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LA BIBLIA CONDENA TENER dioses ajenos Y CONDENA LA IDOLATRIA.LA IGLESIA CATOLICA PRACTICA EL CULTO A MARIA,LO CUAL VA EN CONTRA DE LAS ENSENANZAS DE DIOS MISMO.TODO ESTE TEATRO FUE UN INVENTO DE LOS CURAS CATOLICOS ESPANOLES PARA SUBYUGAR MAS A LOS INDIGENAS Y DE ESA FORMA HACER "LA CONQUISTA" MUCHO MAS FACIL.?PORQUE NO SE LE APARECIO A UNO DE ELLOS? LAS FLORES DEL SUPUESTO MANTO EN ESA EPOCA SOLO SE DA EN ESA EPOCA EN EUROPA,EN OTRAS PALABRAS EN MEXICO ESE TIPO DE FLOR NO EXISTIA.

LA IGLESIA DE ROMA LO SABE MUY BIEN,PERO PARA ELLOS ES MUCHO MEJOR MANTENER ESE CULTO POR DOS RAZONES:
1......LES DEJA MUCHOS MILLONES EN DINEROS Y OTRAS COSA.
2......MANTIENE AL PUEBLO EN LA IGNORANCIA.
NO OLVIDEMOS QUE HASTA NO HACE MUCHO, SOLAMENTE ELLOS PODIAN TENER UNA BIBLIA.TAN ES ASI QUE MUCHOS PRIVAN SU LECTURA .

ESTA IMAGEN NO ES PATRONA DE LOS MILLONES DE CRISTIANOS QUE HAY EN TODA AMERICA,TAMPOCO ES PATRONA DE NINGUNA NACION.?QUIEN LE DIO ESA POTESTAD? DIOS NO FUE. ADOREN A DIOS

2006-12-07 20:50:23 · 14 respuestas · pregunta de montillacinx 2 en Sociedad y cultura Religión y espiritualidad

14 respuestas

Totalmente de acuerdo. Estas palabras me hacen confiar en que alguna generación futura logrará ver la verdad oculta por quienes se adueñaron y condicionaron la fe de los pueblos.

