Pseudociencia es un término que da cuenta de un conjunto de supuestos conocimientos, metodologías, prácticas o creencias no científicas pero que reclaman dicho carácter. Este concepto es utilizado por los enfoques epistemológicos preocupados por el criterio de demarcación de la ciencia y tiene mayor consenso entre las ciencias exactas y naturales.
Características de las pseudociencias
Algunas de las características que permiten reconocer a las pseudociencias como tales son:
No aplican una metodología de carácter científico.
Son dogmáticas. Sus principios están planteados en términos tales que no admiten refutación, a diferencia de las ciencias, donde las condiciones de refutación de las hipótesis o teorías están determinadas con precisión.
Proclaman teorías para las que no aportan pruebas empíricas, que a menudo contradicen abiertamente resultados experimentales conocidos y aceptados por las ciencias bien establecidas.
Proclaman teorías inconexas con los conocimientos y teorías de la ciencia.
Utilizan lenguaje científico pero sólo en apariencia, desconociendo o malinterpretando su significado.
Violan el principio de Occam, que es un principio heurístico según el cual cuando varias explicaciones son racionalmente válidas, y en ausencia de otro criterio, es preferible la explicación más simple.
No buscan leyes generales.
Descalifican las críticas por parte de las ciencias, a menudo, utilizando falacias ad hominem, aduciendo conspiraciones o proclamándose objeto de persecución cuando sus planteamientos son rebatidos.
Invocan entes inmateriales o sobrenaturales inaccesibles a la investigación empírica, tales como fuerza vital, creación divina, inconsciente metafísico, necesidad histórica, etc.
Proclaman y exigen que se reconozca su carácter científico, pero sólo ante el público general, renunciando a poner a prueba sus explicaciones ante la comunidad científica establecida. El hecho de reclamar estatus científico las diferencia de otras actividades como las religiones.
Algunos críticos de la pseudociencia consideran algunas o todas las formas de pseudociencia como pasatiempos inofensivos. Otros, como Richard Dawkins, Carl Sagan y Mario Bunge, consideran que todas las formas de pseudociencia son dañinas, causen o no daños inmediatos a sus seguidores. Estos críticos generalmente consideran que la defensa de la pseudociencia puede suceder por varias razones, que van desde la simple candidez sobre la naturaleza de la ciencia y el método científico, hasta un engaño deliberado por beneficios económicos o políticos.
2007-02-09 10:17:51
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answer #1
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answered by Anonymous
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