Nuevos y Urgentes: MENSAJE SOBRE LIBRO Y PELICULA DEL CODIGO DA VINCI
Enviado por: Admin en 26 May, 2006 - 06:35
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Reina y Señora de Todo lo Creado
Aparición en Costa Rica para Juan Pablo
MENSAJE SOBRE LIBRO Y PELICULA DEL CODIGO DA VINCI
En la Aparición del Domingo 7 de mayo del año 2006, entre otras cosas, la Reina y Señora de Todo lo Creado reveló lo siguiente:
Nuestra Señora:
¡Para siempre sea Alabado Jesús Sacramentado!
¡La paz de Dios sea con ustedes!
Yo, Su Madre, les agradezco por haber respondido a Mi llamado.
¡Besad el suelo en penitencia!
Ahora decid:
« ¡OH Mi Jesús!, es por Tu amor, por la conversión de los pecadores y en desagravio por los pecados que se cometen contra el Inmaculado Corazón de María ».
Es a la Iglesia que va dirigido Mi mensaje hoy.
¿Porqué no a los masones, porqué no a otras sectas?
Porque no creen. Evidentemente no les interesa.
¿Por qué a la Iglesia?
Porque Soy Madre de Ella y ha caído en error, debo hacerle ver sus errores. Es la Iglesia la depositaria de la fe y de la doctrina de Mi Hijo y
¿qué han hecho por defenderla?
Así pues, digo esto:
He aquí que Yo Soy la Bienaventurada siempre Virgen María, Madre de Dios Único y Verdadero, Eterno y Vivo. Soy la Madre del Redentor, de Jesucristo Resucitado; también hoy os estoy llamando como jamás He cesado de hacerlo.
Todos los días sale el sol y se vuelve a ocultar, cada día transcurren las horas, los minutos y segundos, unos nacen y otros mueren, otros más envejecen, pero el Señor sigue siendo el mismo; el Dios de Israel, el Único Dios y Señor, Padre de Jesucristo, Padre de todos nosotros, Él es el Mismo.
Su Palabra y Su Ley es la Misma. Él es el Dios de Abraham, de Isaac y Jacob. El es el Dios que libertó a Su pueblo de la esclavitud, es el Mismo que creó el Cielo y la tierra, ángeles y hombres, es el Mismo Señor Soberano, que no puede contener ni el Universo infinito.
Es Él, el Mismo que abre el mar, que hace brotar agua viva de la peña, que hace llover maná sobre Su pueblo hambriento, Él es el mismo. Desde todos los siglos y desde el primer hombre, todos han conocido la muerte, pero el Señor Dios es Eterno, Suyo es el tiempo y la eternidad. Una sola palabra de Su Boca basta para hacer temblar y estremecer todo. Su Voluntad gobierna el universo.
El hombre es polvo, un nada; el hombre es una partícula llamada a desaparecer; Dios es infinito e inmenso.
¿Qué es entonces el hombre ante Su Dios?
Dios le creó por amor, porque deseaba tener una criatura a quién amar y entregarle Su Amor de Padre Amoroso.
Escuchando al tentador, el hombre cayó por su propia cuenta... y,
¿qué hizo Dios?
Enviar en la plenitud de los tiempos a un Salvador para esa criatura, y El Creador se crea a Sí Mismo en materia humana, y Su Divinidad se une a una humanidad para poder de esta forma engrandecer la figura de aquella criatura degradada que cayó del pedestal sublime en el que El Creador le había colocado.
Y así, Dios Mismo encarnado en un Cuerpo Humano, se vuelve no solo Creador, no solo Dios del hombre sino también Hombre con el hombre, Hermano con el hombre, Criatura con el hombre, Padre e Hijo con el hombre.
Yo les digo, no es de extrañar todo cuanto en éste tiempo surge con el afán de engañar y perjudicar al hombre; es el mismo y eterno engaño de Satanás el diablo, que no es más poderoso que Dios porque no es Dios, es criatura; y aunque es criatura es un ser espiritual, mayor en poder que el hombre, -escuchen esto-, pero no mayor en dignidad, porque él es la ignominia misma; más en cambio el hombre no solamente es criatura de Dios, sino hijo.
Os pongo éste ejemplo: generalmente los padres son muy amorosos con sus hijos, llegada cierta edad y madurez el hijo -y según con las personas que se acompañe-, comienza a pensar que su padre es anticuado, que su padre no tiene razón ni lógica, comienza a creerse superior y a rechazar al padre. Pero aún así el padre sigue amándole y buscando una y otra forma de poder ayudar a ese hijo; entre eso, algunos castigos.
