El surgimiento de El Barzón, en agosto de 1993 en Jalisco, pareció sor-prender a la clase política nacional, tanto al Ejecutivo como a los parti-dos políticos. La sorpresa se transformó en asombro cuando en términosde semanas las manifestaciones públicas de agricultores en torno a la cartera ven-cida estallaron con fuerza en diferentes partes del país, y se anunció la realizaciónde una marcha de los productores agropecuarios endeudados con la banca desdevarios estados hacia la ciudad de México. El asombro se volvió disgusto cuandoestos movimientos, inconexos en un principio, adoptaron espontáneamente elnombre de El Barzón propuesto por los agricultores de Jalisco. Por su referenciaal corrido revolucionario que cuenta la vida de los medieros o peones acasillados,siempre endeudados con los hacendados, el nombre de El Barzón tiene una con-notación ideológica poco halagadora para un gobierno que se precia de conduciral país hacia la modernidad1. De hecho, el movimiento de los deudores del cam-po fue el primer estallido social con resonancia nacional que marcó el desacuer-do de una parte de la sociedad con el nuevo modelo económico en vigor.A lo largo de sus cinco años de vida, El Barzón se transformó profundamen-te. Sus bases se ampliaron, su estructura se fortaleció, sus formas de organizacióny de luchas se modificaron, sus propios objetivos se precisaron; pero el cambiomás relevante, que le imprime un sello novedoso frente a las demás organizacio-nes sociales que no pertenecen al sistema corporativo priista, es la relación queestablece con la esfera política.153*Este trabajo es una síntesis de la publicación de Grammont H. C. El Barzón, clase media, ciudadanía y democra -cia (México: IIS-Plaza y Valdés) en prensa.**Investigador del Instituto de Investigaciones Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México.
--------------------------------------------------------------------------------
Page 2
En este trabajo analizamos este movimiento social “clasemediero” para vercómo, a través de su lucha en contra de la banca, se desmorona el corporativismomexicano bajo el impulso de una nueva ciudadanía consciente de sus derechosfrente al gobierno y los propios partidos políticos.El Barzón y el movimiento social de los deudores Si bien El Barzón nace en 1993, tiene importantes antecedentes por lo menosen dos estados norteños del país: Sonora y Chihuahua. En ambos casos el movi-miento de los deudores estuvo constituido por agricultores que fueron, durante dé-cadas, el modelo de la revolución verde. Se beneficiaron de las grandes inversio-nes federales en el período del milagro mexicano porque supieron organizarse pa-ra canalizar a su favor los apoyos ofrecidos por el gobierno. Fueron también par-te de las bases sociales más seguras del corporativismo mexicano. Por su papel enla política nacional de este siglo, así como por su importancia en la producciónagropecuaria, el caso de Sonora es paradigmático. Sin embargo, es en Chihuahuadonde se inicia el movimiento de los deudores, y encontramos ahí su evoluciónmás fuerte. Surge en 1986, aunque sus acciones no cobran fuerza sino hasta 1992.Durante ese año y el siguiente, los deudores de este estado multiplicaron sus mo-vilizaciones con plantones, marchas, bloqueos de vías públicas, tomas de edificiospúblicos y de bancos, huelga de hambre, cierre parcial del puente fronterizo deCiudad Juárez, quemas de productos agrícolas y tractores. Lo más relevante delmovimiento fue la creación, en marzo de 1992, del primer movimiento frentistaque incluía a organizaciones del partido oficial y de partidos de oposición.En franco desafío con la Confederación Nacional de los Propietarios Rurales( C N P R )2, en julio de 1993 un importante grupo de agricultores endeudados del es-tado de Jalisco inició una fuerte movilización para protestar por la cerrazón de labanca hacia su problemática. Llevaron a cabo un plantón de 48 días en el zócalode la ciudad de Guadalajara, que tuvo una fuerte resonancia nacional. Las mues-tras de solidaridad por parte de deudores de otros estados fueron numerosas, y loscontactos con sus representantes, frecuentes. Por unos meses, Jalisco se convirtióen el epicentro del movimiento. Participaron en el plantón representantes de losdeudores de Sonora, Sinaloa, Chihuahua, Colima, Oaxaca, Michoacán, Nayarit,Baja California, Zacatecas, Morelos, Guanajuato, Aguascalientes, Ta m a u l i p a s .Frente a la falta de propuestas para solucionar su problema por parte de labanca y de la Secretaría de Hacienda, los deudores decidieron crear, en septiem-bre de ese año, una organización nacional de los deudores de la banca. Para mu-chos dirigentes del sector agrícola esta decisión fue trascendental, porque apenasse iban desprendiendo de sus organizaciones oficiales y medían aún la convenien-cia de romper definitivamente con el sistema corporativo. Si bien a lo largo de suvida las organizaciones corporativas conocieron numerosos conflictos internos,154¿Una nueva ruralidad en América Latina?
