En su afán por desvirtuar la Biblia, la ciencia únicamente ha podido comprobar que la Biblia tenÃa razón.
La Biblia y la ciencia
La Biblia consecuentemente ha triunfado sobre la crÃtica que se ha dirigido contra ella. Por ejemplo, cuando uno la lee sin prejuicios, halla que armoniza con la ciencia verdadera. Claro está que el propósito de la Biblia es proveer guÃa espiritual; no es un libro de texto sobre ciencia. Pero veamos si la Biblia concuerda con los hechos cientÃficos.
AnatomÃa: La Biblia dice con exactitud que ‘todas las partes’ de un embrión están “escritas”. (Salmo 139:13-16.) El cerebro, el corazón, los pulmones, los ojos... estas partes del cuerpo y todas las demás están “escritas” en el código genético del óvulo fertilizado en la matriz de la madre. Tal código contiene horarios internos para la formación de cada una de estas partes en el orden apropiado. ¡ImagÃnese! Este hecho en cuanto al desarrollo del cuerpo humano se registró en la Biblia casi 3.000 años antes de que los cientÃficos descubrieran el código genético.
La vida animal: La Biblia dice que “la liebre [...] es rumiante”. (LevÃtico 11:6.) François Bourlière (The Natural History of Mammals, 1964, página 41) dice: “El hábito de pasar el alimento dos veces por el intestino en lugar de solo una, parece ser un fenómeno común entre los conejos y las liebres. Los conejos domésticos por lo general comen y tragan sin masticar lo que excretan durante la noche, lo cual por la mañana constituye, aproximadamente, la mitad del contenido del estómago. En el caso del conejo silvestre este proceso tiene lugar dos veces cada dÃa, y se informa que la liebre común tiene el mismo hábito”. La obra Mammals of the World (por E. P. Walker, 1964, tomo II, página 647) observa al respecto: “Puede que esto sea similar al ‘rumiar’ de los mamÃferos rumiantes”.
ArqueologÃa: Reyes, ciudades y naciones mencionados en la Biblia han cobrado vida con el hallazgo de tablillas de arcilla, alfarerÃa, inscripciones y cosas semejantes. Por ejemplo, pueblos que se mencionan en las Escrituras, como los hititas, existieron realmente. (Ãxodo 3:8.) En su libro The Bible Comes Alive (La Biblia cobra vida), sir Charles Marston dijo: “Los que han debilitado la fe popular en la Biblia y socavado su autoridad son socavados a su vez por la evidencia que ha sido puesta de manifiesto, y la autoridad de ellos queda destruida. La pala está echando fuera a la crÃtica destructiva del campo de los hechos dudosos al campo de la ficción reconocida”.
La arqueologÃa ha respaldado la Biblia de muchas maneras. Por ejemplo, algunos hallazgos han confirmado la autenticidad de lugares y nombres que se mencionan en el capÃtulo 10 de Génesis. Excavadores han descubierto la ciudad caldea de Ur, el centro comercial y religioso donde nació Abrahán. (Génesis 11:27-31.) Encima de la fuente (manantial) de Guihón, en la zona sudeste de Jerusalén, arqueólogos encontraron la ciudad jebusea que el rey David conquistó. (2 Samuel 5:4-10.) En 1880 se descubrió la inscripción de Siloam labrada en un extremo del conducto, o acueducto, del rey EzequÃas. (2 Reyes 20:20.) La Crónica de Nabonido, que fue desenterrada en el siglo XIX, relata acerca de la caÃda de Babilonia ante Ciro el Grande en 539 a.E.C. Detalles del libro de Ester han sido confirmados por inscripciones que se hallaron en Persépolis y por el descubrimiento del palacio del rey Jerjes (Asuero) en Susa, entre 1880 y 1890 E.C. Una inscripción hallada en 1961 en las ruinas de un teatro romano de Cesarea probó la existencia del gobernador romano Poncio Pilato, quien entregó a Jesús para que fuera ejecutado en un madero. (Mateo 27:11-26.)
AstronomÃa: Hace unos 2.700 años —mucho antes de que la gente en general supiera que la Tierra es redonda— el profeta IsaÃas escribió: “Hay Uno que mora por encima del cÃrculo de la tierra”. (IsaÃas 40:22.) La palabra hebrea jugh, que se traduce aquà “cÃrculo”, también se pudiera verter “esfera” (A Concordance of the Hebrew and Chaldee Scriptures, por B. Davidson). Además, el “cÃrculo” del horizonte de la Tierra se ve claramente desde el espacio exterior, y a veces desde aviones que vuelan a grandes alturas. A propósito, Job 26:7 dice que Dios está “colgando la tierra sobre nada”. Esto es cierto, pues los astrónomos saben que la Tierra no está sostenida por ningún medio visible.
