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Por ahi me criticaron despues de hacer un chascarrillo en cuanto a la Biblia y dicen que no me rio del Koran por miedo.
No es miedo, es que simplemente el Koran no es tan popular en America como la Biblia. Creo que la mayoria de nosotros no sabemos ni de que se trata.
Hay alguien por ahi educado en estos menesteres?

2006-08-15 07:07:43 · 5 respuestas · pregunta de Lance 4 en Ciencias sociales Antropología

5 respuestas

El Coran es un texto sagrado del Islam alli se reune tadas las "revelaciones divinas" por ende contiene la palabra de Alá ( Dios) revelada al Profeta Mohamed(, quien sabia leer y escribir) durante su estancia en la Meca.Estas revelaciones hechas al profeta fueron dadas, en árabe, por el arcangel Gabriel y a su vez Mohamed fué transmitiendola a todos sus seguidores. Recien en el año 650, después de morir Mohamed, estas revelaciones fueron recopiladas y presentadas como se las conoce hoy: a traves del Coran (palabra que significa Reunir)
El Corán está dividido en 114 capítulos ( suras) y a su vez estos se dividen en versículos (ayat). Es una mezcla de prosa y poesía
alusiva a la vida misma y a la conducta del hombre con respecto a Dios ( Alá). Establece más allá de la narración de la historia del hombre y el Creador, pautas y normas para vivir en la fé.

2006-08-15 08:42:18 · answer #1 · answered by Anonymous · 2 1

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2016-07-11 00:01:24 · answer #2 · answered by brenda 3 · 0 0

El Corán (árabe القرآن [al-qurʼān], literalmente "la recitación"; también se le llama Al Qur'ān Al Karīm o El noble Corán; o bien, de forma transliterada, Quran, Koran y Alcorán) es el libro sagrado del Islam, que según los musulmanes contiene la palabra de Dios (Allāh, الله), revelada a Mahoma (Muhammad, محمد), quien recibió estas revelaciones por medio del ángel Gabriel (Yibrail o Yibril, جبريل). Durante la vida del profeta Mahoma, las revelaciones eran transmitidas oralmente o escritas en hojas de palmeras, trozos de cuero o huesos, etc. A la muerte del profeta, en 632, sus seguidores comenzaron a reunir estas revelaciones, que durante el Califato de Utman ibn Affan (عثمان بن عفان) tomaron la forma que hoy conocemos, 114 capítulos (azoras, سورة), cada uno dividido en versículos (aleyas, آيات).
El Corán toma muchos personajes que aparecen en los libros sagrados del judaísmo y el cristianismo (Torah y Biblia) y en la literatura devota (por ejemplo, los libros apócrifos), con muchas diferencias en detalle. Personajes bíblicos muy conocidos como Adán, Noé, Abraham, Moisés, Jesús de Nazaret y Juan Bautista aparecen mencionados como profetas islámicos.

Los musulmanes dicen del Corán que es la palabra "eterna e increada" de Dios; por ello su transmisión debería realizarse sin el menor cambio en la lengua originaria, el árabe clásico, lengua en consecuencia considerada sagrada a todos los efectos. El Corán ha sido traducido a muchos idiomas, principalmente pensando en aquellos creyentes cuyas lenguas no son árabes. Aún así en la liturgia se utiliza exclusivamente en árabe, ya que la traducción únicamente tiene valor didáctico, como glosa o instrumento para ayudar a entender el texto original. De hecho, una traducción del Corán ni siquiera se considera que sea un Corán.

Origen y desarrollo
Este tema ha generado mucha controversia porque los especialistas islámicos parten del presupuesto que el Corán es un texto incorrupto y divino, mientras que los especialistas laicos lo ven como un texto humano semejante a cualquier otro. Tales divergencias hacen que sea necesario conocer ambas versiones de la historia.

Según especialistas islámicos
Según la tradición, Mahoma no podía leer ni escribir sino que, simplemente, recitó lo que le era revelado para que sus compañeros lo escribieran y memorizaran. Los simpatizantes del Islam tienen por verdad que la redacción del texto coránico existente hoy corresponde puntualmente a lo que fue revelado a Mahoma, es decir, las palabras textuales de Dios entregadas a Mahoma por medio del arcángel Gabriel.

