bueno tu ya diste las definiciones de ambas, entonces no se a que se deba tu pregunta, en cuanto a que para estar en la iglesia de Jesús habia que poner todos tus bienes, es irreal, el pecado del que hablas se usa para ilustrar a los que argumentan poner todo pero que se guardan algo, ese fue su pecado, el mentir y con esto pretender engañar a Dios, no el guardarse bienes que en nada benefician a Dios, ellos supuestamente vendieron su casa y quisieron que la comunidad los alojara, argumentando que ellos ya habian entregado todo el dinero de la venta, sin embargo habia cristianos que conservaban sus propiedades y no por eso fueron amonestados.
2006-10-31 11:05:55
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answer #4
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answered by Anonymous
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Estoy de acuerdo con PELUCHIN...
Reforma es un cambio profundo y generalizado en los usos y costumbres de la iglesia cristiana.
Restauracion (Iglesias) surgen a consecuencia del Legalismo establecido por Iglesias que establecen sus reglas y sus dogmas literalmente. (Indicando que todo es pecado) Tomando y senalando el pecado por lo fisico y no lo espiritual...
La Santidad de Dios y la Iglesia
(Hechos:1-16; 1ª Corintios 11:17-34)
La historia de AnanÃas y Safira, es familiar para los cristianos. En los primeros dÃas de la iglesia, existÃa una gran preocupación por los pobres. Cuando surgÃa la necesidad, los santos vendÃan algunas de sus posesiones y llevaban el producto de estas ventas a los pies de los apóstoles, para su distribución (ver Hechos 2:44-45; 4:34-37). AnanÃas y Safira asà lo hicieron; pero con un corazón dividido y en una forma engañosa. Vendieron una parte de su propiedad; pero se dejaron para ellos una parte del producto de la venta. Dieron una parte del dinero a los apóstoles, como si fuera todo lo que habÃan percibido de aquella venta. Cuando su pecado quedó expuesto frente a Pedro, éste los confrontó y ambos murieron. Gran temor sobrevino en toda la iglesia, sin mencionar el que tuvo el resto de la comunidad.
Siempre me he concentrado en el hecho que esta pareja mintió, lo que realmente hicieron. Pero en el contexto del estudio de la santidad de Dios, parecieran más importantes dos detalles sobre los cuales ya habÃa reflexionado antes. Primero, ambos mintieron al EspÃritu Santo. Su engaño fue una ofensa a la santidad de Dios. También fue un acto que pudiera haber tenido sobre la iglesia, un efecto de emulación (ver también 1ª Corintios 5:6-7). Del mismo modo que la generosidad de Bernabé estimuló a otros a dar de la misma forma, la acción engañosa y de corazón dividido de AnanÃas y su mujer, podrÃa haber afectado adversamente a otros en la iglesia, animándoles a hacer lo mismo. Recordemos que ahora es la iglesia el lugar donde mora Dios en la tierra. Dios es santo y por lo tanto Su iglesia debe ser santa también. El pecado de AnanÃas y Safira fue una afrenta a la santidad de Dios y a Su iglesia.
Aún más, Lucas incluye un comentario sobre el efecto que la muerte de AnanÃas y Safira tuvo sobre la iglesia y la comunidad. Un gran temor sobrevino sobre toda la iglesia y sobre todos quienes oyeron de esto (Hechos 5:11, 13). Los no creyentes temerosos, prefirieron mantenerse alejados de la iglesia y los santos fueron motivados a mantener distancia del mundo (en lo que se refiere a sus pecados).
El temor es la respuesta de los hombres a la santidad de Dios. AsÃ, el pecado de AnanÃas y de su mujer, fue un pecado de irreverencia, un pecado en contra de la santidad de Dios. Pero el arrebato de ira de la santidad de Dios que se manifestó en la muerte de esta pareja, también originó temor en aquellos que habÃan oÃdo de este incidente.
En 1ª Corintios 11, encontramos un texto relacionado, donde Pablo reprende y amonesta a la iglesia por la mala conducta que algunos de ellos manifestaron durante la Cena del Señor. La iglesia recordaba al Señor, con una comunión como parte de una comida, tal como vemos la Ãltima Cena descrita en los Evangelios. Algunos tenÃan la posibilidad de llevar mucha comida y vino a esta cena, mientras que otros podÃan llevar muy poco o nada. Algunos podÃan darse el lujo de llegar muy temprano y otros tenÃan que llegar más tarde. Aquellos que traÃan mucho y que llegaban temprano, no deseaban esperar o compartir con el resto, por lo que comÃan y bebÃan en exceso. En el proceso, algunos se emborrachaban y hacÃan desorden, por lo que la conmemoración de la muerte del Señor era vergonzosa, muy parecida a las celebraciones paganas de sus vecinos en Corinto.
Pablo reprendió a los corintios, no debido a que tomaban la comunión en un estado indigno, sino por hacerlo en una forma que no correspondÃa. “Indigno”, tal como aparece en la versión King James, en la versión NASB, se señala “en una forma indigna”. Ambas versiones son una representación precisa del adverbio empleado en el texto original —no es un adjetivo. La mayor parte de los cristianos, supone que Pablo reprende a los corintios por compartir el pan y el vino como aquellos que son ‘indignos’ (adjetivo), más que considerar que está prohibiéndoles compartir el pan y el vino de una forma impropia —’indigna’ (un adverbio). Nadie es digno del cuerpo y de la sangre de nuestro Señor; pero podemos recordarlo de una forma que sea digna y adecuada.
Más adelante, Pablo dice que cuando los corintios comieron el pan y bebieron de la copa “en forma indigna”, fueron culpables tanto del cuerpo como de la sangre del Señor (1ª Corintios 11:27) y al hacerlo, no “disciernen el cuerpo del Señor” (versÃculo 29). Continúa explicando que esta clase de conducta en la mesa del Señor, ha causado enfermedades en unos y muerte en otros (versÃculo 30).
De acuerdo a como yo entiendo las palabras de Pablo, el pecado de los corintios en la mesa del Señor, fue irreverencia. El cuerpo de nuestro Señor —Su cuerpo fÃsico y Su sangre— son santos. Ãl hizo un sacrificio sin tener pecado al morir por nosotros. El cuerpo de nuestro Señor, también es la iglesia por lo que ella también es santa. Al comportarse la iglesia en forma indebida, con exceso de vino y desordenadamente en la mesa del Señor, demostró tener un descuido por el cuerpo fÃsico y espiritual de Cristo; es decir, la iglesia. La irreverencia ofendió a Dios en tal manera, que Ãl provocó enfermedades en algunos y muerte en otros. La irreverencia en la adoración es tanto un fracaso en la comprensión de la santidad de Dios como una afrenta a Su santidad. La irreverencia es un pecado de gran magnitud, con consecuencias espantosas. La santidad de Dios requiere que tomemos la adoración muy en serio y que no participemos de ella con frivolidad. Esto no significa que nuestra adoración no se haga con gozo, solemne o sombrÃa. Simplemente significa que debemos observar seriamente la presencia de Dios y ser muy cautos en no ofender Su presencia con nuestra irreverencia.
2006-10-31 03:53:40
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answer #5
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answered by Nia Mia 5
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