Botánica: Algunos han concluido erróneamente que la Biblia es inexacta porque Jesucristo dijo que el “grano de mostaza” es “la más pequeña de todas las semillas”. (Marcos 4:30-32.) Es probable que Jesús se haya referido a la semilla de la planta de mostaza negra (Brassica nigra o Sinapis nigra), que mide solo de 1 a 1,6 milÃmetros (0,039 a 0,063 de pulgada) de diámetro. Aunque hay semillas más pequeñas, como las de la orquÃdea, las cuales parecen partÃculas de polvo, Jesús no estaba hablando a personas que cultivaran orquÃdeas. Aquellos judÃos galileos sabÃan que de los diversos tipos de semillas que los agricultores locales sembraban, la semilla de mostaza era la más pequeña. Jesús estaba hablando del Reino, no estaba dando una lección sobre botánica.
GeologÃa: Respecto al relato bÃblico sobre la creación, el famoso geólogo Wallace Pratt dijo: “Si se me pidiera que, como geólogo, explicara brevemente nuestras ideas modernas del origen de la Tierra y del desarrollo de la vida en ella a un pueblo sencillo y pastoral como las tribus a las cuales se dirigió el Libro de Génesis, difÃcilmente podrÃa hacer algo que superara el seguir con bastante cuidado gran parte del lenguaje del primer capÃtulo de Génesis”. Pratt señaló que el orden de los acontecimientos en el relato de Génesis —el origen de los océanos, el surgimiento del suelo y la aparición de la vida marina, de las aves y de los mamÃferos— es esencialmente la secuencia de las divisiones principales de los tiempos geológicos.
Medicina: En su libro The Physician Examines the Bible, C. Raimer Smith escribió: “Me sorprende tanto que la Biblia es tan exacta desde el punto de vista médico. [...] Cuando se refiere a algún tratamiento, como para diviesos, heridas, etc., está en lo correcto hasta al juzgarla por las normas modernas. [...] Una gran cantidad de personas todavÃa creen en muchas supersticiones, como las de que una castaña en el bolsillo evita el reumatismo; que el tocar sapos con las manos causa verrugas; que el llevar franela roja alrededor del cuello sana una garganta irritada; que el cargar asa fétida en una bolsita evita que uno contraiga enfermedades; que cada vez que enferma un niño tiene gusanos, etc., pero en la Biblia no se encuentran declaraciones de esa Ãndole. Esto en sà mismo es notable, y para mà es otra prueba de su origen divino”.
Confiable respecto a detalles históricos
En su libro A Lawyer Examines the Bible, el abogado Irwin H. Linton observó: “Mientras que en los romances, las leyendas y el testimonio falso se ejerce cuidado para situar en algún lugar distante y en algún tiempo indefinido lo que se relata, violando asà las primeras reglas que aprendemos los abogados para una buena defensa, que ‘la declaración debe indicar el tiempo y el lugar’, las narraciones de la Biblia nos dan la fecha y el lugar de todo lo relatado con la máxima precisión”.
En prueba de esto, Linton cita Lucas 3:1, 2. Ahà el evangelista mencionó a siete funcionarios para establecer el tiempo en que Jesucristo comenzó su ministerio. Note los detalles que proveyó Lucas al decir: “En el año decimoquinto del reinado de Tiberio César, cuando Poncio Pilato era gobernador de Judea, y Herodes era gobernante de distrito de Galilea, pero Filipo su hermano era gobernante de distrito del paÃs de Iturea y de TraconÃtide, y Lisanias era gobernante de distrito de Abilene, en los dÃas del sacerdote principal Anás, y de Caifás, la declaración de Dios vino a Juan el hijo de ZacarÃas en el desierto”.
La Biblia está llena de detalles como esos. Además, porciones de la Biblia, tales como los Evangelios, fueron escritas durante un perÃodo en que las culturas judÃa, griega y romana estaban muy desarrolladas. Era una época de abogados, escritores, administradores, y asà por el estilo. Sin duda, pues, si los detalles que se hallan en los Evangelios y en otras partes de la Biblia no hubieran sido verÃdicos, habrÃan sido desenmascarados como fraudulentos. Pero historiadores seglares han confirmado puntos como el de la existencia de Jesucristo. Por ejemplo, el historiador romano Tácito escribió lo siguiente respecto a Jesús y sus seguidores: “El autor de este nombre [cristianos] fue Cristo, el cual, imperando Tiberio, habÃa sido justiciado por orden de Poncio Pilato, procurador de la Judea” (Los Anales, traducción de Carlos Coloma, tomo II, página 222). La exactitud histórica de la Biblia es prueba adicional de que es la dádiva de Dios a la humanidad.
La mayor prueba
Aunque la arqueologÃa, la astronomÃa, la historia y otros campos de la ciencia respaldan la Biblia, la fe en esta no se basa en dicha confirmación. Entre las muchas pruebas de que la Biblia es la dádiva inspirada por Dios a la humanidad, la mayor prueba que se puede presentar es el cumplimiento de sus profecÃas.
