producciòn de maiz en mexico?

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Trabajo Conjunto para Conservar la Diversidad del Maíz en México


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El estado mexicano de Oaxaca alberga más de 150 variedades de maíz.
Foto: D. Poland, CIMMYT

2000-04-07

Louise Guénette

En los supermercados a menudo se tiene la impresión de que hay sólo un tipo de maíz a la venta — dos si la tienda vende también hojuelas de maíz azul. Sin embargo, en sólo una región del estado mexicano de Oaxaca hay más de 152 variedades locales, o criollas, de maíz. Los habitantes de Mesoamérica, área que incluye a México, Guatemala, el norte de Honduras y El Salvador, llegaron a dominar el cultivo del maíz hace unos 6.000 años, y ese grano, con el que los mexicanos han creado más de 600 recetas, es todavía el cultivo básico más importante de la región.

Sin embargo, la diversidad que alimenta y da sabor a la vida en Oaxaca podría no durar eternamente, expresa Mauricio Bellon, científico que trabaja en el Programa de Economía del Centro Internacional para el Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), cerca de la Ciudad de México. El desarrollo económico podría arrasar con nuestras variedades criollas a medida que los agricultores hagan la transición hacia la agricultura comercial o abandonen la actividad agrícola, subraya. Algo peor que podría suceder sería que se perdiera la diversidad sin que en el proceso se lograra un desarrollo económico, ya que los investigadores de CIMMYT han descubierto que la amplia diversidad del maíz ayuda a los campesinos locales a luchar contra la pobreza.

Estrategia de siembra

Mediante el empleo de semillas almacenadas, producto por lo general de la última cosecha, las familias cultivadoras de maíz en Oaxaca a menudo siembran más de una variedad criolla con el fin de aprovechar diferentes características tales como resistencia, rendimientos más altos o un tallo más fuerte. Asimismo, diferentes variedades satisfacen diferentes necesidades: algunas son buenas como pienso para ganado mientras que otras se prestan mejor para hacer tortillas más sabrosas.

Sin embargo, cuando los agricultores actuales (que por lo general son también trabajadores asalariados) pierden una cosecha, podrían no contar con una sólida red local de familiares y amigos que les ayuden a reemplazar las semillas — como se hacía tradicionalmente — ni tampoco disponen siempre del tiempo para encontrar a quienes estén usando la variedad que perdieron. Si declina el número de variedades criollas en uso, los campesinos perderán su capacidad para sobrevivir a las alzas y bajas de la economía mexicana, y el mundo perderá las características genéticas de las variedades, que podrían incluir la resistencia a las enfermedades o a ciertas condiciones climáticas.

Trabajo conjunto

En 1997, el CIMMYT y el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) de México, con financiamiento del CIID, se propusieron explorar las áreas donde los agricultores pueden aunar sus esfuerzos para conservar la diversidad del maíz. Algunos expertos dicen que unas cuantas bolsas de semillas en el congelador de un 'banco genético' son suficientes para preservar los genes que pueda contener cualquier variedad, pero el Dr. Bellon discrepa de esas opiniones. Si bien el proyecto de conservación de maíz incluye el muestreo para añadir a la colección del CIMMYT las variedades criollas de Oaxaca, él y otros investigadores están convencidos de que las semilla tomadas de una planta en evolución son un importante complemento para sus primas congeladas.

«Se pueden tener los genes, las piezas, pero las interacciones presentes en esa planta viva en estado de evolución se pierden en el congelador. Y eso es lo que los agricultores contribuyen a mantener, los procesos de transformación...una gran diversidad de materiales que están expuestos a todas las influencias de la evolución, año tras año», expresa el Dr. Bellon.

Función de los agricultores

La hipótesis de trabajo de CIMMYT en Oaxaca plantea que los agricultores desempeñan un papel en la selección al elegir, durante la cosecha y en el transcurso del año, las mazorcas cuyas semillas se sembrarán en la próxima estación. El Centro trata de comprender ese papel, documentar el efecto que tiene sobre la diversidad de los genes y encontrar medios de ayudar a los agricultores a mejorar lo que ya ellos hacen, explica el Dr. Julien Berthaud, que dirige el componente genético de la investigación.