De esta forma, también Dios. Él sabe que hoy en día el hombre se cree superior. Otros por su conocimiento, y que llamaremos un conocimiento falso, niegan la existencia del Todopoderoso. Otros inspirados por Satanás ponen en la mente del hombre: Dios, Jesucristo, Iglesia, Sumo Pontífice, obispos, sacerdotes, ¡todo una gran mentira!; para no permitir hacer nada y tener al hombre atado y esclavizado a un modo de vivir egoísta y tonto.
Y con esta misma inspiración del demonio inventan una interminable serie de mentiras, falsedades, abominaciones, herejías, apostasías; todo puesto en bandeja de oro por el padre de la mentira, para hacer que esas “mentes brillantes”, -obviamente no-, confundan a los humildes.
Su gran decir: “Dios no existe porque jamás le hemos visto, jamás Le hemos visto obrar un milagro. Cuando hemos puesto a Dios a competir mediante Sus Ministros contra nuestras filosofías, siempre ha perdido”.
Es pues porque olvidan un detalle: Dios no se rebaja a seguirle el juego a ninguna persona, Dios no necesita demostrar Su Poder. Dios se manifiesta -Es- en el corazón de los humildes, y ustedes son prueba de ello. Dios derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes.
¿Creen ustedes qué es muy difícil para Dios, a cómo está el mundo actual, venir en un Trono de oro escoltado por Sus ángeles, y fulminar a todos estos herejes, apostatas, calumniadores de la fe, a todos esos psicópatas, dictadores que se sientan en tronos presidenciales para poco a poco acabar con el mundo?
¿Creen ustedes que Dios no puede hacerlo?
¡Claro que puede!
Pero Mi Hijo dijo ante uno de ellos:
«Mi Reino no es de este mundo».
Dios permite todas estas blasfemias para probar el corazón -escuchen bien- de aquellos que se dicen sus hijos, sus seguidores; mejor aún, sus ministros, sus sacerdotes. Yo me alegro por ustedes porque van venciendo, porque para nadie es secreto la persecución que por la causa de Mi Hijo y Mía ustedes han experimentado y de la cual por el poder que tengo siempre les he librado.
Así pues, no se ve ni afectado ni reducido el Poder, el Esplendor, la Magnificencia del Creador del Mundo.
¿Es preocupante la situación actual del mundo? Lo es.
¿Para quién?
¿Para Dios acaso? No.
Dios se basta así Mismo y no necesita del hombre. La situación del mundo actual es preocupante para el hombre mismo, y es un gran mentiroso el que diga que Dios no ha hecho nada. Dios viene haciendo grandes cosas desde la caída del primer hombre. Ha enviado profetas, ángeles.
En la plenitud del tiempo envió a Su Hijo Jesucristo no sólo con Palabras de Vida, con la Enseñanza Absoluta, no sólo con milagros poderosos; le envió como Redentor de todos los hombres con el sacrificio de Sí Mismo.
Si bien es cierto que este llamado Mío es ante todo por esta nueva patraña de Satanás en contra de la Iglesia de Jesucristo [1] en contra de la verdadera y sana Doctrina de Mi Hijo; la Iglesia jamás será destruida.
Y sí, Yo hago este llamado, pero no porque esté preocupada de que la Iglesia vaya a ser destruida con esto; lo hago para que las almas confundidas no caigan en error y puedan encontrar la Luz.
¿Para qué acreciente la Iglesia?
Eso es bueno, pero no es ese el objetivo, sino más bien para que se conviertan y hereden la Vida Eterna.
En nada se ve la Iglesia Católica afectada con esta o con ninguna otra artimaña. Jesucristo Mi Hijo vino hace más de dos mil años.
¿Ustedes creen que desde el principio todo fue maravilloso?
Todos -desde los primeros cristianos hasta el día- han enfrentado persecuciones bárbaras por defender el Nombre Santísimo de Jesús, y la Iglesia jamás ha perecido.
¿De qué es esto prueba?
¿De qué Jesucristo El Hijo de Dios es un invento del hombre?
Es prueba de que Su Palabra Divina se cumple, porque Él dijo:
«Mi Iglesia, la Iglesia fundada en Pedro, no será destruida, y Yo estaré con ustedes hasta el fin del mundo».
En La Eucaristía sí, pero también de esta forma especial [2].