Los acompañantes de Mahoma, según las tradiciones musulmanas, empezaron a registrar las azoras de forma escrita antes de que su líder muriera en el año de 632; las copias de varias azoras escritas durante su vida se citan con frecuencia en las tradiciones. Por ejemplo, en la historia de la conversión de Umar ibn al-Jattab (momento en que Mahoma todavía estaba en La Meca), se dice que su hermana estaba leyendo un texto de la azora Ta-Ha. En Medina, se dice que alrededor de sesenta y cinco acompañantes actuaron como escribas para él en algún momento o en otro. El profeta los llamaba para que escribieran las revelaciones justo después de tenerlas.

Una tradición documenta que la primera recopilación completa del Corán fue hecha durante el mandato del primer califa, Abu Bakr as-Siddiq. Zayd ibn Thabit, que había sido uno de los secretarios de Mahoma, “reuniendo el Corán a partir de varias piezas de hueso y de los pechos (es decir, ‘los recuerdos’) de los hombres”. Esta recopilación fue conservada por Hafsa bint Umar, una de las viudas de Mahoma, y también por la hija de Umar, el segundo califa.

Durante el califato de Utman ibn Affan, hubo disputas relativas a la recitación del Corán. En respuesta, Utman decidió codificar, estandarizar y transcribir el texto. Se dice que Utman comisionó a un comité (que incluía a Zayd y varios miembros prominentes de Quraysh) para poder producir una copia estándar del texto.

Según algunas fuentes, esta recopilación se basó en el texto conservado por Hafsa. Otras versiones indican que Utman hizo esta recopilación de manera independiente y que el texto de Hafsa habría sido llevado adelante y que, al final, se encontró que los dos textos coincidían perfectamente. Sin embargo, otros documentos omiten por completo referencias a Hafsa.

Los eruditos musulmanes afirman que si el califa hubiera ordenado la recopilación del Corán, este nunca habría sido relegado al cuidado de una de las viudas del profeta. Posiblemente la historia haya sido inventada para aproximar en el tiempo la muerte del profeta y la recopilación del texto.

Cuando terminó el proceso de recopilación, entre los años 650 y 656, Utman envió copias del texto final a todos los rincones del imperio islámico y ordenó la destrucción de todas las copias que difirieran de la nueva versión.

Varios de los manuscritos, incluyendo el manuscrito de Samarkanda, son reivindicados como copias originales de las enviadas por Utman; no obstante, muchos especialistas, occidentales e islámicos, dudan que sobreviva algún manuscrito utmánico original.

En lo que respecta a las copias que fueron destruidas, las tradiciones islámicas aseguran que Abdallah Ibn Masud, Ubay Ibn Ka'b y Alí, el sobrino de Mahoma, habían preservado algunas versiones que diferían en algunos aspectos del texto utmánico que es considerado ahora por todos los musulmanes. Los especialistas musulmanes registran determinadas diferencias entre las versiones, las cuales consisten casi totalmente en variantes léxicas y ortográficas o diferentes conteos de versos. Se ha registrado que los tres (Ibn Masud, Ubay Ibn Ka'b y Alí) aceptaron el texto utmánico como la autoridad definitiva.

La versión de Utman se compuso según un viejo estilo de escritura árabe que dejaba por fuera casi todas las marcas vocálicas, por esta razón la escritura se puede interpretar y leer de varias formas. Este escrito utmánico básico se ha llamado rasma y, con algunas diferencias menores, es la base de varias tradiciones orales de recitación. Para fijar estas recitaciones y prevenir cualquier error, los escribanos y eruditos comenzaron a anotar las rasmas utmánicas con varias marcas diacríticas —puntos y demás— para indicar la forma en que las palabras debían ser pronunciadas. Se cree que este proceso de anotación comenzó alrededor del año 700, poco tiempo después de la compilación de Utman, y que terminó aproximadamente en el año 900. El texto del Corán más usado en la actualidad está basado en la tradición de recitación de los Hafs, tal y como fue aprobado por la Universidad Al-Azhar del Cairo, en 1922, (para más información relacionada con las tradiciones de recitación, refiérase a Recitación coránica, más adelante en este mismo artículo).
Según especialistas seglares
Aunque muchos eruditos concuerdan con varios de los aspectos señalados por las tradiciones islámicas relativas al Corán y sus orígenes, algunos especialistas escépticos aseguran que Mahoma mismo compuso los versos y las leyes que integran el texto y que se las atribuyó a Dios para darles legitimidad; agregan que sus seguidores memorizaron y escribieron sus revelaciones y que numerosas versiones de estas revelaciones circularon después de su muerte en el año 632; aseguran asimismo que Utman ordenó la recopilación y el ordenamiento de esta masa de material entre 650 y 656, lo cual también es descrito por los eruditos islámicos. Los eruditos occidentales señalan muchas características del Corán (sus repeticiones, su ordenamiento, la mezcla de estilos y géneros) como signos de un muy humano proceso de recopilación que nada tiene que ver con cosas divinas.

