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Gato negro
Es un hombre de gran corazón, que quiere mucho a los animales y por eso tiene una gran variedad en su casa, tiene pájaros, peces de colores, un hermoso perro, conejos, un monito y un gato.
Éste último era bastante grande, muy hermoso y negro completamente, también era su preferido.
Se llamaba Plutón.
El carácter del hombre, cada vez era peor respecto su mujer y respecto al gato, hasta llegar a hacerles daño.
Pero, como los quería, no llegó a maltratarlos como hacía con los otros animales.
Un día llegó a casa totalmente ebrio de ginebra, entró y al ver al gato…relato exactamente con sus palabras:
-…Al punto se apoderó de mí una furia demoniaca y ya no supe lo que hacía. Fue como si la raíz de mi alma se separara de golpe de mi cuerpo; una maldad más que diabólica, alimentada por la ginebra, estremeció cada fibra de mi ser. Sacando del bolsillo del chaleco un cortaplumas, lo abrí mientras sujetaba al pobre animal por el pescuezo y deliberadamente, le hice saltar un ojo…-
El pobre animal s fue corriendo y el terror le hacía esconderse cada vez que le veía y él cada vez tenia más remordimientos, y para librarse de ellos, lo ahorca en la rama de un árbol de su patio.
Para sacarse los cada vez más números remordimientos buscaba excusas, para sentirse mejor.
Esa misma noche s le quemó toda la casa, y se derrumbaron todas las paredes menos una, que aparecía un bajorrelieve, era la silueta de un gigantesco gato. Intentó buscar una explicación lógica y fácil. Lo consiguió pero el remordimiento le llevó a buscar otro gato igual para ocupar el lugar, lo encontró encima de un tonel de ginebra, igual a simple vista. Le siguió hasta su casa y su mujer, le aceptó. Pasados unos días, vieron que el gato era tuerto y que la mancha blanca del pecho, no era una figura abstracta, cuanto más se la miraba más se parecía a un patíbulo. Desde el primer día el gato le quería mucho, le seguía a todas partes y eso en lugar de gustarle, le hacía ***** más antipatía, se lo quería sacar de encima, pero el miedo le impedía hacerle daño. No podía dormir por la insoportable angustia. Cierto día se decidió a vencer su miedo, cogió un hacha y al intentar golpear al gato su mujer le paro el brazo, pero él, sufría una rabia endemoniada, tenía que desahogarse y hundió el hacha en la cabeza de su mujer. Sin saber como librarse del cadáver, barajó muchas posibilidades, pero la mejor fue emparedarla en el sótano. Lo hizo y no se notaba.
La policía fue a su casa, él totalmente impasible, le enseñó toda la casa, sin temor, porque sabía que había hecho una buena labor. Se fueron sin sospechar. Pero al cabo de tres días, volvieron, él como siempre inalterable, buscaron más intensivamente, sin dejarse ni un solo rincón y cuando y se iban, él, para aparentar más tranquilidad dijo unas palabras, y se oyó un aullido terrible, que hizo sospechar a los policías, bajaron y derribaron la pared y encontraron allí, a la mujer y al primer gato muertos y el segundo vivo que era el autor del aullido.
La verdad sobre el caso del señor Valedemar.
El protagonista es un hipnotizador, y se le ocurrió que nunca había imnotizado a alguien “in articulo mortis” y quería investigar:
1.-si sería susceptible a las influencias del hipnotismo.
2.-si aumentaría o diminuiría la dicha susceptibilidad.
3.-Hasta que punto o por cuánto tiempo, el proceso hipnótico sería capaz de detener la muerte.
Entonces se acordó de su amigo Ernest Valdemar, que ya se había sometido a experimentos de hipnotismo con él, pero su voluntad nunca quedaba bajo total dominio del hipnotizador. Hacía poco que habían diagnosticado tuberculosis, y él, le fue a visitarle, para ver si quería someterse a su experimento. Le dijo que le enviara una carta cuando sólo le faltasen veinticuatro horas para fallecer.
Después de siete meses recibió una nota y se fue hacía la casa de Valdemar.
El estado de Valdemar había empeorado mucho en poco tiempo, y los médicos le explicaron por todas las fases que habían pasado. Le dijeron que moriría el domingo a medianoche. Hoy era sábado a las siete. Llevaron a cabo el experimento: el hipnotizador, dos enfermeros y un médico joven que se ofreció a tomar nota de todo lo que ocurriera.
A las ocho empezó a efectuar el experimento, no logró señales hasta después de las diez, cuando llegaron los médicos. Casi no se percibía pulso, ni aliento y las extremidades estaban heladas. A la doce estaba totalmente bajo la hipnosis, se quedaron a pasar la noche los doctores, los enfermeros y el hipnotizador. A las tres consiguió hacerle mover los brazos hacia donde él quería (nunca lo había logrado antes con él). Y empezó a hacerle preguntas, tardaba en contestar pero respondía y le decía que dormía que le dejara morir así, no sufría pero sabía que se moría.
Seguía haciendo la misma pregunta y él seguía respondiendo, cada vez tardaba más, pero contestaba.
Al cabo de unas horas le formuló otra vez la pregunta y asombrantemente contestó:
Si…no…estuve durmiendo…y ahora…ahora…estoy muerto.
No había ninguna señal de vida, ni latido, ni aliento. Siguió así durante siete meses, sin progresos ni retrocesos, hasta que decidieron despertarlo porque no conseguían nada así, lo intentó, pero no hacía señales, le preguntaron y dijo- ¡rápido despiérteme estoy muerto!-
Redacto literalmente:
<<¡Muerto!¡Muerto!>>que literalmente explotaban des de la lengua y no desde los labios del sufriente, bruscamente todo su cuerpo, en el espacio de un minuto, o aún menos, se encogió, se deshizo…se pudrió entre mis manos…no quedó más que una masa casi líquida de repugnante, de abominable putrefacción.