Esto debería de servir como prueba para aquellos que no creen que Mi Hijo esté presente en La Sagrada Hostia o aún peor, que no sea capaz de obrar milagros.
Durante todos los siglos la Iglesia, guiada no sólo por hombres, -depositada en manos de hombres sí, pero guiada por Dios Espíritu Santo, Una, Santa y Verdadera- se ha levantado una y otra vez enarbolando el Sagrado Signo de La Cruz.
Si Mi Hijo hubiese querido que todo fuese fácil desde el principio, ¡por Dios!, no habría abrazado la Cruz.
El es el primer calumniado, el primer odiado, perseguido, e incluso crucificado.
Así pues, la Esposa debe parecerse al Esposo, y la Esposa del Cordero está igualmente llamada al sacrificio. Ahora bien, con esta nueva mentira [1] el mayormente calumniado es Jesucristo Nuestro Señor. Si esto así ocurre, piensen qué no se dirá también de Mí, pero Él es el mayormente importante.
Les repito, ¿qué es el hombre ante Dios?
Esta nueva mentira es en tamaño y en poder como la picadura de un mosquito a un gran elefante.
¿Hay alarma en el Cielo por tal hecho?
Más bien hay alarma en Mi Inmaculado Corazón, pero por todos Mis Hijos que ignorantemente se dejan llevar y confundir; y es por esto lo importante de la misión de ustedes.
¿Quién es Jesucristo?
Él es Dios, Único y Verdadero, es la Segunda Persona de la Santísima Trinidad, un sólo Dios con el Padre y el Espíritu Santo, Hijo Único de Mi Inmaculado Seno.
Él es Dios. El confió Su Iglesia a los apóstoles, y los apóstoles inspirados por el Espíritu Santo como Ustedes pueden leerlo, supieron muy bien a quien escogían, e iban entregando la Iglesia en manos de personas capaces y santas.
Todo lo que surge hoy en día no tiene mayor trascendencia que todo lo que surgía en los comienzos del Cristianismo; lo único es que con los medios de comunicación pueden en segundos extender una mentira alrededor de todo el mundo.
Antes no había mayor trascendencia porque les era imposible hacerlo en segundos, pero el engaño de Satanás ha existido desde siempre, desde el primer hombre; y lo seguirá habiendo hasta que no venga Mi Hijo Dios Glorioso entre las nubes del cielo.
¿Deben ustedes temer? No. No deben temer a los que son capaces de matar el cuerpo sino el alma, y en este templo sólo habita El que da Vida plena al alma.
He aquí entonces:
¿Quién tiene la culpa de que surjan estas y otras desgracias con el nombre y la presentación que sean, pero que todas están plasmadas y cargadas del engaño y la apostasía de Satanás?
¿Es culpable alguien con mucho dinero, fanático en contra de Jesucristo, que decidió llevar a los cines algunos escritos de otro ser endemoniado, infeliz, y que quiso atacar el Santo Nombre de Jesucristo?
¿Son culpables los estudios?
¿Son culpables los centros de comunicación?
¿Son culpables los actores y demás?
¿Son culpables todos ellos?
¿Quién puede ser entonces el culpable?
¿Es culpable de todo -absolutamente- Satanás?
Porque si así lo fuera y Dios tuviese temor de que Satanás logre perder y condenar al mayor número de almas, el Señor ya le hubiese destruido,
¿O creen ustedes que Dios no puede hacerlo, es mayor y más poderoso el demonio que Dios?
¿Dónde está la culpa?
Yo Sé donde está la culpa.
La culpa está en aquellos corazones que han predicado a Jesucristo sin estar plena y verdaderamente convencidos de que Jesucristo es el Hijo de Dios Vivo.
¡Esos son los culpables!, porque en su falta de fe permiten que todo esto llegue.
¿Dónde están los primeros cristianos valerosos que por defender el Nombre de Mi Hijo daban su vida?
¿No se esconden hoy los qué se llaman verdaderos ministros de Mi Hijo?
Yo, la Madre de Jesucristo Rey, los desafío a salir de su escondite y dar la cara por Aquel que es el Dueño de la Iglesia que ellos conducen y están llevando por la perdición, que han perdido la fe y no creen en Jesucristo, que Él exista o que sea Dios.
¡Ya verán, solamente esperen, ya verán que Mi Hijo sigue siendo el mismo y sigue estando vivo!
