuveron que sacarlo con forser;s, dañndole su cabezita , y con forme paso el tiempo se vio envielto en muchos obstacuos, asi que tuvo nuevos retos que se le ponian en su camino, tuvo muchas caida y trompiesos en su vida,
cuando ingreso a la escuela supo superas las cosas que le decian los niños, cuando ngreso a la secundaria tubieron una vision los alumnos al verlo y comprendelo tuvo amiguitos y en ese periodo que estuvo en la secundaria los maestros se dieron cuenta de sus capacidades que tenie el. .
n ese transcuso en que estaba etudiando sellevo por lo menos 3 diplomas por plicado y cuando salio de la secundaria , salio con excelentes calificaciones eso le dio la oportunidad de sacar una beca para sus estudios .
y a partir de eso estuvo becado por lo meenos toda su preparatoria y su universidad
ese niño soy yo........
2007-03-25 18:16:48
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answer #9
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answered by Victor Alfredo S 3
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Hace muchos anos yo estaba en una casona, que compartia con mi abuelita, y en esos momentos empesaron los truenos y relampagos, e inmediatamente se vino una horrible tormenta, y luego se volvio a escuchar un horrible estruendo, por los rayos y relampagos, que mi pobre abuela lanzo un alarido de terror, yo nunca sospeche que ella se espantara tanto, y entonces ella me dijo dame el gusto de quedarme a dormir aqui , junto a ti, por supuesto, que no me lo dijo 2 veces porque yo tambien estaba llena de pavor. Ojala te guste, casi es real, a me gustaria contactarme con tigo, Porfi escribeme a piramide_de oro@yahoo.com soy lafaraona. Saludos.
2007-03-24 18:10:46
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answer #10
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answered by piramide_de_oro 6
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