--------------------------------------------------------------------------------
Page 3
reacomodos de intereses y cambios en los grupos hegemónicos que las controla-ban (de Grammont, 1990: 105-167; de Grammont, 1996: 21-68), esta decisión delos agricultores de crear una nueva organización marcó una fuerte ruptura en sutradicional estructura.Mientras tanto, otros plantones y movilizaciones se llevaban a cabo en dife-rentes estados del país. El plantón de Zacatecas, que duró 69 días, se destacó porsu fuerza y larga duración. En Chihuahua se llevaron a cabo numerosas y apara-tosas movilizaciones. El día 20 de noviembre, aniversario de la revolución mexi-cana, los barzonistas emprendieron desde varios estados de la república una mar-cha hacia la ciudad de México, que fue inmediatamente reprimida, con el encar-celamiento de sus principales dirigentes.Sin duda, la explosión de la guerrilla zapatista en Chiapas tuvo por efecto radica-lizar el movimiento de los deudores y propiciar su impresionante crecimiento tanto enla ciudad como en el campo. En este contexto, durante los dos años siguientes (1994y 1995) los barzonistas acentuaron sus movilizaciones en contra de las institucionesbancarias, las autoridades estatales y las federales. Se mostraron especialmente acti-vos e innovadores para llevar a cabo acciones vistosas en numerosos estados del país:marchas con tractores y vehículos a lo largo de cientos de kilómetros hacia la ciudadde México, una vistosa cabalgada con decenas de jinetes y bandera nacional al fren-te desde Chihuahua hasta el Distrito Federal (un recorrido a caballo de unos 800 ki-lómetros que duró cerca de dos meses), bloqueos y tomas de sucursales de institucio-nes bancarias privadas y de fomento, de carreteras y puentes internacionales, de ofi-cinas regionales y centrales de las Secretarías de Hacienda y Crédito Público, A g r i-cultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gobernación, del Banco de México y de la Co-misión Federal de Electricidad; plantones y mitines en palacios de gobierno munici-pales, estatales y en el Distrito Federal, en tribunales, en el Congreso de la Unión yen los congresos estatales, en la Procuraduría General de la República (PGR), A s o-ciación de Banqueros de México (ABM), Comisión Nacional Bancaria y de Va l o r e s(CNBV), Bolsa Mexicana de Valores (BMV), Suprema Corte de Justicia de la Nación(SCJN), en los domicilios de agiotistas, casas comercializadoras de insumos o de ma-quinaria agrícola, distribuidoras de vehículos para el transporte urbano; marchas contambora, mariachis, maquinaria agrícola, camionetas, automóviles, caballos y burros,hasta elefantes y camellos; hortalizas depositadas en sucursales bancarias, leche tira-da en las carreteras, animales introducidos en oficinas públicas; solicitudes de asilo“económico” en consulados; incendio de cosechas, tractores, casas de madera y tar-jetas de crédito; escenas de “strip tease” para simular el despojo provocado por losbancos. Pero las acciones no fueron siempre jocosas, ni mucho menos, porque en mo-mentos de desesperación incluyeron huelgas de hambre; ojos y labios cosidos parasimbolizar la cerrazón del gobierno y la banca; brazos desangrados para evidenciar laviolencia del despojo del patrimonio familiar. Una amplia gama de acciones para lla-mar la atención, a como diera lugar, de la opinión pública, y romper el cerco impues-to por la mayoría de los medios de comunicación3.155Hubert C. de Grammont
--------------------------------------------------------------------------------
Page 4
De todas estas acciones, la más novedosa fue la organización de los grupos deresistencia civil pacífica: verdaderas “columnas volantes” encargadas de impedir lose m b a rgos, las adjudicaciones y los remates de las propiedades de los deudores(M G C, 01-06-95). Es imposible conocer la cifra de acciones desarrolladas y el nú-mero de órdenes judiciales que se impidieron gracias a la intervención de estos gru-pos de resistencia, pero es a partir de este tipo de acciones que Alfonso Ramírez Cué-l l a r, uno de los principales dirigentes del movimiento, podía afirmar que “...despuésde año y medio de existencia (mayo de 1995) de El Barzón-Unión no nos han qui-tado una sola pulgada de tierra, casa, ni propiedad alguna...” (ARC, 23-05-95).En estos dos años se desató una verdadera guerra social entre los deudores porun lado y la Asociación de Banqueros Mexicanos (ABM) y