2006-12-07 20:57:33 · answer #1 · answered by Claudio M 6 · 2 4

La mejor manera de conocer la verdad acerca de María es ver lo que la Biblia dice y enseña sobre ella. Todo lo otro son o enseñanzas de hombres, tradiciones y falsedades.
Te transcribo información bíblica acerca de María.
. María, la madre de Jesús. Era hija de Helí, aunque en la genealogía de Lucas se lee que José, el esposo de María, era “hijo de Helí”. La Cyclopædia (de M’Clintock y Strong, 1881, vol. 3, pág. 774) dice: “Es sabido que los judíos trazaban su árbol genealógico únicamente por el nombre del varón, y cuando el linaje del abuelo pasaba al nieto por medio de una hija, se omitía el nombre de esta y se ponía el de su esposo como hijo del abuelo materno (Núm. XXVI, 33; XXVII, 4-7)”. Esta debió ser la razón por la que el historiador Lucas dice que José era “hijo de Helí”. (Lu 3:23.)
María era de la tribu de Judá y descendiente de David. Por consiguiente, se podía decir que su hijo Jesús “provino de la descendencia de David según la carne”. (Ro 1:3.) Por su padre adoptivo José, descendiente de David, Jesús tenía el derecho legal al trono de David, y por su madre, como “prole”, “descendencia” y “raíz” de David, tenía el derecho hereditario natural al “trono de David su padre”. (Mt 1:1-16; Lu 1:32; Hch 13:22, 23; 2Ti 2:8; Rev 5:5; 22:16.)
Si la tradición está en lo cierto, Ana fue esposa de Helí y madre de María. Una hermana de Ana tuvo una hija llamada Elisabet, que fue la madre de Juan el Bautista. Según esa tradición, Elisabet era prima de María. Las Escrituras dicen que María estaba emparentada con Elisabet, que era “de las hijas de Aarón”, de la tribu de Leví. (Lu 1:5, 36.) Algunos piensan que Salomé, esposa de Zebedeo y madre de Juan y Santiago, dos de los apóstoles de Jesús, era hermana de María. (Mt 27:55, 56; Mr 15:40; 16:1; Jn 19:25.)
La visita un ángel. A finales del año 3 a. E.C., Dios envió al ángel Gabriel a María, una muchacha virgen del pueblo de Nazaret. “Buenos días, altamente favorecida, Jehová está contigo”, fue el sorprendente saludo del ángel. Cuando le dijo que concebiría y daría a luz un hijo llamado Jesús, María, que en aquel tiempo solo estaba comprometida con José, preguntó: “¿Cómo será esto, puesto que no estoy teniendo coito con varón alguno?”, a lo que el ángel respondió: “Espíritu santo vendrá sobre ti, y poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso, también, lo que nace será llamado santo, Hijo de Dios”. Emocionada con la perspectiva, pero con la debida modestia y humildad, ella contestó: “¡Mira! ¡La esclava de Jehová! Efectúese conmigo según tu declaración”. (Lu 1:26-38.)
A fin de fortalecer aún más su fe para esta experiencia tan importante, a María se le informó de que su parienta Elisabet, ya anciana, había dejado de ser estéril por el poder milagroso de Jehová y estaba encinta de seis meses. María fue a visitarla, y cuando entró en su casa, la criatura que estaba en la matriz de Elisabet saltó de gozo. Ante esto, Elisabet felicitó a María diciendo: “¡Bendita eres tú entre las mujeres, y bendito es el fruto de tu matriz!”. (Lu 1:36, 37, 39-45.) A continuación María pronunció bajo inspiración palabras de alabanza a Jehová por su bondad. (Lu 1:46-55.)
Tras pasar unos tres meses con Elisabet en la serranía de Judá, María volvió a Nazaret. (Lu 1:56.) Cuando José se enteró de que estaba embarazada (probablemente por boca de la propia María), pensó en divorciarse de ella en secreto, más bien que exponerla a la vergüenza pública. (A las personas comprometidas se las consideraba como si estuvieran casadas, y se requería un divorcio para disolver el compromiso.) Pero el ángel de Jehová se le apareció y le reveló a José que lo que había sido engendrado en ella era por espíritu santo. Por consiguiente, José obedeció la instrucción divina y tomó a María por esposa, “pero no tuvo coito con ella hasta que ella dio a luz un hijo; y le puso por nombre Jesús”. (Mt 1:18-25.)
Da a luz a Jesús en Belén. En el transcurso de estos acontecimientos, el decreto de César Augusto que exigía que todos se registraran en su pueblo natal resultó providencial, pues tenía que cumplirse la profecía concerniente al nacimiento de Jesús. (Miq 5:2.) Por lo tanto, José tomó a María, que se encontraba “en estado avanzado de gravidez”, y la llevó en un agotador viaje de 150 Km. desde su casa de Nazaret, en el N., hasta Belén, al S. Como no había sitio en el hospedaje, el niño nació en las condiciones más humildes y fue acostado en un pesebre. Esto ocurrió probablemente alrededor del 1 de octubre del año 2 a. E.C. (Lu 2:1-7; véanse GRABADOS, vol. 2, pág. 537; JESUCRISTO.)
Cuando los pastores oyeron al ángel decir: “Les ha nacido hoy un Salvador, que es Cristo el Señor, en la ciudad de David”, se apresuraron a Belén y allí hallaron la señal: el hijo de María estaba “envuelto en bandas de tela y acostado en un pesebre”. Informaron a la feliz familia lo que el gran coro de ángeles había cantado: “Gloria en las alturas a Dios, y sobre la tierra paz entre los hombres de buena voluntad”. María, por su parte, “iba conservando todos estos dichos, sacando conclusiones en su corazón”. (Lu 2:8-20.)
