Desencantado por mi inexperiencia con la carpintería me dirigí al bar, ahí comería un poco y charlaría con mis amigos para olvidarme de mi fracaso. Al llegar les narré los aconteceres de mi fallido proyecto, ellos, en afán de ayudarme comentaron que conocían a alguien con mucha experiencia en ese tipo de trabajos, un especialista en maderas preciosas.
-Te recomendaremos a uno muy bueno…- Aseguraron- El mejor que hemos conocido es a Jim Mckey!!!
-¿Y dónde vive ese tal Jim…?- Pregunté con un tono de dejadez por aún no haberme repuesto de mi desengaño.
Con la dirección del sujeto anotada en un trozo de servilleta, me encaminé esa misma tarde hacia las afueras de la ciudad. Al final de un angosto camino alcancé a ver una pequeña y semi destruida cabaña, rodeada de un triste y seco jardín atestado de corroídos repuestos de camiones viejos. Estaba seguro de hallarme en el lugar equivocado pues, a juzgar por el estado de la casa, ésta no parecía ser propiedad de un ebanista profesional, sin embargo ahí podrían indicarme el camino correcto así que me acerqué con cautela para no sorprender a los moradores.
-¡¡Holaa…!! ¡Buenas tardes…! ¿Hay alguien aquí…?
Al no obtener más respuesta que la huida de unos gatos, me acerqué hasta tocar la puerta, la cual para mi sorpresa no tenía cerradura y se abrió de par en par tras el primer golpe de mis nudillos. En el interior de la vivienda parecía haber ocurrido un terremoto de gran escala, todo se encontraba sucio y desordenado. Al fondo, meciéndose en una vieja silla, se encontraba un hippie cuya desaliñada barba y larga melena apenas dejaba colar su expresión amarga. Se me quedó viendo inquisitivamente por algunos segundos y luego, con un marcado desdén y voz agria preguntó:
-¿Que quieres…?
-Escuché que eras el mejor en…-
-¡¡…Me tiene sin cuidado ser el mejor…!! ¿Qué es lo que quieres?- Interrumpió bruscamente.
-Busco a un tal Jim Mckey pero creo que él no está aquí…- Respondí indignado ante la pedantería del extraño sujeto.
-¡¡Yo soy Jim Mckey!!- Gritó exacerbado.
-¡Si tu eres Jim Mckey ya no me interesa hablar con Jim Mckey¡- Agregué defensivo por su tosca actitud, di la vuelta y enojado me alejé de la casa dispuesto a regresar a la ciudad.
2007-01-06
11:19:45
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pregunta de
Anonymous
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Arte y humanidades
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