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Declaraciones de Marcos
Chiapas, (EFE).— El líder zapatista, el subcomandante Marcos, acusó ayer a la líder sindical Elba Esther Gordillo de haber instrumentado un “fraude electoral” el pasado 2 de julio para impedir que Andrés Manuel López Obrador fuera declarado ganador.
En el tercer comunicado emitido por Marcos en los últimos días para ofrecer su opinión acerca de los procesos políticos recientes en México, dijo que la información proviene de personas que fueron testigos “desde dentro”.
El líder del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) aseguró que el izquierdista López Obrador obtuvo una ventaja de 1.5 millones de votos en las elecciones presidenciales del 2 de julio, lo que obligó al presidente Vicente Fox a instrumentar “un plan B” que consistió en alterar las actas por medio de personas infiltradas en la estructura electoral por el sindicato de maestros.
El tribunal electoral de México descartó tras analizar las mesas impugnadas que haya habido un fraude el pasado 2 de julio y convalidó que el ganador fue Felipe Calderón, del Partido de Acción Nacional, con una ventaja de 233,381 votos sobre López Obrador.
Según Marcos, Gordillo le propuso a Calderón y a Fox revertir el resultado electoral. “Denme unas horas y yo me encargo”, dijo.
“Un nuevo recuento de votos revelaría la trampa de forma nítida y transparente: en un buen número de casillas, lo que aparece en las actas no corresponde a los votos que hay en las urnas”, aseguró el dirigente zapatista.
Marcos aseguró que aunque López Obrador no representaba una opción de riesgo para el sistema capitalista y contra la política neoliberal, el grupo político en el poder maniobró debido al interés para privatizar Pemex y la industria eléctrica.
Ello “dejará una millonada para los que lo autoricen”, ya que la lucha por la presidencia es una lucha “por un negocio muy lucrativo”, indicó.
Además, Marcos señaló que el segundo negocio lucrativo para el poder es la “administración del narcotráfico” que consiste en favorecer a uno de los cárteles.
“En la 'era' Fox, se puede decir que el cartel del Chapo Guzmán fue el consentido del sexenio. Toda la estructura del Estado: Ejército, policía federal, sistema judicial (con jueces y directores de penales incluidos) fue puesta al servicio de este cartel en su lucha contra los otros”, afirmó el subcomandante.
Agregó que los gobiernos del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el de López Obrador, en los estados de Michoacán y Guerrero también han entrado en negociaciones con este cártel
Finalmente,
Marcos señaló que el actual sistema y de los partidos políticos se encuentran en una crisis profunda y afirmó que actualmente no hay posibilidad de crear un partido auténtico que entre a la lucha política con independencia y autonomía y que “la vía electoral es ahora una ruta cerrada para la lucha honesta”
Desplegado de AMLO 15/08/2006
I.- INFORMACIÓN DEL RECUENTO Y SUS RESULTADOS.
1.- La diligencia ordenada y practicada por el Tribunal, tenía como objetivo central revisar si el hecho de que hubiera votos de más y de menos en las casillas denunciadas por nuestra Coalición, era producto de un error aritmético subsanable con el recuento o de irregularidades graves no subsanables con el mismo.
Se prueba que la mayor alteración de la voluntad ciudadana se realizó con un operativo de defraudación electoral, mediante el cual se introdujeron y sustrajeron ilegalmente votos de las urnas.
En 3,873 de las casillas, es decir, en el 33 por ciento, fueron introducidos ilegalmente (se taquearon) 58 mil 056 votos, es decir un promedio de 3 votos por casilla en el total de la recontadas. Por sí sola, esta defraudación modifica completamente los resultados electorales.
En 3,659 casillas, es decir en el 31 por ciento, fueron retirados ilegalmente (se robaron) 61 mil 688 votos. Es decir, un promedio de 3.2 votos por casilla en el total de las recontadas. Por sí sola, esta defraudación modifica completamente los resultados electorales.
Es decir, el número total de casillas en donde ilegalmente se introdujeron y sustrajeron votos, es 7 mil 532, el 65% de las casillas recontadas, y significan 119 mil 744 votos alterados.
Esta situación, confirmada y cuantificada en el recuento realizado por el Tribunal Electoral, no es reparable ni con el recuento mismo, pues el Tribunal no puede contar votos robados, ni identificar los votos introducidos en la urna ilegalmente, de aquellos que genuinamente depositaron los ciudadanos, pues se trata de las mismas boletas que imprimió el IFE y que modifican, evidente y ampliamente, el resultado de la elección. Por lo tanto, si actúa con imparcialidad y limpia la elección, estas casillas en que, con el recuento se ha acreditado plenamente las graves e irreparables irregularidades que ponen en duda la certeza de la votación, deberán ser anuladas por el Tribunal Electoral, ya que son determinantes para el resultado de la votación.