Jehová Dios es la Fuente de profecÃa verdadera. Mediante su profeta IsaÃas dijo: “Las primeras cosas... miren, han llegado, pero nuevas cosas anuncio. Antes que empiecen a brotar, hago que ustedes las oigan”. (IsaÃas 42:9.) Además, la Biblia dice que sus escritores fueron inspirados por Dios mediante su espÃritu santo, o fuerza activa. Por ejemplo, el apóstol cristiano Pablo escribió: “Toda Escritura es inspirada de Dios”. (2 Timoteo 3:16.) El apóstol Pedro escribió: “Ninguna profecÃa de la Escritura proviene de interpretación privada alguna. Porque la profecÃa no fue traÃda en ningún tiempo por la voluntad del hombre, sino que hombres hablaron de parte de Dios al ser llevados por espÃritu santo”. (2 Pedro 1:20, 21.) Asà que examinemos la profecÃa bÃblica.
Entre los centenares de profecÃas bÃblicas están las que tienen que ver con la capital de Asiria, NÃnive, “la ciudad de derramamiento de sangre” que infundió terror por todo el antiguo Oriente Medio por más de 15 siglos. (Nahúm 3:1.) No obstante, durante su apogeo, la Biblia predijo: “[Dios] hará de NÃnive un yermo desolado, una región árida como el desierto. Y en medio de ella, hatos ciertamente se echarán estirados, todos los animales salvajes de una nación. Tanto el pelÃcano como el puerco espÃn pasarán la noche allà mismo entre los capiteles de sus columnas. Una voz seguirá cantando en la ventana. Habrá devastación en el umbral; porque él ciertamente pondrá al descubierto el entablado mismo”. (SofonÃas 2:13, 14.) Hoy los visitantes solo ven un montÃculo que marca la desolada ubicación de la antigua NÃnive. Además, tal como se predijo, rebaños de ovejas pastan allÃ.
Daniel, profeta de Dios, contempló en visión un carnero de dos cuernos y un macho cabrÃo con un gran cuerno entre los ojos. El macho cabrÃo derribó al carnero y le quebró ambos cuernos. Luego, el gran cuerno del macho cabrÃo fue quebrado, y en su lugar surgieron cuatro cuernos. (Daniel 8:1-8.) El ángel Gabriel explicó: “El carnero que tú viste que poseÃa los dos cuernos representa a los reyes de Media y Persia. Y el macho cabrÃo peludo representa al rey de Grecia; y en cuanto al gran cuerno que estaba entre sus ojos, representa al primer rey. Y puesto que ese fue quebrado, de modo que hubo cuatro que finalmente se levantaron en lugar de él, hay cuatro reinos de su nación que se pondrán de pie, pero no con su poder”. (Daniel 8:20-22.) La historia ha probado que el “rey de Grecia” derrocó al carnero de dos cuernos, el Imperio Medopersa. Aquel macho cabrÃo figurativo tenÃa un “gran cuerno” en la persona de Alejandro Magno. Después de su muerte, sus cuatro generales reemplazaron aquel “gran cuerno” al establecerse a sà mismos en el poder en “cuatro reinos”.
Se han cumplido veintenas de profecÃas de las Escrituras Hebreas (“Antiguo Testamento”) con relación a Jesucristo. Algunas de ellas fueron aplicadas a él por escritores, inspirados por Dios, de las Escrituras Griegas Cristianas (“Nuevo Testamento”). Por ejemplo, el evangelista Mateo señaló el cumplimiento de profecÃas bÃblicas como el que Jesús naciera de una virgen, el que Ãl tuviera un precursor, y su entrada en Jerusalén sobre un pollino de asna. (Compárense Mateo 1:18-23; 3:1-3; 21:1-9 con IsaÃas 7:14; 40:3; ZacarÃas 9:9.) El cumplimiento de esas profecÃas es prueba adicional de que la Biblia en realidad es una dádiva inspirada por Dios.
El cumplimiento actual de la profecÃa bÃblica prueba que vivimos en “los últimos dÃas”. (2 Timoteo 3:1-5.) Guerras, escaseces de alimento, pestes y terremotos de proporciones sin paralelo son parte de “la señal” de la “presencia” de Jesús en el poder del Reino. Esa señal también incluye la actividad de los más de 4.000.000 de testigos de Jehová que predican las buenas nuevas del Reino establecido. (Mateo 24:3-14; Lucas 21:10, 11.) La profecÃa bÃblica que se cumple hoy también nos asegura que el gobierno celestial de Dios en manos de Jesucristo pronto traerá un nuevo mundo de felicidad eterna para la humanidad obediente. (2 Pedro 3:13; Revelación 21:1-5.)
La tabla adjunta titulada “ProfecÃas bÃblicas cumplidas” solo presenta unas cuantas de los centenares de profecÃas bÃblicas que se podrÃan alistar. El cumplimiento de algunas de ellas se registró en las Escrituras mismas, pero son dignas de notar especialmente las profecÃas que se cumplen en la actualidad.
Es probable que usted haya visto ciertos desenvolvimientos mundiales predichos en la Biblia. Pero ¿por qué no investiga esto más a fondo? Los testigos de Jehová con gusto le proveerán detalles adicionales si usted lo desea. Y que su búsqueda sincera del conocimiento del AltÃsimo y sus propósitos lo convenza de que la Biblia realmente es la dádiva inspirada por Dios.
2007-03-20 11:15:39
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answer #10
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answered by Azazel 6
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