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obviamente de la biblia, pero quiero saber exactamente de donde viene, o quienes decian aleluya, que significa y........

2006-11-03 10:41:30 · 21 respuestas · pregunta de Enbiei 3 en Sociedad y cultura Religión y espiritualidad

21 respuestas

aleluya aleluyaaaaaaa
los judios o los judaicos, es una expresión judaica que denota alegría ante un evento sacro, los musulmanes la dicen constantemente, los católicos o cristianos tambien la dicen
el judaísmo el la base donde se nace, o se inicia, el cristianismo y el judaismo
recuerda que es ebreo toda la idea religiosa que simon luego petrus llevó a roma

2006-11-03 10:43:00 · answer #1 · answered by Anonymous · 1 0

2+

2006-11-07 01:48:20 · answer #2 · answered by Isidro L 2 · 0 0

Al sentir un orgasmo de tanto jadeo al fin haberlo logrado.

2006-11-06 14:39:56 · answer #3 · answered by ©â??aκsÑ?â? 5 · 0 0

Es una voz latina que significa "Alegría". El diccionario de la Real Academia Española, dice:
aleluya.
(Del lat. bíblico halleluia, y este del hebr. hallĕlū yăh, alabad a Dios).
1. interj. U. por la Iglesia en demostración de júbilo, especialmente en tiempo de Pascua. U. t. c. s. amb. Cantar la aleluya, o el aleluya
2. interj. U. para demostrar júbilo.
3. m. p. us. Tiempo de Pascua.
4. f. Pareado de versos octosílabos, generalmente de carácter popular o vulgar.
5. f. Planta perenne de la familia de las Oxalidáceas, con la raíz dentada y encarnada, escapo con una sola flor y hojas de tres en rama, en forma de corazón al revés, que florece en verano. Es comestible, tiene gusto ácido y se saca de ella la sal de acederas.
6. f. Planta de la familia de las Malváceas, de hojas hendidas, de tres lóbulos, y de sabor ácido. La usan en Cuba en salsas, dulces, refrescos, etc., y también contra las diarreas y fiebres.
7. f. Noticia que alegra.
8. f. Cada una de las estampas, con la palabra aleluya escrita en ellas, que, al entonar el Sábado Santo el celebrante la aleluya, se arrojaban al pueblo.
9. f. Cada una de las estampas de asunto piadoso que se arrojan al pasar las procesiones.
10. f. Cada una de las estampas que, formando serie, contiene un pliego de papel, con la explicación del asunto, generalmente en versos pareados.
11. f. Dulce de leche en forma de tortita, con la palabra aleluya realzada encima, que solían regalar las monjas a los devotos en la Pascua de Resurrección.
12. f. coloq. Versos prosaicos y de puro sonsonete.
13. f. coloq. En algunas locuciones, alegría (ǁ sentimiento grato). Hoy es día de aleluya
14. f. coloq. p. us. Pintura despreciable.
15. f. coloq. p. us. Persona o animal de extremada flacura.
16. com. coloq. Hond. Persona que profesa y practica alguna rama cristiana del protestantismo.

2006-11-04 15:31:36 · answer #4 · answered by Hubert 4 · 0 0

Según se, es una aclamacion que utilizaba el Pueblo de Dios para invitar a aclamar a Dios. el Sacerdote gritaba Alelu invitando a acalamar a Dios y el pueblo contestaba Yahveh es Dios....recordemos que el nombre de Dios se escribia como YHVH de agi que luego se le nombra Yahveh o Jehova......
Dios los bendice

2006-11-03 19:13:03 · answer #5 · answered by Anonymous · 0 0

La alegría del tiempo pascual



Vincent Ryan



La característica más destacada de este tiempo litúrgico es la alegría. La música, el canto, las vestiduras, las lecturas y otros textos, todo en él está orientado a expresar los sentimientos de júbilo. Tal exuberancia encuentra su punto culminante en la aclamación "Aleluya", que se oye repetir constantemente. En la noche de pascua, el sacerdote o el diácono la entona tres veces, y el pueblo la repite. Es el heraldo de la buena nueva de la resurrección.

