Dos argentinos llegan a Lima un día domingo, y se van a misa. El
párroco los escucha conversando, y comienza su misa:
"Hermanos... ustedes saben que María Magdalena era una ramera, una
pécora, la única que hizo dudar a nuestro señor Jesucristo... pues
bien, ¡María Magdalena era argentina!"
Los dos argentinos se miraron indignados y decidieron regresar el
siguiente domingo a misa. Ese día, el párroco empieza su sermón:
"Hermanos... cuando nuestro señor Jesucristo fue acusado, Poncio
Pilatos decidió condenarlo y se lavó las manos... pues bien, ¡Poncio
Pilatos era argentino!"
Irritados, los dos argentinos se fueron a buscar al obispo y le
contaron lo sucedido. Este aseguró que reprendería al cura ese mismo
día. Satisfechos, los argentinos regresaron nuevamente a misa, y se
sentaron en primera fila, esperando:
"Hermanos...", dijo el cura. "Hoy vamos a hablar de la última cena...
Jesús al saberse traicionado les dijo a sus apóstoles: Yo sé que uno
de ustedes me traicionará mañana... uno de ustedes que hoy come
conmigo me venderá por monedas de plata... y ese uno ¡eres tú, Judas!
Entonces Judas se paró y dijo: ¡Che Jesús, cada vez que tomás te la
agarrás conmigo!"
2007-11-20
22:29:08
·
13 respuestas
·
pregunta de
quique22
4
en
Chistes y humor