No pueden decir que sí creen firmemente, porque si creyeran firmemente en Jesucristo creerían firmemente en Su Palabra, y Su Palabra dice:
«Defender aún a costo de su vida»
Si creyeran firmemente Lo defenderían porque recordarían:
«no teman al que puede matar el cuerpo sino al que puede matar el alma»; y por proteger sus cuerpos están dejando perder gran cantidad de almas.
¡Estos son los culpables! Culpables, porque vino Jesús y no le escucharon,
culpables porque He venido y vengo Yo, y si me hubiesen colaborado, hace años Yo hubiese logrado convertir a este país. Culpables porque no promueven Mi voz y mucho menos enseñan correctamente la Palabra de Mi Hijo.
Culpables porque sí permiten modas sacrílegas en la Casa de Dios, permiten absolutamente todas las bajezas. Culpables porque se dicen ser Ministros de Jesús, conocerle y amarle; y tiemblan como conejos cuando se ven forzados a defender la Verdad. Culpables porque Jesucristo sigue siendo el gran desconocido del pueblo, cuando ellos dicen ser los maestros, conocedores y depositarios de la fe.
A estos y a todos los católicos, Yo la Madre y Reina de la Iglesia llamo en este día a dar la cara por Jesucristo, porque hace mucho Él dio la Vida por todos.
Hijitos queridos: así pues,
¿qué es un código?
Es una contraseña o el número que muy pocos saben.
Código es también la clave para abrir algo, algo que está secreto, su misma palabra lo dice: “El código”.
Cristo Jesús jamás necesitó ningún código, lo que es secreto necesita un código, pero Mi Hijo todo lo hizo a la Luz de la Verdad, no necesita esconder nada. Se esconden los que tienen miedo, estos permanecen en la sombra. Los hijos de Dios actúan en la Luz, por esto mismo aquí nada hay secreto, sino que la Luz de Cristo llena e inunda todo, como Ha inundado sus corazones y los Ha hecho abrirse y creer que esto es Obra Suya [2].
Mi Hijo es el Cristo de los Evangelios del Canon Romano.
Otros escritos, que los Santos Pastores de la Iglesia no incluyeron guiados por el Espíritu Santo no hablan con verdad, ni tampoco fueron escritos por otros apóstoles.
Yo misma antes de Mi Asunción al Cielo escogí por encargo de Mi Hijo quiénes escribiesen El Evangelio y les dije: «Hablad sobre Él, únicamente sobre Él, no escribáis nada o muy poco sobre Mí porque es Mi Hijo Dios quien debe brillar.
Él luego hablará de Mí y Me hará conocer en el mundo por otros medios».
En el Evangelio, de Mi Persona y participación está escrito lo fundamental y necesario: la Encarnación del Verbo, Su Nacimiento Glorioso, Mi intercesión por los necesitados y la toma de la Iglesia como posesión e Hija Mía al pie de la Cruz. Por esto Yo tengo la dulce misión de acompañar la Iglesia de Mi Hijo - hijos Míos- por el legado de Cristo agonizante.
Es Mi tarea como Madre y como Reina: protegerla, alumbrarla y esclarecer sus dudas; y como ven sigo cumpliendo esta Misión porque Mi Hijo está Vivo. El hombre llevado por el odio de Satanás confabula, y en unión unos con otros, inundados por ese odio satánico conspiran en contra de la Iglesia de Cristo y en contra de Su Nombre con una y otra cosa.
Con estas palabras Yo quiero hablar en contra del libro y película llamada “El Código”; pero hay muchísimas otras cosas que también cumplen la misma tarea.
Confabulan contra Cristo y Su Iglesia el desorden, la falsa doctrina, tanta liberación, tantas corrientes falsas en contra de Cristo, se levanta el aborto, la drogadicción, el libertinaje, cantidades de pecados en la sociedad comenzando desde el seno de la familia.
Si bien es cierto que el libro y película preocupan, también todas estas situaciones y pecados preocupan gravemente Mi Inmaculado Corazón, porque se trata de la destrucción de Mis hijos, unos en contra de otros. El hombre quiere destruir la imagen y el recuerdo de Dios para sentirse a sí mismo dios; pero el hombre es extremadamente limitado, él no puede crear la lluvia ni hacer germinar la tierra.
El hombre sabe sentarse sobre un trono, dictar, pedir, mandar, gobernar y destruir, sentirse superior; pero no puede dar la vida, sólo puede quitarla. Feliz el hombre cuyo Dios es El Señor.