la Secretaría de Hacien-da del gobierno federal por el otro. Sin duda, la atropellada coyuntura política de lasucesión presidencial de 1994 influyó fuertemente en la dinámica del movimiento. ElBarzón, cercano a los partidos de oposición pero especialmente al Partido de la Re-volución Democrática (PRD, centro izquierda), intentó radicalizarse. En el difícilequilibrio de mantener una política económica neoliberal sin perder el favor del elec-torado, el gobierno apoyó con enormes recursos a la banca comercial a fin de poneren marcha varios programas financieros capaces de atender el problema de la carteravencida, tanto en el campo, en donde hizo crisis primero, como en la ciudad, en don-de creció de manera incontenible después de la devaluación de diciembre de 1994.Tres programas se destacaron: el SIRECA, el UDI y el ADE. El SIRECA(Sistema de Reestructuración de la Cartera Vencida Agropecuaria) fue implemen-tado en plena campaña electoral por la presidencia de la república (entre marzo ymayo de 1994). La propuesta intentaba remediar el incontenible crecimiento dela deuda en el contexto del fortalecimiento de El Barzón y de las elecciones pre-sidenciales en puerta. El programa consistía esencialmente en la disminución delas tasas de interés y el alargamiento de los pagos hasta 15 años. El gobierno rom-pió la intransigencia de los banqueros para otorgar facilidades en la negociaciónde la cartera vencida, aportando a la banca comercial 8.000 millones de pesos pa-ra la ejecución del proyecto. Además, Hacienda concedió a la banca privada unaimportante demanda en el terreno fiscal, que consistía en pagar impuestos sólosobre los intereses efectivamente cobrados y no sobre los devengados, como sevenía haciendo. El UDI (Unidad de Inversión) fue copiado de un programa derescate de las carteras vencidas aplicado en Chile. Se inició en marzo de 1995 yfue dirigido hacia los pequeños empresarios de la ciudad y los créditos hipoteca-rios. Se basaba en la indexación de las deudas sobre la inflación, con descuentossobre el capital y el alargamiento de la deuda hasta 30 años. El ADE (Acuerdo deApoyo Inmediato a Deudores de la Banca) era similar al UDI, pero dirigido a lostarjeta-habientes. Se aplicó de agosto de 1995 a septiembre de 1996.Desde el punto de vista de El Barzón, estos programas fueron insuficientespor no permitir la renegociación de todas las deudas (los bancos renegociaban so-156¿Una nueva ruralidad en América Latina?
--------------------------------------------------------------------------------
Page 5
lamente las deudas “viables”, con alguna posibilidad de ser recuperadas) y por noatacar de fondo el problema de la rentabilidad de las pequeñas y medianas em-presas y la disminución del ingreso familiar. Aún así, tuvieron por efecto la bajadel nivel de conflictividad, porque muchos deudores lograron renegociar su deu-da con tiempos más largos. Por su lado, gracias al dinero aportado por el Bancode México a estos programas, los bancos mejoraron sus niveles de ganancia4.A partir de mediados de 1995, pasada la coyuntura electoral, El Barzón cam-bió drásticamente su estrategia: de ser esencialmente una organización social deprotesta callejera, eficaz para impedir el remate de los bienes de los deudores pe-ro incapaz de influir en las decisiones gubernamentales, pasó a redefinirse comoun movimiento social propositivo y negociador con capacidad de resolver losproblemas por la vía legal. Estableció mayores vínculos con la esfera política, enparticular con los partidos políticos, y fortaleció su estructura organizativa.De ser un movimiento social definido por su rechazo al pago de las deudas (suprimer lema fue “Debo no niego, pago no tengo”), implementó una política de pa-go pero sobre una base considerada justa: pagar el capital prestado y los interesesprincipales inicialmente pactados (se rechaza el pago de los intereses moratoriospor considerarlos ilegales e injustos). En vez de huir de los bancos, El Barzón ela-boró una estrategia para demostrar su voluntad de pago y apuntaló el que sería sunuevo lema: “Debo no niego, pago lo justo”. Apartir de entonces, fortaleció su or-ganización interna para desarrollar una verdadera estrategia legal en contra de losbancos. Se trataba de entrar en el terreno de la defensa legal de los deudores, y másaún, de impugnar en el plano jurídico la validez de las acciones de la banca y delpropio gobierno. Si bien El Barzón perdió