Hasta este momento, el proyecto ha sido una experiencia de aprendizaje para todos los participantes. Por ejemplo, el Dr. Bellon cuenta la historia de cómo una variedad de maíz cuyos granos presentan un moteo púrpura fue puesta en la lista de las 17 variedades criollas regionales (seis de las cuales fueron mejoradas científicamente) que el proyecto se encargaría de observar. A pesar de que los agrónomos no estaban muy impresionados con el rendimiento de esa planta, proporcionada sólo por un agricultor que la había heredado de su hermana, el 54% de las mujeres entrevistadas se mostraban partidarias de ella. La interrogante se resolvió al saberse que en las mazorcas de esa variedad era más fácil separar los granos y a las mujeres les gustaba el halo púrpura que, una vez molidos los granos, adquirían los tamales.

Mentalidad de consumidores

En las seis comunidades de Oaxaca con las que trabajaba el CIMMYT, la mayoría de los agricultores cultivaban maíz para consumo familiar, de modo que tenían una mentalidad consumista antes que comercial. Ese tipo de agricultor invierte poco dinero y algunas veces poco tiempo en el cultivo. Entre las características que buscan en las plantas de maíz se encuentran la tolerancia a la sequía, ya que dependen del agua de lluvia; resistencia a insectos cuando están almacenadas; resistencia a los desastres naturales; peso del grano; y el sabor que dan a las tortillas.

El equipo de investigación ha descubierto que el cruzamiento científico ha aportado poco a esos agricultores. Solamente una de las seis comunidades de Oaxaca entrevistadas por el CIMMYT usa semillas científicamente mejoradas — y sólo en el 7% de sus tierras. (Por el contrario, en la zona agrícola centro-norte de El Bajío, en México, se utilizan ampliamente las semillas mejoradas). A ese tipo de semillas se las considera «semillas para los ricos», señaló un agricultor de Chiapas, quien explicó que necesita una variedad menos exigente que pueda sobrevivir a la falta de cuidado cuando él esté ocupado en su trabajo asalariado y no pueda atender los cultivos regularmente.

Capacitación

Los investigadores creen que pueden ayudar a los agricultores de Oaxaca a lograr mejores rendimientos con las semillas existentes mediante la capacitación, la cual puede brindar a los campesinos medios más eficientes para preservar las características que aprecian en una semilla. Por ejemplo, el equipo explicaba a los agricultores locales que es mejor seleccionar semillas en el terreno y no en el hogar, ya que ello permite identificar a las plantas con mejor rendimiento en las condiciones reales de cultivo. El equipo también enseñó a los agricultores a cortar las espigas de plantas de maíz superfluas para evitar la difusión de genes indeseables, y a formar bancos de semillas de la mayor cantidad de mazorcas como fuera posible con objeto de elevar al máximo la diversidad genética. El CIMMYT tendrá la oportunidad de comprobar la eficacia de esas medidas durante los próximos años.

Quizás el resultado más valioso de este proyecto sea que los investigadores han llegado a comprender la manera en que los agricultores administran las semillas, además de haber obtenido un panorama genético de lo que ocurre en sus campos. Esa información puede utilizarse entonces para crear un modelo de lo que sucede cuando se introducen los granos mejorados. (La práctica de los agricultores de mezclar sus semillas con las de amigos y familia, por ejemplo, podría invalidar la introducción en Oaxaca del Maíz Protéico de Calidad, del CIMMYT, que pierde sus propiedades cuando se mezcla con otros). El modelo podría ayudar también a predecir las repercusiones que tendrán las semillas genéticamente modificadas en un sistema de cultivo no comercial.

Louise Guénette, escritora independiente asentada en la Ciudad de México.

[Referencia: Proyecto del CIID # 960008]



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Para mayor información:
Dr. Mauricio Bellon, científico, Programa Económico, Cenro Internacional para el Mejoramiento del Maíz y el Trigo, Apdo Postal 6-641, México, D.F.; teléfono: (52-5) 804-2004; facsímil: (52-5) 804-7558/59; correo electrónico: [e-mail]
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Answer 2

HOLA;

Te refieres a que si hay produccion en Mexico, claro que la hay, nadamas que nuestro gobierno que dio las nalgas a Estados Unidos, y por eso esta comprando el Maiz, blanco de los "gringos" ademas no tienen nutrientes.
Yo tengo amigos campesinos que tienen tanto MAIZ que se les esta hechando a perder por que no les estan comprando. Y cual presidente del "EMPLEO"? del empleo
para las grandes empresarios y los mismos politicos de MEXICO, esto solo beneficia a MASECA; BIMBO, con sus tortillas sinteticas, y las transcionales que lo venden "Wallmart"
SALUDOS