"Aleluya" es una palabra de origen hebreo, que significa sencillamente "alabanza a Dios". Es una aclamación que la Iglesia ha heredado del Antiguo Testamento y, por tanta constituye un nexo de unión con la liturgia del templo y la sinagoga. Es difícil captar con precisión su significado en una traducción, puesto que, más que un pensamiento, expresa un sentimiento religioso, evoca una atmósfera particular de alabanza y gozo. Lo ideal sería que el Aleluya se cantara.

En la tradición occidental se ha perdido bastante la emoción del Aleluya pascual. En las celebraciones de las iglesias ortodoxas, tanto la griega como la rusa, se vive mucho más el gozo espontáneo. Algo parecido se encuentra, sin embargo, en las vibrantes congregaciones de Taizé con motivo de la pascua, de pentecostés o de un "fin de semana pascual". Nuestro pueblo ha de ser conducido a un mayor aprecio de aclamaciones como el aleluya; ésta debe llegar a ser una expresión genuina de gozo en la asamblea litúrgica.

Lo cierto es que el aleluya es la palabra clave en la liturgia pascual y expresa perfectamente la profunda alegría de este tiempo. Por eso no sorprende que los padres de la Iglesia no sólo se refiriesen al aleluya en su predicación, sino que, además, gustaran de exponerlo en sus homilías de pascua. Es característico especialmente en san Agustín, que solía repetirlo una y otra vez en sus sermones. He aquí un ejemplo:

El aleluya se dice durante estos cincuenta días. Porque aleluya significa alabanza de Dios; por tanto, para nosotros, que estamos trabajando, significa llegar a nuestro descanso. Porque cuando alcancemos nuestro descanso después de este período de trabajo, nuestra única ocupación será alabar a Dios, nuestras acciones serán un aleluya. Aleluya será nuestro alimento, aleluya será nuestra bebida, aleluya será nuestra apacible actividad, aleluya será nuestro gozo completo 1.

En el oficio de lecturas para el tiempo de pascua encontramos dos ejemplos más de este tipo de catequesis. Uno se titula "Cantemos al Señor el cántico del amor", y el otro "El aleluya pascual" 2. Aquí sólo podemos hacer referencia a ellos y recomendarlos a los lectores.



Una pregustación de la gloria eterna.

San Agustín considera el Aleluya como una anticipación de la liturgia celestial; toca él una nota escatológica. Es una consideración muy típica en los padres, y nos introduce en un aspecto importante de la alegría pascual. El gozo del tiempo pascual es anticipación del gozo del reino de Dios. Es un tema constante en Agustín, el cual hace notar: "Esos días santos que se celebran después de la resurrección del Señor significan la vida que vendrá después de nuestra resurrección" 3. San Atanasio, en sus cartas festales, desarrolla este mismo tema:

Cuando alboree y amanezca sobre nosotros el primer día de la santa semana, festejemos el día santo de pentecostés. Celebremos el primer día de la gran semana como símbolo del mundo futuro, del cual recibimos aquí garantía de que tendremos vida interminable en adelante. Así pues, una vez que salgamos de aquí, tendremos una fiesta perfecta con Cristo 4.

Por tanto, este gozo de pascua es signo y pregustación de felicidad y plenitud futura. No es todavía la realidad plena, sino solamente la primera entrega de aquello que "ni ojo vio ni oído oyó". La fuente interior de este gozo es el Espíritu Santo. Donde hay gozo verdadero está actuando el Espíritu Santo. En los Hechos, por ejemplo, leemos que "los discípulos estaban llenos de gozo y del Espíritu Santo" (13,52). Es como si el uno fuese una necesidad concomitante del otro.

Si la alegría pascual es pregustación y signo de la que vendrá, lo mismo sucede con nuestra posesión del Espíritu Santo. Lo hemos recibido verdaderamente; él ha entrado, en efecto, en nuestras vidas. Su presencia es prenda de la bienaventuranza que se nos ha prometido. San Pablo gusta describir esta presencia del Espíritu como prenda o garantía. El es "prenda de nuestra herencia para el rescate de la posesión que él se adquirió para alabanza de su gloria" (Ef 1,14). También se refiere a él el Apóstol como primicias: "Nosotros tenemos las primicias del Espíritu" (Rom 8,23).