Estos eruditos escépticos explican las numerosas similitudes entre el Corán y las escrituras hebreas argumentando que Mahoma le enseñaba a sus seguidores lo que él pensaba que era historia universal, tal y como lo había escuchado de las bocas de judíos y cristianos que había encontrado en Arabia y durante sus viajes. Ciertos eruditos seglares también debaten la creencia islámica de que todo el Corán fue enviado por Dios a la humanidad. En este sentido, notan que en numerosos pasajes Dios es aludido directamente en tercera persona, o bien, cuando la voz narrativa jura por varios entes, incluyendo a Dios. Otros especialistas tienen aun menos deseos de atribuirle el Corán entero a Mahoma, arguyendo que no hay una verdadera prueba de que el texto haya sido compilado bajo el mandato de Utman, puesto que las más viejas copias conservadas del Corán completo datan de varios siglos después de Utman (la más vieja copia existente del texto completo es del siglo IX). Alegan que el Islam se formó lentamente, durante los siglos transcurridos tras las conquistas musulmanes y en la medida en que los conquistadores islámicos iban elaborando sus propias creencias en respuesta de los desafíos judío y cristiano. Una propuesta influyente en este punto de vista fue la del Dr. John Wansbrough, un académico inglés. Sin embargo, los escritos de Wansbrough estaban redactados en un estilo denso, complejo y casi hermético y ha tenido una gran influencia en los estudios islámicos a través de sus estudiantes, Michael Cook y Patricia Crone y no tanto por sus propios escritos. En 1977, Crone y Cook publicaron un libro llamado Hagarism, en el que se sostiene que:

"Básicamente, el Corán carece de una estructura central, frecuentemente es oscuro e inconsecuente tanto en lengua como en contenido; es superficial en su concatenación de materiales dispersos y muy dado a la repetición de pasajes enteros en versiones que presentan variantes. Partiendo de todo esto, se puede argumentar plausiblemente que el libro es el producto de la edición imperfecta y morosa de materiales provenientes de una pluralidad de tradiciones". (Patricia Crone y Michael Cook, Hagarism: The Making of the Islamic World, Cambridge, 1977, p. 18). (Traducción de Sergio Arroyo Molina)
Este libro fue extremadamente controvertido en su tiempo, pues desafiaba no solo la ortodoxia musulmana, sino las actitudes prevalecientes entre los mismos islamistas seglares. Wansbrough fue criticado por su interpretación del Corán y por la mala interpretación de las palabras originales en árabe. Crone y Cook se han desdicho de algunos de sus argumentos extremos en el sentido de que el Corán evolucionó a lo largo de varios siglos, pero todavía sostienen que la tradición de lectura sunita es muy poco confiable, pues proyecta su ortodoxia contemporánea en el pasado —del mismo modo que si los exégetas del Nuevo Testamento quisieran comprobar que Jesús era católico o metodista.

Fred Donner ha argüido contra Crone y Cook, en lo relativo a la temprana fecha de la recopilación del Corán, basado en sus lecturas del propio texto. Él apunta que si el Corán hubiera sido recopilado a lo largo de los tumultuosos siglos iniciales del Islam (con sus vastas conquistas, expansión y los sangrientos incidentes entre los rivales del califato) habría habido evidencia de esta historia en el texto. No obstante, no hay nada en el Corán que no refleje las cosas conocidas de la temprana comunidad musulmana.