En la Ley General del Sistema de Medios de Impugnación en Materia Electoral se establece, en su artículo 75, las causales de nulidad de casillas: “k) Existir irregularidades graves, plenamente acreditadas y no reparables durante la jornada electoral o en las actas de escrutinio y cómputo que, en forma evidente, pongan en duda la certeza de la votación y sean determinantes para el resultado de la misma.”
2.- Se prueba, como un efecto secundario de la indagatoria, que hubo falsificación dolosa de las actas de escrutinio, al asentar en miles de ellas un número de votos que claramente no correspondían a la voluntad de los electores. Si bien hubo errores humanos en el escrutinio, no son estos los que modifican el resultado.
Hubo variación en los datos en el 81% de las actas de escrutinio recontadas. La votación obtenida por López Obrador prácticamente no tiene variación, pues sólo perdería 43 votos en el total de las actas recontadas. Por el contrario, resulta evidente que existió una falsificación masiva y deliberada para beneficiar a Felipe Calderón, pues en el papel se le habían registrado a su favor 13 mil 335 votos que nunca existieron en 4,969 casillas, en el 43%, dando un promedio de 1.14 votos por casilla recontada. Es decir, que lo que el PAN ha llamado “errores humanos comprensibles” beneficiaron 5000% veces más a Felipe Calderón que a López Obrador (No se incluyen los votos reservados por el Tribunal).
3. Se prueba que los paquetes electorales han sido abiertos y violentados después del Cómputo Distrital. En prácticamente todos los distritos donde se realizó el recuento se encontraron decenas de miles de paquetes sin sellar y centenares de miles de los sobres que contienen la votación electoral, con sellos violados y sin firmas e incluso paquetes electorales desaparecidos. Es decir, que tal como lo denunciamos, hubo manipulación ilegal de los paquetes, los sobres y las boletas electorales antes, durante y después del Cómputo Distrital.
4.- Se prueba que el Consejo General del IFE y los Consejos Distritales actuaron con dolo, al ser omisos en el cumplimiento de sus obligaciones legales y al abusar de su autoridad. Esto es evidente y explícito en la resolución judicial del Tribunal Electoral que ordena un nuevo cómputo parcial. Los funcionarios del IFE impidieron deliberadamente que se cumpliera con la Constitución Política de la República y con el Código Federal de Procedimientos Electorales. Impidieron con premeditación, alevosía y ventaja la aplicación de la ley para encubrir las evidentes y señaladas alteraciones al proceso electoral.
II.- IMPACTO EN LA ELECCIÓN PRESIDENCIAL DEL FRAUDE ELECTORAL YA COMPROBADO EN EL RECUENTO REALIZADO POR EL TRIBUNAL ELECTORAL.
Sostenemos que el recuento parcial realizado por el Tribunal Electoral es insuficiente para garantizar el principio de certeza en la elección presidencial consagrado en el Artículo 41 de nuestra Constitución. Sin embargo, lo consideramos un extraordinario botón de muestra de lo que pasó en la elección a nivel nacional. Los resultados de las diligencias judiciales practicadas, proyectados a nivel nacional, muestran la magnitud del fraude:
Felipe Calderón obtuvo a nivel nacional, producto de la introducción fraudulenta de 651,538 votos, en las casillas instaladas, además de 149,653 votos por la falsificación de los resultados en las de actas de casilla. A López Obrador por el contrario, se le eliminaron cerca de 692,299 votos como resultado de los votos extraídos ilegalmente.
Esto significa, que Andrés Manuel López Obrador ganó la elección del pasado 2 de julio con cerca de 1.5 millones de votos.
Podemos afirmar, contundentemente, con las pruebas en la mano, que la voluntad ciudadana expresada en las urnas pretende ser usurpada.
La demanda de la mayoría de pueblo de México, de contar voto por voto y casilla por casilla y limpiar la elección presidencial, no sólo es sensata, legal, posible y necesaria, sino que, además, cuenta ahora con un nuevo soporte legal producto de las pruebas plenas aportadas por el recuento del Tribunal Electoral.
2006-10-24 10:17:46
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answer #1
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answered by Anonymous
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