Por eso en las oraciones del misal pedimos a menudo a Dios que nos conduzca a ese gozo ilimitado y eterno. Como primer ejemplo cito la oración del miércoles de la octava de pascua:

Oh Dios, que todos los años nos alegras con la solemnidad de la resurrección del Señor, concédenos, a través de la celebración de estas fiestas, llegar un día a la alegría eterna.

Cristo es el buen pastor que conduce su rebaño a los pastos eternos; por eso pedimos al Padre: "Concédenos la alegría del reino de tus elegidos, para que así el débil rebaño de tu Hijo tenga parte en la admirable victoria de su pastor" 5.

El gozo pascual se experimenta con particular intensidad en la celebración eucarística, tanto en la ofrenda de los dones como en la comunión. Así se expresa la oración sobre las ofrendas para el domingo de pascua:

"Rebosantes de gozo pascual, celebramos, Señor, estos sacramentos en los que tan maravillosamente ha renacido y se alimenta tu Iglesia".

Semejante a ésta es la del lunes de la segunda semana:

"Recibe, Señor, las ofrendas de tu Iglesia, exultante de gozo, y pues en la resurrección de tu Hijo nos diste motivo de tanta alegría, concédenos participar también del gozo eterno".

Tenemos ahora las primeras flores; ¡esperamos los frutos maduros! El tema constante es: del gozo presente a la plenitud futura.

"Recibe, Señor, en tu bondad las ofrendas de tu pueblo, para que, renovados por la fe y el bautismo, consigamos la eterna bienaventuranza 6.

Y también:

"Concede a estos hijos tuyos que han recibido la gracia incomparable del bautismo poder gozar un día de la felicidad eterna 7.

La eucaristía nos conduce a la meta, que es la "gloria de la resurrección". Esto refleja la enseñanza de Cristo. "El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna y yo lo resucitaré en el último día" (Jn 6,54). La liturgia romana refleja la persuasión del estrecho vínculo que existe entre la comunión sacramental y la resurrección de los cuerpos, como se desprende de las siguientes oraciones:

Que la participación en los sacramentos de nuestra redención (redemptionis nostrae sacrosanta commercia) nos sostenga durante la vida presente y nos dé las alegrías eternas 8.

Concédenos, Señor, que la celebración de estos misterios pascuales nos llene siempre de alegría, y que la actualización repetida de nuestra redención sea para nosotros fuente de gozo incesante 9.

Ya poseemos la vida eterna, por lo menos de manera parcial o inicial. De ello nos alegramos, aunque nuestro gozo sea limitado de varias maneras por nuestra condición humana; por dolores, como en la pérdida de los seres queridos; pruebas interiores y exteriores, y por nuestra lucha constante contra el pecado. Esto nos lleva a hablar de la cruz.



La conmemoración de la cruz.

Cuando Jesús se apareció a sus discípulos la tarde del primer domingo de pascua, les "mostró las manos y el costado" (Jn 20,20). Les mostró sus llagas, que permanecían en su cuerpo glorificado. La pasión y la cruz no se olvidan después de la resurrección.

Tampoco borra la Iglesia la memoria del Calvario durante el tiempo de pascua. La cruz se conmemora incluso en la liturgia. En el Oficio de lecturas tenemos algunas hermosas homilías patrísticas que tratan de la cruz y la pasión. El viernes de la segunda semana de pascua, san Teodoro Estudita nos dice:

Este madero, en el que el Señor, cual valiente luchador en el combate, fue herido en sus divinas manos, pies y costado, curó las huellas del pecado y las heridas que el pernicioso dragón había infligido a nuestra naturaleza.

El signo de la cruz no se pierde de vista en el tiempo de pascua. Sigue presente, aunque transfigurado por la luz de la gloria pascual. Se conmemora particularmente en los viernes de pascua, pero hay alusiones a él aquí y allá también los demás días. Nos referimos a otras dos citas de los sermones sobre la pasión que se encuentran en la Liturgia de las horas. Uno de ellos pertenece a san Efrén, y su título es "La cruz de Cristo y la salvación del género humano". Está propuesto para el viernes de la tercera semana; el otro es de san Cirilo de Alejandría, y se titula "Cristo entregó su cuerpo por la salvación de todos"; se encuentra en el oficio del sábado de la tercera semana. La intención de estos padres no es suscitar sentimientos de compasión, sino más bien fortalecer la fe en el poder vivificante que emana de la cruz.