Algunos aseguran que los hallazgos arqueológicos de 1972 pueden arrojar luz acerca de los orígenes del Corán. En ese año, durante la restauración del Gran Mezquita de San'a, en Yemen, los obreros se toparon con un "cementerio de papeles" que contenía decenas de millares de papeles en que se leían fragmentos del Corán (los ejemplares del Corán todavía son desechados de esta manera, pues se considera impiedad tratar el texto sagrado como si fuera basura ordinaria). Se creyó que algunos de esos fragmentos eran los textos coránicos más antiguos que se han encontrado. El especialista europeo Gerd-R. Puin ha estudiado estos fragmentos y ha publicado no solamente un corpus de textos, sino también algunos descubrimientos preliminares. Las variantes de los textos descubiertos parecen coincidir con ciertas variantes menores reportadas por algunos eruditos islámicos en sus descripciones de las variantes del Corán, que una vez estuvieron en posesión de Abdallah Ibn Masud, Ubay Ibn Ka'b y Alí, y que fueron suprimidas por órdenes de Utman.

Interpretación del Corán
Hasta la escritura sagrada más clara parece inducir a comentarios e interpretaciones. El Corán ha producido un gran corpus de comentarios y explicaciones. Como se comentó anteriormente, los musulmanes tardíos no siempre comprendían la lengua del Corán, no entendieron ciertas alusiones que eran claras a los primeros musulmanes y estaban extremadamente preocupados en reconciliar las contradicciones y los conflictos aparentes en el Corán. Los comentadores glosaron el árabe, explicaron las alusiones y, acaso más importantemente, decidieron cuáles versos coránicos habían sido revelados primero en la carrera profética de Mahoma (lo cual era apropiado para la naciente comunidad musulmana) y cuáles habían sido revelados después, cancelando o abrogando el texto original. Los recuerdos de las "ocasiones de revelación", es decir, las circunstancias en que Mahoma había hecho públicas las revelaciones, también fueron recopiladas, pues se pensaba que podrían explicar algunas oscuridades.

Por todas estas razones, fue extremadamente importante para los comentadores explicar cómo fue revelado el Corán —cuando y bajo qué circunstancias. Muchos comentarios o tafsir, concernían a la historia. Los primeros tafsir son unas de las mejores fuentes de la historia islámica. Algunos comentadores famosos son at-Tabari, az-Zamakhshari, at-Tirmidhi y Ibn Kathir. Generalmente estos comentarios clásicos incluían todas las interpretaciones comunes y aceptadas, mientras que los comentarios de los fundamentalistas modernos, como el escrito por Sayyed Qutb tienden a dar solo una de las interpretaciones posibles.

Los comentadores se sienten muy seguros de las exactas circunstancias que motivaron algunos versos, como la azora Iqra o las aleyas 190-194, de la azora al-Baqarah. Pero en algunos casos (como la azora al-Asr), lo más que se puede decir es en cuál ciudad estaba viviendo Mahoma en ese momento. En otros casos, como con la azora al-Kawthar, los detalles de las circunstancias están en disputa, pues diversas tradiciones entregan versiones diferentes.

Las más importantes "ayudas exteriores" que se han usado para interpretar los significados del Corán son las hadith — la colección de tradiciones en las que algunos eruditos musulmanes (los ulema) basaron la historia y las leyes islámicas. Los especialistas han inspeccionado las miles de páginas de las "hadith", intentando descubrir cuáles eran ciertas y cuáles eran fabricaciones. Un método muy utilizado era el estudio de la cadena de narradores, los isnad, a través de los cuales fue transmitida la tradición.

Obsérvese que aunque se dice que ciertos hadith — los hadith qudsi —, registran las palabras no canónicas que Dios le dirigió a Mahoma, o el sumario de estas, los musulmanes no consideran que estos textos sean parte del Corán.

Similitudes entre el Corán y la Biblia
El Corán retoma las historias de muchos de los personajes y eventos que aparecen en los libros sagrados de los judíos y los cristianos (La Torah, La Biblia) y la literatura devocional (Los libros apócrifos y el Midrash), aunque difiere en muchos detalles. Ciertos personajes bíblicos muy bien conocidos, como Adán, Noé, Abraham, Moisés, Juan el Bautista y Jesús son mencionados en el Corán como Profetas del Islam. Los musulmanes se explican las diferencias y las similitudes entre el Corán y los textos cristianos y judíos afirmando que estos están corruptos y que solo el Corán conserva la versión correcta.