Al octavo día, María hizo circuncidar a su hijo en obediencia a la ley de Jehová. A los cuarenta días ella y su esposo llevaron al niño al templo de Jerusalén para presentar la ofrenda prescrita. La Ley requería el sacrificio de un carnero joven y un palomo o una tórtola. Si la familia no poseía lo suficiente para la oveja, se tenían que ofrecer dos tórtolas o dos palomos. El que María ofreciese “un par de tórtolas o dos pichones” muestra que José era un hombre de escasos recursos. (Lu 2:21-24; Le 12:1-4, 6, 8.) Cuando el anciano Simeón, un hombre justo, vio al niño, alabó a Jehová por haberle permitido contemplar al Salvador antes de morir. Volviéndose a María, dijo: “Sí, a ti misma una espada larga te atravesará el alma”, no queriendo decir que ella sería traspasada con una espada literal, sino que experimentaría dolor y sufrimiento a causa de la predicha muerte de su hijo en un madero de tormento. (Lu 2:25-35.)
Vuelve a Nazaret. Cierto tiempo después, un ángel le advirtió a José de la trama urdida por Herodes el Grande para matar al niño y le ordenó que huyese con Jesús a Egipto. (Mt 2:1-18.) Una vez muerto Herodes, la familia volvió y se estableció en Nazaret. Allí María tuvo más hijos, de los que por lo menos cuatro eran varones. (Mt 2:19-23; 13:55, 56; Mr 6:3.)
Aunque la Ley no requería que las mujeres asistieran a la celebración anual de la Pascua, María solía acompañar a José año tras año en el largo y difícil viaje de unos 150 Km. hasta Jerusalén con este propósito. (Éxo. 23:17; 34:23.) En uno de esos viajes, alrededor del año 12 E.C., después que la familia había salido de Jerusalén y recorrido la distancia correspondiente a un día para regresar a su casa, descubrieron que faltaba Jesús. Sus padres volvieron inmediatamente a Jerusalén para buscarlo. Después de tres días lo hallaron en el templo, escuchando e interrogando a los maestros. María exclamó: “Hijo, ¿por qué nos trataste de este modo? Mira que tu padre y yo te hemos estado buscando con la mente angustiada”. Jesús respondió: “¿Por qué tuvieron que andar buscándome? ¿No sabían que tengo que estar en la casa de mi Padre?”. Ciertamente el lugar lógico donde hallar al Hijo de Dios era el templo, donde podría recibir instrucción bíblica. María “guardaba cuidadosamente todos estos dichos en su corazón”. (Lu 2:41-51.)
A los doce años Jesús demostró un conocimiento sobresaliente para su edad: “Todos los que le escuchaban quedaban asombrados de su entendimiento y de sus respuestas”. (Lu 2:47.) El conocimiento y el entendimiento que tenía Jesús de las Escrituras reflejaba que sus padres le habían dado una excelente educación. Tanto María como José debieron ser muy diligentes en enseñar y educar al niño, criándolo en “la disciplina y regulación mental” de Jehová y cultivando en él la costumbre de asistir a la sinagoga todos los sábados. (Lu 4:16; Ef 6:4.)
Jesús la amaba y respetaba. Después de su bautismo, Jesús no manifestó favoritismo alguno por María; no se dirigió a ella como “madre”, sino simplemente como “mujer”. (Jn 2:4; 19:26.) El uso de este término en el contexto de la época no demostraba en ningún sentido falta de respeto. Su uso moderno tampoco tiene por qué transmitir un sentimiento negativo. María era la madre de Jesús según la carne, pero desde que se le engendró por espíritu en el momento de su bautismo, fue principalmente el hijo espiritual de Dios y su “madre” era “la Jerusalén de arriba”. (Gál 4:26.) Jesús puso de relieve este hecho cuando María y sus otros hijos le interrumpieron en una ocasión, mientras estaba enseñando, pidiéndole que saliese afuera, a donde ellos estaban. Jesús mostró que en realidad su madre y sus parientes cercanos eran los miembros de su familia espiritual y que los asuntos espirituales tenían prioridad sobre los carnales. (Mt 12:46-50; Mr 3:31-35; Lu 8:19-21.)
Cuando faltó el vino en una boda en Caná de Galilea y María le dijo a Jesús: “No tienen vino”, él respondió: “¿Qué tengo que ver contigo, mujer? Todavía no ha llegado mi hora”. (Jn 2:1-4.) Jesús se valió de una antigua forma interrogativa que aparece ocho veces en las Escrituras Hebreas (Jos 22:24; Jue 11:12; 2Sa 16:10; 19:22; 1Re 17:18; 2Re 3:13; 2Cr 35:21; Os 14:8) y seis veces en las Escrituras Griegas. (Mt 8:29; Mr 1:24; 5:7; Lu 4:34; 8:28; Jn 2:4.) Traducida literalmente, la pregunta diría: “¿Qué para mí y para ti?”, queriendo decir: “¿Qué hay en común entre yo y tú?”, “¿qué tenemos en común tú y yo?” o “¿qué tengo que ver contigo?”. En cada uno de los casos, la pregunta indica objeción a lo que se ha sugerido, propuesto o sospechado. Así que Jesús expresó de esta forma su bondadosa reprensión, indicándole a su madre que él recibía instrucciones de la Autoridad Suprema que le había enviado y no de ella. (1Co 11:3.) María, mujer sensible y humilde, lo entendió rápidamente y aceptó la corrección. Se hizo a un lado y, para dejar que Jesús llevase la delantera, dijo a los servidores: “Todo cuanto les diga, háganlo”. (Jn 2:5.)
María estaba junto al madero de tormento cuando fijaron a Jesús. Para ella, Jesús era más que un hijo amado, era el Mesías, su Señor y Salvador, el Hijo de Dios. Al parecer, en aquel entonces María ya había enviudado. Por consiguiente, Jesús, como primogénito de la casa de José, cumplió con su responsabilidad y pidió al apóstol Juan, probablemente su primo, que llevase a María a su casa y cuidase de ella como si fuera su propia madre. (Jn 19:26, 27.) ¿Por qué no la confió Jesús a uno de sus medio hermanos? No se dice que ninguno de ellos estuviera presente. Además, no eran creyentes, y Jesús consideraba la relación espiritual más importante que la carnal. (Jn 7:5; Mt 12:46-50.)
Discípula fiel. La última referencia bíblica a María muestra que era una mujer creyente y devota y que todavía tenía una relación estrecha con otros fieles después de la ascensión de Jesús. Los once apóstoles, María y otros discípulos estaban reunidos en un “aposento de arriba”, y “todos estos persistían de común acuerdo en oración”. (Hch 1:13, 14.)