Algunos pueden pensar: son pocos quienes aquí vienen. [2] Yo tengo respuesta para eso: con once extendió Mi Hijo El Evangelio sobre todo el mundo; porque no es la cantidad sino la fuerza del corazón y la decisión del Espíritu llevados por un amor a Jesucristo y Su Palabra, por una vivencia de amor al prójimo como el Maestro enseñó, es El Espíritu Santo el Que se encarga. Pongan ustedes una parte de sí y verán el Actuar de un Dios Poderoso.
“El hombre que confía en El Señor jamás es defraudado y verá abrirse no sólo el mar sino multitudes de perseguidores delante suyo, y pasar victorioso como hijo del Rey si guarda las promesas del Señor”.
Lastimosamente, los encargados de anunciar estas Verdades no creen en ellas.
El pueblo se deja manipular fácilmente, aquellos encargados de enseñar lo bueno y lo santo, al decir: “no crean en esas cosas” -por ejemplo esto- [2], confunden al pueblo carente de enseñanza, y el pueblo se ve privado de una gran bendición.
Cuánto bien no harían atrayéndolos hacia Mí, cuántas vendas de ceguedad no quitaría Yo de sus ojos, cuántos corazones no se convertirían. Yo traería la paz, por esto la responsabilidad es muy grande. Y Yo pregunto,
¿para que se ordenan y consagran si no creen en Jesucristo? Y peor aún,
¿por qué no se quedan ellos en silencio y permiten que el pueblo humilde y santo de Dios se acerque con corazón abierto y dispuesto a escuchar Mi enseñanza amorosa y puedan de esta forma convertirse?
Entonces una nueva pregunta: ¿Qué hace más daño, un libro, una película, o la negligencia de los pastores?
Si tan solo quisieran advertir al pueblo de todas las corrientes de perdición que vienen constantemente lanzando contra la Santa Iglesia sus dardos llenos de veneno.
Yo puedo advertir de todo esto, pero los pastores son culpables también de que no se Me quiera escuchar. Descaradamente no defienden lo que tienen que defender, no dan la cara por lo que tienen que darla, pero sí pueden -arrogantes y orgullosos- venir hasta Mi Templo, donde todo se hace a la luz, donde se vive en adoración de Jesús constantemente, y como si fuese algo malo en su repugnante ceguedad y soberbia, preocupados como dicen estar de un pueblo al que ellos mismos lanzaron fuera; vienen a entregar un papel que no deja de ser eso, un papel; como nada es el hombre orgulloso ante Dios [3].
Para esto sí tienen ánimo, sí tienen fuerza , capacidad, y lo hacen con mucho gozo, guiados por el príncipe de la mentira y de la tiniebla, que sólo desea destruir las obras buenas del Rey lleno de Misericordia... pero me gustaría verlos tan solo una vez con el mismo ímpetu y preocupación apostólica defendiendo El Nombre de Mi Hijo Jesucristo ante todas estas blasfemias y herejías que se levantan en contra de la Iglesia Sacrosanta; mientras ellos miran la televisión o se pasean plácidamente en sus lujosos vehículos.
Mi Hijo, El Buen Pastor caminaba en busca de Sus ovejas.
Es verdaderamente preocupante.
¡Claro que lo es!
En las universidades se acaba con la fe. Pues bien, Costa Rica se dice Estado católico. Si la Iglesia con fuerza, con autoridad dijese: ¡alto, ya basta, a esta cultura de muerte que se ha apoderado de la sociedad!, haría que la fe en Cristo Vivo y Resucitado estuviera no sólo en el Templo, sino en las escuelas, colegios y universidades; y los hombres se educarían no solamente para ser máquinas de trabajo, o hacedores de dinero sino para ser hijos e hijas de Dios y levantar a un país y a una sociedad decadente por la mala praxis de gobernantes y clérigos.
Yo hago un llamado, Estoy aquí como Madre de Dios, como Su Embajadora, como la Madre de un Pueblo que le preocupa. Llamo a quien quiera escuchar, exhorto a quien quiera colaborar, animo a quien quiera perseverar y bendigo a los que no se dejan opacar. La Iglesia fue fundada por un Valiente en otro valiente, los que claudican son cobardes como cobarde es Satanás el diablo.
Si la Iglesia en Costa Rica cree que todo está perdido, Me compadezco de su pensar porque no lo es. Ahora bien, Yo les Quiero recordar para qué se ordenaron, con qué fin lo hicieron, por Quién y para servir a Quién.
