HOla!!!
Claro que sí, si no no crecería la duda de algo, no formularíamos preguntas, las mismas surgen de una duda o sea algo que no sabemos, y que nos interesa conocer y adquirir como conocimiento.
Si tenemos el saber previo, no necesitaríamos preguntar nada a nadie, lo sabríamos y punto, pero por suerte la mente humana es infinita en su sabiduría y siempre dispuesta a aprender cosas nuevas, nunca perdamos la curiosidad por aprender algo nuevo, por mínimo que sea. Suerte!!!
2006-11-10 13:08:39
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answer #6
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answered by Cayetana 4
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Los fundamentos que no pueden faltar
El concepto de saberes previos nos conduce a otro, más abarcativo: el de aprendizaje significativo. La idea esencial para promover un aprendizaje significativo es tener en cuenta los conocimientos factuales y conceptuales (también los actitudinales y procedimentales) y cómo éstos van a interactuar con la nueva información que recibirán los alumnos mediante los materiales de aprendizaje o por las explicaciones del docente.
Para Ausubel, la clave del aprendizaje significativo está en la relación que se pueda establecer entre el nuevo material y las ideas ya existentes en la estructura cognitiva del sujeto. Por lo expuesto, la eficacia de este tipo de aprendizaje radica en su significatividad y no en técnicas memorÃsticas.
Los prerrequisitos para que un aprendizaje sea significativo para el alumno son:
Que el material le permita establecer una relación sustantiva con los conocimientos e ideas ya existentes. A esta condición del material se la denomina significatividad lógica.
Un material es potencialmente significativo cuando permite la conexión de manera no arbitraria con la estructura cognitiva del sujeto. Es decir, el nuevo material (que puede ser un texto o la información verbal del docente) debe dar lugar a la construcción de significados. Ello depende, en gran medida, de la organización interna del material o, eventualmente, de la organización con que se presenta dicho contenido al alumno.
Disposición, interés y posibilidad de darle sentido a lo que aprende. Es decir, que el aprendizaje promueva una significatividad psicológica.
Ello hace referencia al hecho de que el aprendizaje pueda significar algo para el alumno y lo ayude a establecer una conexión no arbitraria con sus propios conocimientos.
Por lo visto, ambos prerrequisitos conducen al concepto de saberes previos, esto es, las ideas o conocimientos previos que los chicos han construido sobre determinados temas, tópicos o conceptos.
Los conocimientos previos de los alumnos en las diferentes áreas difieren tanto en lo que hace al contenido como a su naturaleza. Por ejemplo, algunos son más conceptuales, otros más procedimentales, más descriptivos o más explicativos. Estos factores varÃan según la edad y los aprendizajes anteriores.
El fundamento del aprendizaje significativo –ajeno a la aplicación de técnicas memorÃsticas– radica en la relación que pueda establecer el sujeto entre el nuevo material y las ideas y conocimientos previos pertenecientes a la estructura cognitiva que lo caracteriza.
Las investigaciones realizadas respecto del contenido y la naturaleza de los conocimientos previos en las diferentes áreas, han demostrado que existen algunos elementos en común:
los conocimientos previos son construcciones personales que los sujetos han elaborado en interacción con el mundo cotidiano, con los objetos, con las personas y en diferentes experiencias sociales o escolares;
la interacción con el medio proporciona conocimientos para interpretar conceptos pero también deseos, intenciones o sentimientos de los demás;
los conocimientos previos que construyen los sujetos no siempre poseen validez cientÃfica. Es decir, pueden ser teóricamente erróneos;
estos conocimientos suelen ser bastante estables y resistentes al cambio y tienen un carácter implÃcito.
El origen de los conocimientos previos es diverso pero, básicamente, pueden agruparse en tres categorÃas:
a. Concepciones espontáneas: se construyen en el intento de dar explicación y significación a las actividades cotidianas. En el ámbito de las ciencias naturales –especialmente en el mundo fÃsico– se aplican reglas de inferencia causal a los datos recogidos mediante procesos sensoriales y perceptivos.
b. Concepciones transmitidas socialmente: se construyen por creencias compartidas en el ámbito familiar y/o cultural. Estas ideas son inducidas en los alumnos especialmente en lo que se refiere a hechos o fenómenos del campo de las ciencias sociales.
c. Concepciones analógicas: a veces, por carecer de ideas especÃficas socialmente construidas o por construcción espontánea, se activan otras ideas por analogÃa que permiten dar significado a determinadas áreas del conocimiento. Las analogÃas se basan en conocimientos ya existentes
Organizar la enseñanza desde los conocimientos que ya poseen los alumnos es fundamental puesto que, frente a una nueva información o a un nuevo material, los chicos ponen en juego conocimientos anteriores, a partir de los cuales interpretan los nuevos contenidos. Ãsta es, como se dijo más arriba, una diferencia esencial entre el aprendizaje memorÃstico y el aprendizaje significativo.
En cualquier tipo de actividad de enseñanza que se presenta a los alumnos (ya sea por descubrimiento o por exposición), es necesario ayudarlos a establecer las relaciones entre el conocimiento nuevo y el que ya poseen. Por tal motivo, para encarar la enseñanza, es fundamental diagnosticar los saberes previos de los alumnos.
En el caso de que las ideas previas no sean cientÃficamente correctas, la tarea del docente consistirá en ayudar a cambiarlas. Por ejemplo:
enfrentando a los alumnos con sus propias ideas o saberes.