La Biblia muestra claramente que toda la adoración se la debemos dar a Jehová Dios y que el único intermediario es Jesucristo. Por lo tanto este es el camino que debemos andar para que nuestra adoración y oraciones sean recibidas y contestadas por Dios.

2006-12-07 21:36:16 · answer #2 · answered by Anonymous · 4 1

Primero: el antiguo testamento dice que no idolatraras a falsos dioses.
segundo: hizo falta en algun momento de la historia del mundo una imagen maternal y comprensiva en contraste con el antiguo testamento de un dios que castigaba y enviaba pestes.
despues lo q dices es cierto, "la iglesia" maneja mucho dinero, pero tambien hay otra realidad... aca abajo... los simples mortales... necesitamos creer... y hay gente o sacerdotes que trabajan con conviccion y lejos de roma... y podemos valorar desde otro punto de vista la religion y existen los pequeños milagros... cuando los españoles nos "conquistaron" con algo de marketing se dieron cuenta q nuestros antepasados indigenas respetaban y eran dociles ante una figura femenina entonces maria tiene distintas advocaciones, virtudes y milagros de acuerdo al lugar y la necesidad

2006-12-08 01:41:21 · answer #3 · answered by mari ann 3 · 2 1

no te parece que sos un soberbio diciendo que los que creen en la virgen son ignorantes. ¡¿ que es mejor ser soberbio o ignorante?! . seguro que sos protestante no se por que se la agarran con la virgen, ella es la madre de donde sacaste lo de la idolatria

ustedes no tienen al dinero com0o segundo Dios????, son soberbio y adoran al dinero, crees que eso es mejor que amar, amar , amar a la madre de nuestro poderoso señor jesuscristo que es el rey maestro amigo hermano, que creen que hacen ustedes no reconociendo a su santa madre. creen que son mejores por tener diferencias estupidas con nosotros los catolicos que amamos a la virgen???
y te hago una pregunta por que no bailan???
nunca confiaria en un monje que no baila.. donde esta la alegria de ser hijos de DIOS?????