¿El Corán fue creado o escrito?
Las variedades más extendidas de la teología musulmana consideran que el Corán es eterno y que no fue creado. Tomando en cuenta que los musulmanes creen que figuras bíblicas tales como Moisés y Jesús predicaron el islam, la doctrina de una revelación inmutable y no creada implica que las contradicciones que se dan entre los textos más antiguos (la Torá y la Biblia) y el Corán se deben a que los primeros fueron objeto de la corrupción humana.

No obstante, algunos movimientos liberales del Islam, y particularmente las sectas mu'tazili e ismailí, implícita o explícitamente cuestionan la doctrina de un Corán no creado cuando realizan ciertas preguntas relacionadas a la aplicación de la ley islámica. Algunos pensadores contemporáneos, como Reza Arslan, han argüido que tales leyes fueron creadas por Dios para solucionar las necesidades particulares de la comunidad de Mahoma. Otros rebaten que tales leyes no difieren en nada de la ley mosaica.

Entre las razones ofrecidas por la crítica de la doctrina del Corán eterno se encuentra su implicación en el tawhid, o la unidad de Dios. El pensamiento de que el Corán es la palabra eterna y no creada de Alá y que siempre ha existido junto a Él podría llevar a pensar en un concepto plural de la naturaleza de Dios (lo cual podría conducir a lo que los musulmanes consideran el pecado de shirk o idolatría, de la asociación de una cosa con Dios). Preocupados de que esta interpretación parezca hacer eco del concepto cristiano de la Palabra eterna de Dios logos, algunos musulmanes, y particularmente los mu'tazilíes han rechazado la noción de la eternidad del Corán.
La recitación del Corán
La palabra Corán, generalmente, es traducida como "recitación", en indicación de que no puede existir como un simple texto. Siempre ha sido transmitido oralmente al mismo tiempo que gráficamente.

Para al menos ser capaz de realizar una salat (oración), una obligación indispensable en el Islam, un musulmán tiene que aprender al menos algunas azoras del Corán (generalmente, empezando con la primera azora, al-Fatiha, conocida como "los siete versos repetidos", y luego avanzando hasta las más cortas que están al final del libro).

Una persona que pueda recitar todo el Corán se llama qāri' (قَارٍئ) o hāfiz (términos que se traducen como "recitador" o "memorizador," respectivamente). Mahoma es recordado como el primer hāfiz. El canto (tilawa تلاوة) del Corán es una de las bellas artes del mundo musulmán
Formato del Corán
El Corán consiste en 114 azoras (capítulos) compuestas a su vez por un total de 6.236 aleyas (versos) dejando por fuera 112 de los 113 bizmillas con que empiezan las azoras pues son idénticos ("En el nombre de Dios, el Compasivo y Misericordioso") y, por lo general, se dejan sin enumerar. De manera alternativa, se pueden incluir los bizmillas en el conteo de los versos, lo cual arroja un número de 6.348 aleyas. El número exacto de aleyas ha sido discutido, no por una disputa relativa al contenido del Corán sino debido a los métodos de conteo. Varios "musulmanes de El Corán original" han rechazado dos versos del Corán por considerarlos espurios y trabajan con la suma de 6.346). Por lo general, los musulmanes no se refieren a las azoras por sus números sino por un nombre derivado del texto de cada azora. Las azoras no están dispuestas en orden cronológico (en el orden en el que los estudiosos islámicos suponen que fueron reveladas) sino que están ordenadas según el tamaño, aunque no de manera exacta; también se cree que este método es de inspiración divina. Luego de una breve introducción, aparece en el Corán la azora más larga y el texto concluye con las más cortas. Se dice que hay aproximadamente 77.639 letras en el texto.

El género literario del Corán
El Corán mezcla la narrativa, la exhortación y la prescripción legal. Por lo general, las azoras combinan estos tres tipos de secuencias textuales y no siempre de maneras que resultan obvias para el lector, sino algunas veces de formas inexplicables. Los musulmanes señalan que el estilo único del Corán es un indicio más de su origen divino.