Presentando el nuevo conocimiento en situaciones y contextos próximos a la realidad de los alumnos.
El sustituir viejas ideas por conocimientos cientÃficos más organizados se conoce con el nombre de cambio conceptual. El cambio conceptual, en tanto meta final de la comprensión, será un objetivo a largo plazo y no el producto de una unidad didáctica concreta.
Como los conocimientos adquiridos son organizadores que permiten interpretar los nuevos contenidos, el docente debe indagar los saberes previos de los alumnos y promover un cambio conceptual si resultaran cientÃficamente incorrectos.
Las técnicas de indagación de los saberes previos sirven tanto para el diagnóstico del docente como para que los chicos participen activamente en el enriquecimiento de su bagaje cognoscitivo.
Algunas puntas para la tarea en el aula
Los saberes previos en la adquisición de nuevos conceptos
Una secuencia didáctica para el aprendizaje de conceptos organizada con actividades de exposición –ya sea mediante las explicaciones del docente o frente a un texto escrito– deberÃa constar de tres fases:
Introducción para activar los conocimientos previos de los alumnos que funcionarÃan de organizadores previos y servirÃa de puente cognitivo con la nueva información contenida en la exposición. Dicho de otro modo, estos conocimientos previos servirÃan de anclaje para las actividades posteriores. Por ejemplo: observar imágenes, clasificar fotografÃas de acuerdo con criterios propuestos por los alumnos, escribir una definición, dar ejemplos, responder preguntas, etcétera.
Presentación del material de aprendizaje que puede adoptar diversos formatos: textos, explicaciones del docente, conferencias, etcétera. Lo importante es que los materiales se encuentren bien organizados y esta organización sea explÃcita. Por ejemplo: trabajar con el libro de texto, leer artÃculos de carácter cientÃfico, ver un video, etcétera.
Consolidación mediante la relación explÃcita entre las ideas previas que han sido activadas y la organización conceptual de los materiales. Algunas actividades posibles pueden ser: comparar, ejemplificar, buscar analogÃas, relacionar, aplicar, etc., que pueden realizarse de manera individual, en pequeños grupos o en grupo total.
¿Qué podemos hacer para conocer los saberes previos de nuestros alumnos?
Es indudable que, para el docente, es necesario conocer los saberes previos que han construido los chicos, sean éstos correctos o no, porque es a partir de ellos que se elaborarán los nuevos conceptos. DifÃcilmente podrán comprender la expresión corrientes colonizadoras si no han comprendido anteriormente el concepto de colonización. Desde esta perspectiva, se plantea la necesidad de conocer qué saben, conocen o creen nuestros alumnos acerca de conceptos que se vinculan con otros nuevos que serán objeto de enseñanza.
Existen varias técnicas para indagar los conocimientos previos como:
Responder cuestionarios abiertos, cerrados o de opción múltiple.
Resolver situaciones problema que consistan en sucesos frente a los cuales los alumnos deban realizar anticipaciones o predicciones. Por ejemplo: ¿Por qué pueden volar los aviones?, ¿por qué hay paÃses pobres y paÃses ricos?
Diseñar mapas conceptuales.
Confeccionar diagramas, dibujos, infografÃas.
Realizar una lluvia de ideas.
Trabajar en pequeños grupos de discusión.
Preparar maquetas.
Otros.
La tarea del docente en este tipo de propuesta implica una concepción dinámica de la enseñanza, dirigida a sujetos activos y capaces de participar efectivamente en la adquisición significativa de nuevos contenidos.
Es importante señalar que las técnicas no sólo sirven de diagnóstico, sino que dan lugar a que los alumnos activen sus saberes previos.
Estas técnicas pueden ser de utilidad para el docente pero también para los chicos
en la medida en que –según sus posibilidades madurativas- pueden tomar conciencia de sus ideas implÃcitas, justificar sus creencias, reflexionar sobre ellas, enfrentarse a sus propias contradicciones y compartir otras informaciones u otros puntos de vista.
Desde esta perspectiva, las propuestas de enseñanza que se desarrollen en el aula, suponen una concepción de alumno activo, pensante, y cognitivamente capaz de comprender qué está aprendiendo.
Para terminar
Para enseñar conceptos es necesario partir de los conocimientos previos de los alumnos diseñando situaciones en las que estos saberes se activen.
Es preciso enfrentar a los alumnos con sus propias ideas – explÃcitas o implÃcitas– para reflexionar sobre ellas y confrontarlas con las de los demás.
Las ideas de los alumnos, aunque “erróneas”, no constituyen obstáculos sino vehÃculos a partir de los cuales se edificarán los nuevos conceptos.
El aprendizaje de conceptos es un proceso gradual que requiere de un cambio paulatino de unas estructuras por otras, de concepciones implÃcitas por otras explÃcitas más avanzadas.
2006-11-10 13:06:52
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answer #8
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answered by Fernanda 6
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depende, sin saber del que la hace, sin saber del que la lee, o sin saber histórico (es decir sin que nadie en toda la historia de la humanidad la haya podido responder)?... en cualquiera de los tres casos yo diría que si, si hay y varias preguntas sin saber previo, si el ser humano supiera todo lo que necesita saber, ya estaríamos en otro plano.
saludos!
2006-11-10 13:06:42
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answer #10
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answered by Fytzia 3
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