2006-12-08 02:13:47 · answer #4 · answered by Anonymous · 2 2

Apuesto lo que quieras a que eres un testigo de jehová, dime una cosa: ¿Por que hablas de los católicos? ¿No se supone que conoces tu religión que dice: ¿Por que miras la **** en el ojo de tu hermano? quita te primero la viga que tienes en el ojo, antes de decirle a tu hermano que se quite la ****. ¿Por que no respetas las creencias de los demás?. Tu quieres que tus creencias se respeten ¿ no es así? el respeto se gana y es aprendiendo a respetar a los demás como se te respetara, precisamente esa es la libertad del ser humano, creer en lo que le plazca o simplemente no creer, cada quien tiene su verdad, así como tu tienes la tuya y nadie ni siquiera tu va hacer que dejen de creer en ella, si tus proyectos de vida es predicar tu religión o tus ideales, debo decirte que se predica con el ejemplo, no con ira y difamando a los católicos y sus creencias como lo haces tu,

Saludos!!!

2006-12-07 22:27:26 · answer #5 · answered by Anonymous · 2 2

Que haya cristianos que no celebren el día de hoy, bueno no tienen mi creencia y los respeto, para mi es un día muy especial, el día en que recordamos con amor a María , madre de mi redentor,

2006-12-07 21:22:55 · answer #6 · answered by nelida2121 6 · 2 2

Ella es la madre de Dios, y no vengas a decir algo que millones lo saben, la Fe en los santos es muy de la gente, no puedes cambiar eso, y por eso son los santos, intermediarios, el que hace el milagro es Dios.

2006-12-07 20:55:39 · answer #7 · answered by Anonymous · 3 3

Es uno de los dogmas de la Iglesia Católica creer en la virginidad de María que a través de los siglos ha credo la dualidad del Dios hombre-mujer para justificar su machismo (No permitir por ejemplo que haya sacerdotisas).
María concibió a Jesús como hijo de Dios hecho carne en la tierra y es a él como Hijo de Dios en la Trinidad que debemos de creer.
Considera históricamente la vida de María en la época de los romanos en una comunidad judía en la que las reglas eran muy cerradas, por ejemplo las mujeres adúlteras eras lapidadas y que cuando María concibió a Jesús era aún una adolescente y por contra José una persona bastante madura para ella.

2006-12-07 21:22:25 · answer #8 · answered by Joaco Regio 3 · 1 2

Y como es que dices que "1......LES DEJA MUCHOS MILLONES EN DINEROS Y OTRAS COSA."??? Como sabes vos si les deja "dinero y otra cosa? Que es "otra cosa"?

Dejate ya de tonteras y abri tu mente: Tus creencias no tienen porqué ser las mismas que las de tu vecino ni que las de nadie.

María es la Madre de nuestro salvador, de quien vino a jugarse el pellejo por vos y por todos los que lo han despeciado por tantos años. Además María no fue una "Don Nadie" que ni pinhaba ni cortaba en la vida de Jesús, pues fue su mentora, su apoyo y nunca, pero nunca lo abandonó. Creo que sería justo que reconociéramos algo de ella, pues no cualquiera apoya a un revolucionario como lo fue Jesús.

Además... ¿Quién dice que alguien está "idolatrando a otros dioses"? María no es ningún Dios. Ni cerca. Dios es uno, y para que sepas, la Santísima Trinidad que unifica al Padre, Hijo y al Espíritu Santo (Eso es un dogma de la Iglesia Católica) no incluye en ningun lugar a María.

MARÍA FUE LA MADRE DE JESÚS, Y COMO TAL, NO DEBEMOS DEJARLA A UN LADO. YA BASTA DE TONTERAS

2006-12-07 21:14:37 · answer #9 · answered by yoRespondo 3 · 2 3

uffffffff que sanata aburridísima!

2006-12-07 20:59:43 · answer #10 · answered by Anonymous · 0 1

los evangelista y protestantes no creen en la virgen

2006-12-07 20:59:59 · answer #11 · answered by Anonymous · 0 2

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