Existen muchos elementos que se repiten en el Corán: epítetos ("Señor de los cielos y la tierra"), oraciones ("Y cuando dijimos a los ángeles: 'Postrados ante Adán', todos se postraron"), e incluso historias, como la historia de Adán. Los especialistas musulmanes explican estas repeticiones como una forma de enfatizar y explicar diferentes aspectos de temas importantes. Asimismo, los académicos señalan que las traducciones a las lenguas occidentales demandan grandes cambios en la redacción y en el orden para poder mantener la explicación y el significado específicos.

El Corán oscila entre la rima y la prosa. Tradicionalmente, los gramáticos árabes consideran que el Corán es un género único en sí mismo. No es ni poesía (definida como palabras con métrica y rima) ni tampoco prosa (definida esta como una conversación normal, pero sin métrica ni rima, saj').

El Corán en ocasiones utiliza rima asonante entre los versos sucesivos; por ejemplo, en el inicio de la azora “al-Faǧr”:

Wa-l-faǧr(i),
Wa layâlin ʿašr(in),
Wa-š-šafʿi wa-l-watr(i)
Wal-layli 'iḏâ yasr(î),
Hal fî ḏâlika qasamun li-ḏî ḥiǧr(in).


o, para dar un ejemplo menos asonante, la azora “al-Fîl”:

'A-lam tara kayfa faʿala rabbuka bi-'aṣḥâbi l-fîl(i),
'A-lam yaǧʿal kaydahum fî taḍlîl(in)
Wa-'arsala ʿalayhim ṭayran 'abâbîl(a)
Tarmîhim bi- ḥiǧâratin min siǧǧîl(in)
Fa-ǧaʿalahum ka-ʿaṣfin ma'kûl(in).


Obsérvese que las vocales finales de verso se dejan sin pronunciar cuando estos se pronuncian de manera aislada, se trata del fenómeno regular de las pausas en el árabe clásico. En estos casos, “î” y “û” riman a menudo y hay una cierta búsqueda de variación en las consonantes en posición final de sílaba).

Algunas azoras también incluyen un refrán que se repite varias veces, por ejemplo “ar-Rahman” ("¿Entonces cuál de los favores de tus señores negaréis?”) y “al-Mursalat” ("¡Reproches ese día a los que repudien!”).

El Corán del siglo XVIII
Los estudiosos islámicos del Corán dividen los versículos del libro en dos partes: los revelados en La Meca y los revelados en Medina después de la Héjira. En general, las azoras más viejas, de la Meca, tienden a contar con versículos más cortos, mientras que las de Medina, que lidian con cuestiones legales, son más largas. Contrástense las azoras de La Meca transcritas antes y unos versículos como los de “al-Baqara”, 229:

"Los divorcios se pueden llevar a cabo dos veces, después de lo cual debe reanudarse el matrimonio en forma honorable, o bien disolverse de buenas maneras. No es correcto que los hombres les quiten a sus esposas los regalos que les hayan dado, excepto cuando ambas partes teman no ser capaces de mantenerse dentro de los límites impuestos por Alá. Si los jueces realmente temen que ellos no sean capaces de mantenerse dentro de los límites impuestos por Alá, no hay culpa en ninguno de ellos si ella da algo a cambio de su libertad. Estos son los límites ordenados por Alá, de modo tal que nos los violentéis, puesto que si alguien violenta los límites de Alá, esa persona se hará daño a sí mismo y a los demás".

Del mismo modo, las azoras de Medina tienden a ser más largas; entre estas se encuentra la más larga del Corán: "al-Baqara".

2006-08-15 11:07:42 · answer #3 · answered by Anonymous · 0 1

Yo lo lei, pero no se acerca en nada a la Biblia. La Biblia es la palabra de Dios. En el Coran se sacaron muchos pasajes de la Biblia. En ella se habla bien de los cristianos, los judios y de los patrialcas y profetas, de Jesus y los apostoles de Jesus. Pero en la practica estan contra los cristianos y judios.

2006-08-15 07:42:42 · answer #4 · answered by rickart24 7 · 0 1

yo he leido el koran, si has leido la biblia, es casi semejante, solo cambian nombres, fechas y lugares. no se por que, pero he llegado a pensar que todas las religiones, son una misma o en su defecto, son derivaciones, asi que no se porq las guerras por cuestiones religiosas, en fin, la vida es asi

2006-08-15 07:15:49 · answer #5 · answered by GEORGE 6 · 0 1

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