la mayoría de los casos emprendidos,esta lucha no tiene antecedentes en la vida nacional. Marca un cambio fundamen-tal en la relación entre los ciudadanos, la esfera política y el gobierno.Algunas cifras ilustran la verdadera “guerra jurídica” que se establecióentre El Barzón y la banca. Para fines de febrero de 1996, la organización ha-bía depositado ante el Tribunal Superior de Justicia 6.500 demandas de nuli-dad a la cláusula del anatocismo5, argumentando prácticas usureras por partede la banca. Ese mismo mes, los deudores habían entregado a la banca cercade 900 mil cartas de intención de pagar el capital, pero no los intereses de sudeuda. Para finales de julio, El Barzón había presentado cerca de 400 mil jui-cios, la enorme mayoría por créditos hipotecarios de vivienda. En esa mismafecha, la banca privada había entablado un millón 145 mil juicios en contrade deudores (de los cuales, cerca de 400 mil correspondían al Distrito Fede-ral), el 62% promovidos por los tres principales bancos: Banamex, Bancomery Serfin. Sin embargo, la impresionante cantidad de acciones emprendidas porlos barzonistas no puede esconder que apenas un 10% de los fallos de los tribu-nales eran favorables a los deudores (La Jornada, 30-1-96, 27-2-96, 18-4-96,12-6-96, 6-9-96).157Hubert C. de Grammont
--------------------------------------------------------------------------------
Page 6
Las principales acciones legales en contra del gobierno fueron las siguientes:1. impedir que se modificara una serie de leyes para quitar toda protección legala los deudores y permitir la realización de los embargos en contra de los mismos(iniciativa legal conocida como “Ley Zedillo en contra de los deudores”); 2. unademanda presentada a la Procuraduría General de la República en contra del go-bierno federal por transgredir el decreto de privatización de la banca; 3. otra de-manda presentada en la Suprema Corte de Justicia de la Nación por considerarilegal el anatocismo; 4. la lucha en contra de la transferencia de los pasivos delFondo Bancario de Protección al Ahorro (FOBAPROA) a la deuda pública. Porsu importancia en la vida nacional, veamos brevemente cada caso.La Ley Zedillo contra los deudoresEn abril de 1996 el Ejecutivo envió al Congreso de la Unión una complejainiciativa de reformas al Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Fede-ral, a la Ley Orgánica Nacional Financiera, al Código de Comercio, a la Ley Ge-neral de Títulos y Operaciones de Crédito, al Código Civil para el Distrito Fede-ral en materia de fuero común y para toda la república en materia de fuero fede-ral, destinada a cerrar todos los caminos legales que los barzonistas invocaban pa-ra defenderse en contra de la banca y de la usura.Para los dirigentes de El Barzón, la “Ley Zedillo en contra de los deudores”,como ellos llamaron a esta iniciativa legislativa, tenía una lógica sencilla: hacermás difíciles los trámites para los deudores, pero simplificarlos para los acreedo-res. El mismo día en que se conoció la noticia, quinientos barzonistas se manifes-taron frente al Senado mientras una comisión se reunía con su Comisión de Ha-cienda y Programación para solicitar que se abriera un amplio debate sobre lapropuesta gubernamental que afectaría a cerca de 8 millones de deudores con car-tera vencida. A futuro se preveía que podía afectar a todos los acreedores de labanca, o por lo menos a la mitad de ellos, ya que un conocido despacho de espe-cialistas financieros, la Security Auction Capital, estimaba que un 45,4% de loscréditos otorgados por la banca no se pagaban en los términos originalmente pac-tados (La Jornada, 1-2-96). Esta iniciativa era tan drástica que provocó reaccio-nes en contra por parte de numerosos dirigentes empresariales6.La discusión de la iniciativa en la Cámara de Senadores fue acompañada poruna jornada de protesta por parte de unos dos mil barzonistas, quienes efectuaronun plantón-mitin en las afueras del edificio del Senado. En esos días El Barzónhabía logrado acercarse a legisladores de todos los partidos políticos, lo cual fa-cilitó su respaldo en contra de la iniciativa del Ejecutivo. Después de intensos de-bates, la iniciativa fue aprobada con 137 modificaciones, que permitieron elimi-nar las propuestas más lesivas para los deudores, en particular la retroactividad dela iniciativa. Sin embargo, a través de la Secretaría de Gobernación, el gobierno158¿Una nueva ruralidad en América Latina?