Yo les animo a retomar su Misión, a dejar tanta negligencia, tanta soberbia que no les permite ver más allá de su nariz. Yo les digo: abran sus ojos de una vez por todas, Dios no se puede encasillar. ¿Cómo es posible que no crean que Dios puede hacer esto y mucho más si es el Mismo que creó cielos y tierra?
Al no creer, están dudando del Poder de Dios, al no creer, están ofendiendo el Amor y la Misericordia de Dios que permite esto precisamente por eso, ¡por Misericordia y Amor! Al no creer, están dando evidencia de que están vacíos y no tienen amor, porque si amaran verdaderamente sabrían que Dios por Amor es capaz de esto y de mucho más, como por Amor fue capaz de entregar a Su Hijo.
Si hay un culpable, lo es todo aquel que teniendo un llamado ha enterrado el talento y ha esperado sin hacer nada. ¡Levántense! como se levantó Mi Hijo del sepulcro.
En ningún momento pueden permitir que otros terceros vengan a ofender El Nombre del Señor con calumnias y mentiras, porque Mi Hijo es Dios y es siempre El Mismo. Muchos sacerdotes no viven en castidad, y lo que es peor, muchos tienen relaciones entre ellos mismos. Esto es cierto y es preocupante, pero si se arrepienten de corazón Mi Hijo les perdona. Yo les invito a arrepentirse.
Por no vivir en castidad, Satanás les presenta muchas ideas, incluso haciéndoles creer que tampoco Mi Hijo lo hacía y por esto no les importa si Jesús es ofendido con toda clase de mentiras como las que se dicen libro y película como esta.
Yo los llamo desde el fondo de Mi Corazón Inmaculado. Estoy aquí por Amor y porque Me preocupan; sólo deseo el bien de todos y que todos los hombres lleguen al conocimiento de la Verdad. Y la Verdad es Jesucristo Mi Hijo, que jamás necesitó de ningún “código” o escondite, porque todo lo hizo orgullosamente a la Luz de Dios.
Es todo.
¡Les bendigo y les animo a llevar este mensaje en contra de todo!
¡El Reino de los Cielos es de los valientes que han sabido tomar la Cruz y caminar tras los pasos de Su Maestro!
¡Gracias por su respuesta a Mi llamado!
¡La paz de Mi Hijo los guarde!
¡Alabado sea Jesucristo!
[1] El libro y película “El Código da Vinci”.
[2] Las revelaciones privadas de Jesucristo en el mundo, como las que suceden en El Santuario de la Reina y Señora de Todo lo Creado en San Isidro de Grecia, Alajuela.
[3] Se refiere a la única visita que hizo un sacerdote de Grecia al Santuario, acompañado por otro clérigo.
Declaración del MNDP:
El “MINISTERIO NACIONAL DE DIFUSIÓN PROFÉTICA” y sus Representaciones Nacionales en Colombia, Argentina, Brasil, Perú, España, México e Italia se suman a la exhortativa de la Santísima Virgen María hecha en este Mensaje, convocando a todos los Católico-Cristianos y Creyentes en Cristo y a todos los hombres de buena voluntad a unirse en esta gran cruzada contra los embates del demonio y sus lacayos que escriben y producen películas, programas de televisión y radio, revistas y artículos impresos o en Internet con la finalidad de cometer sacrilegio, herejías, blasfemias y calumnias contra Nuestro Señor Jesucristo, contra Dios Padre y el Espíritu Santo y contra la Santísima Siempre Virgen María, pues este embate y grave problemática no sólo abarca a Costa Rica sino a todas las Naciones del Mundo y a la mismísima Iglesia Católica, tanto Jerarquía como fieles.
Le invitamos a reproducir este Mensaje de la Virgen y a difundirlo por todos los medios posibles a su alcance. Dejemos de ser tibios, temerosos, apáticos y negligentes y por tanto culpables del estado de cosas ahora prevalecientes, es hora de formar el gran frente común contra el infierno y sus aliados que quieren arrastrarnos al fango infernal. ¡Edifiquemos el Reino de Dios en la Tierra! “Dios quiere valientes, decídete ya”. Consulta las páginas Webs: http://www.finaldelotiempos.com.mx y consulta la fuente que difunde este Mensaje Original de la Virgen María en:
Pagina web original http://www.reinadetodolocreado.org/2006/070506.htm
2006-08-09 11:05:41
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answer #4
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answered by Anonymous
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