La cruz no está ausente de la celebración de pascua; como tampoco está nunca ausente de nuestras vidas. No hay una época cerrada para el sufrimiento, ni existe tiempo en que no se nos exhorte a llevar nuestra cruz. Pero no debemos desanimarnos. El gozo no sólo puede coexistir con el sufrimiento, sino que incluso tiene cierta afinidad secreta con él. Las vidas de los santos son testimonios vivos de esta afirmación. Ellos experimentaban gran alegría y al mismo tiempo gran sufrimiento, porque conformaban sus vidas con la cruz de Cristo. El papa Pablo VI, en su exhortación apostólica Gaudete in Domino, dedica una sección entera a la "Alegría en el corazón de los santos". En ella muestra cómo los santos dan testimonio de que "el combate por el reino incluye necesariamente el paso a través de una pasión de amor". Todos los seguidores de Cristo sostienen el mismo principio: "Por la cruz a la luz (per crucem ad lucem), y de este mundo al Padre, en el soplo vivificador del Espíritu" 10.
.................
1. Del sermón 252, en The Fathers of the Church, vol. 38 (New York 1959) 332.
2 Martes de la tercera semana, 607, y sábado de la quinta, 736.
3 Sermón 243, Fathers of the Church, vol. 38, 278.
4. Carta primera en la edición de A librery of the Fathers. Oxford 1864, 12-13, en la segunda parte de este volumen. N.B.: El término pentecostés significa para san Atanasio todo el tiempo pascual.
5. Oración colecta del cuarto domingo de pascua.
6 Oración sobre las ofrendas, lunes de la octava.
7. Oración poscomunión, martes de la octava.
8. Oración poscomunión, jueves de la octava.
9. Oración sobre las ofrendas, sábado de la octava.
10. Cf Saints in Season, editado por A. Flannery, OP, Dominican Publications, Dublin 1976, 210.

2006-11-03 19:05:03 · answer #6 · answered by Maria Susana B 3 · 0 0

ALELUYA (Del hebreo "allelu Yah": alabad a Yavé)
Versos prosaicos y repetitivos de escaso valor de significado, sólo de alabanza a Dios..
A continuación una definición de Internet sobre un significado más completo de esta expresión hebrea...

2006-11-03 18:57:15 · answer #7 · answered by Isa 4 · 0 0

la palabra aleluya (de origen hebraico) quiere decir"alabad con júbilo a Dios".Se dice 'aleluya' como expresión de júbilo y alabanza a Dios.
Esta palabra, aleluya, viene del Hebreo, y es mas correcta en la forma "aleluYAH," el significado es "alabamos a Yah."Todos los expertos de la Biblia, los pastores, y los estudiantes en seminarios, reconosen que "Yahweh" es el Nombre correcto del Padre Celestial. La forma corta y poetica de su Nombre es "Yah."

2006-11-03 18:54:01 · answer #8 · answered by Clara 2 · 0 0

Aleluya
La palabra aleluya, (del hebreo הַלְּלוּיָהּ, hallelu yah, alabad a Dios, según el Diccionario de la lengua de la RAE), es una de las más antiguas de la fe monoteísta y se emplea en la tradición judeocristiana en demostración de júbilo o para dar gracias. Su traducción literal es ¡Alabad al señor, [todos]! Para la mayoría de los cristianos, esta es la palabra más alegre para alabar al Señor, y no una obligación.
Otras transliteraciones son Halleluyah (compuesto de hallelu y yah), Hallelujah (escrito incorrectamente con j, o Alleluia. Su forma abreviada es Yah (de YaHWeH o JeHoVaH) y también se le llama el Tetragrammaton ("palabra de cuatro letras").
En el catolicismo cantar Aleluya es celebrar la resurrección de Cristo y alabar a Dios por la obra de Jesús.

2006-11-03 18:52:00 · answer #9 · answered by jesus 7 · 0 0

De Jerusalén;¡Aleluya ! es una frase de las alabanzas a Dios.: significa "¡ASÍ SEA ¡ AMEN.

2006-11-03 18:51:53 · answer #10 · answered by nena_linda 5 · 0 0

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