El retrato oval
El protagonista y Pedro ( su criado), encontraron un castillo y decidieron pasar la noche ahí, porque estaba gravemente herido
Al irse a dormir pidió que bajaran las persianas y que abrieran una cuantas bujías para poder leer.
Se pasó horas leyendo y a causa de eso la postura le resultaba incomoda y la luz no le ilumina bien, decidió cambiarla, y al hacerlo, encontró un retrato pintado en un nicho, era una mujer muy joven y el retrato tenía una belleza y una realidad increíble, que le hizo asustarse. Buscó en un libro que tenía la historia de aquel retrato oval.
Leyó, y encontró que un pintor estaba enamorado d una chica virgen y se casó con ella. Ella decía que solo le tenía envidia a las brochas y a la paleta, porque era lo único que le quitaba tiempo a su amado.
Y el pintor le dijo que la quería retratar, a ella la idea la horrorizó, pero como le quería y era muy obediente, pasó durante días y semanas sentada para que la pintase y así complacerle. La gente admiraba y se asombraba del gran parecido y la vida que tenía el retrato. Cuando sóloo faltaban unas pocas pinceladas, la dama empezó a oscilar vacilante, y cuando acabó dijo:
<<¡Ciertamente, ésta es la vida misma!>>
Y al mirar a su amada estaba muerta.
La máscara de la Muerte Roja.
La Muerte Roja era la más brutal de las pestes, media hora después de la infección, se producía la muerte.
Para salvarse el Príncipe Próspero, decidió encerrarse con mil amigos, damas y caballeros, en una de sus abadías fortificadas con el fin de no contaminarse.
Esta fortaleza era muy especial, disponía de siete salas, ninguna de ella alineada con la otra, y todas decoradas de colores distintos. La primera era totalmente azul, la segunda de tonos púrpuras, la tercera verde, la cuarta naranja, la quinta en blanco, la sexta en violeta y la séptima era la más especial de todas porque estaba totalmente cubierta de terciopelo negro, pero los cristales eran de color escarlata. En ningún aposento había ni bujías, ni lámparas, pero la iluminación se debe unos trípodes que contenían braseros y eso producía que la luz traspasase los cristales y diera color a la luz que daba. Y eso le daba más ambiente terrorífico a la séptima habitación. También en ésta había un precioso reloj de ébano, que producía un sonido sordo, pesado y monótono, pero musical.
Cuando esto ocurría la orquesta dejaba de tocar, para poder oír el espectacular sonido y las parejas danzantes paraban de bailar.
El Príncipe organizó una fiesta de máscaras y todo transcurrió con total normalidad hasta, que al sonido de la medianoche, las doce campanadas del reloj, todos se callaron, pararon y meditaron, entonces al acabar, todos se fijaron en un hombre enmascarado y que iba envuelto de cabeza a los pies en una mortaja y empapado de sangre, la gente se apartaba, no gustaba, el príncipe se enteró y le dijo que se acercara, pero el miedo, le invadió y iba alejándose a través de las salas a medida que de acercaba a él.
El príncipe, se armó de coraje y sacó un puñal, y se oyó un grito fuerte y el príncipe cayó muerto.
Se sacó la mascara y en ella no contenía nada tangible, entonces reconocieron que era la presencia de la Muerte Roja y cada uno de los invitados fuero cayendo uno a uno y las salas quedaron empapadas de sangre.
La Muerte Roja lo dominó todo.
El misterio de Marie Rogêt.
Es la continuación del anterior cuento <>.
Cuenta el asesinato de una joven muy bella, popular y famosa. Una muerte misteriosa.
En este cuento Allan Poe se dedica a recoger retales de los principales periódicos neoyorquinos, pero para poder hablar con sinceridad y sin temor, la sitúa en París; también lo hace para crear el clima de misterio que rodea la antigua ciudad.
Va explicando, todos los retales, y también nos muestra su opinión respecto a ellos.
Se trata de la joven Marie Roget que una mañana sale de casa diciéndole a su madre que va a casa de su tía y que no volverá hasta el anochecer, y que la irá a recoger el chofer. No volvió, no fue a ver a su tía, pero nadie se alarmo porque cinco meses antes también se había escapado, pero al cuarto día, se encontró su cadáver flotando en el río. Empezó una minuciosa investigación con recompensa, para encontrar al culpable o culpables.
Dos semanas más tarde unos niños encontraron el escenario del crimen, dónde se podía apreciar; el suelo pisoteado, trozos de tela en los arbustos próximos, una sombrilla y un pañuelo bordado con el nombre de Marie Rogêt, todos estos con una capa de musgo por encima.
Por las características del bosque podemos deducir que esos objetos no llevaban más de dos días y también porque en eses lugar jugaban siempre esos niños que lo encontraron, pero el asesinato había ocurrido dos semanas antes.
También un fenómeno curioso es que un cuerpo ahogado, tarda unas dos semanas en salir a flote, y este solo tardó dos días después de su desaparición.
Todo apuntaba a una pandilla de malhechores, que habían violado y matado a una chica joven Mary Cecilia Rogers, poco tiempo antes, pero Allan Poe, no creía en esa teoría.
Él mismo descubre que el asesinato lo llevó a cabo un enamorado de la víctima, que era marinero.
La mata, la tira al río desde una barca, y después intenta simular que han sido la pandilla de chicos.
2007-02-14 12:00:43
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answer #1
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answered by novaleo 5
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