--------------------------------------------------------------------------------
Page 7
federal intentó modificar los Códigos Civiles y Comerciales de las entidades fe-derativas para lograr, en el ámbito de los estados, el desahogo por la “vía rápida”de los juicios mercantiles.La ilegalidad de la privatización de la bancaEl 12 de noviembre de 1996 El Barzón presentó ante la Procuraduría Gene-ral de la República (PGR) una denuncia contra Salinas de Gortari y Pedro AspeArmella por haber incurrido en los delitos de coalición de servidores públicos yuso indebido de atribuciones, al publicar fuera del plazo legal varios decretos queconvirtieron a sociedades nacionales de crédito en sociedades anónimas. La de-manda afectaba a 10 bancos: Banamex, Bancomer, Serfin, Atlántico, Internacio-nal, Mexicano, Inverlat, Unión, Bancrecer y Confia. El argumento legal que es-grimía El Barzón era que la privatización de estos bancos se había llevado a ca-bo después de la fecha límite autorizada por el Congreso de la Unión (14 de ju-lio de 1991)7. En esos meses, El Barzón utilizó masivamente dicha tesis para de-mandar a los bancos y amparar a los deudores.Sobre esta base, El Barzón propuso a la Asociación de Banqueros de Méxi-co un “Acuerdo para Reestablecer la Legalidad del Sistema Bancario Mexicano”que suponía: 1. someter a revisión del Congreso de la Unión el proceso de priva-tización de los bancos; 2. restituir los bienes adjudicados a los deudores embar-gados; 3. suspender los juicios mercantiles; 4. revisar los contratos crediticios pa-ra asegurar su apego a la ley; 5. establecer un “Programa Nacional de Reestruc-turación de Adeudos” definido entre el poder legislativo, el ejecutivo, la ABM yEl Barzón; 6. reformar el sistema bancario con el control de los márgenes de in-termediación, la transformación de la banca de fomento en banca de primer piso,y la revisión del marco normativo que permite la inversión extranjera en el siste-ma financiero nacional8. Pero la ABM ni siquiera contestó la propuesta.Menos de dos meses después, el 3 de enero de 1997, la PGR hacía saber a ElBarzón su decisión de no ejercer la acción penal por “notoria improcedencia”. ElBarzón se amparó y solicitó la revisión del caso, pero sin ninguna posibilidad realde obtener una respuesta favorable. En junio siguiente, la Suprema Corte de Jus-ticia de la Nación (SCJN) determinaba que la existencia de las instituciones fi-nancieras no se veía afectada por la publicación extemporánea de los decretos quelas transformaron en sociedades anónimas. Como si la sentencia de la SCJN nofuera suficiente, poco después, la cámara de diputados, todavía bajo el control delPartido Revolucionario Institucional (PRI)9, emitió un decreto que regularizabaesa situación. Con ello se cerraba la posibilidad de lograr la declaración de la ine-xistencia legal de la banca.159Hubert C. de Grammont
--------------------------------------------------------------------------------
Page 8
El anatocismoEn 1983 el Banco de México estableció el mecanismo de capitalización delos intereses, que permite otorgar créditos baratos a muy largo plazo, en particu-lar para la adquisición de vivienda de interés social. Apartir de 1992 la banca re-privatizada generalizó este mecanismo, pero ya no para alargar los tiempos depago, sino para protegerse de los efectos de la inestabilidad financiera provoca-da por la liberalización y desregulación del sector financiero establecida en1991, que abría totalmente el acceso de la banca al sector bursátil para permitirganancias especulativas de corto plazo. La inestabilidad no tardó en transformar-se en crisis.Después de la devaluación de diciembre de 1994, las tasas de interés de loscréditos subieron hasta 130%, para estabilizarse en 85% y disminuir paulatina-mente hasta alrededor de 36%.
2007-02-15 14:57:10
·
answer #1
·
answered by Anonymous
·
0⤊
0⤋